Pérez recorre la provincia para militar la nueva Ley de Aguas

El gobernador, Francisco Pérez, eligió los cauces de agua de Irrigación antes que las propias rutas de Vialidad para trazar sus recorridas por la provincia bajo la consigna autoimpuesta de "gestionar en territorio" que se ha convertido en la principal 'bajada de línea' a su gabinete para los próximos dos años. Y en sus visitas ya milita la nueva Ley de Aguas, cuyo texto deberá entregar la UNCuyo en junio próximo.

En los últimos treinta días, el Gobernador ha recorrido inspecciones de cauce de San Rafael, General Alvear, Lavalle, San Martín, Junín y Guaymallén y tiene proyectado mantener este ritmo de visitas al menos por cuatro o cinco meses. La semana que viene le apuntará al Valle de Uco y regresará al Este provincial.

"En la provincia hay 135 inspecciones de cauce y la idea es llegar a todas, aunque con las más pequeñas habrá reuniones conjuntas", confirman en Irrigación. El jueves, en Guaymallén, mantuvo un encuentro con productores de ocho inspecciones de La Primavera y Pedregal.
 
Un día antes lo hizo en el cauce Canal Gustavo André, en Lavalle. La semana anterior con las inspecciones de cauce de Rama Chimbas, en San Martín, y de los canales Medrano y Derivados, en Junín. Y poco antes con productores de La Llave y Goudge en San Rafael y Bowen y Nuevo Alvear en el departamento de General Alvear.

Las inspecciones de cauce son una instancia de organización democrática de los propios productores mendocinos que ocupan un lugar central en el funcionamiento del Departamento General de Irrigación. Los inspectores se han elegido históricamente por el voto directo de los productores, tal como volverá a suceder en octubre próximo.
 
Y los votantes abarcan tanto a los grandes como a los pequeños y a las producciones más diversas: frutícola, olivícola, hortícola, vitícola e incluso pecuaria de cada cauce. El Gobierno provincial ha puesto la vista en estas inspecciones como un "ámbito natural" de funcionamiento horizontal propicio para intentar su política de "acercar el Estado a la gente", de la cual dependen tanto la calificación final de la actual gestión como el color político de la próxima.

"Se trata de reuniones con cuarenta productores promedio que nunca duran menos de tres horas en las que afloran los problemas por región y en las que el Gobernador ofrece las herramientas del Estado para acercar respuestas en una segunda recorrida de funcionarios", describen tanto en la Casa de Gobierno como en Irrigación.

En general en estas visitas a los departamentos participan los intendentes comunales y algunos concejales y legisladores, lo que acerca aún más a estas inspecciones a los 'consejos de cuenca' que propicia un proyecto de ley del Ejecutivo -impulsado por Irrigación- que aún no tiene tratamiento en la Legislatura.

En estas recorridas el Gobernador suele  estar acompañado por José Luis Álvarez, superintendente General de Irrigación; Ernesto Soler, del Fondo para la Transformación y el Crecimiento; Marcelo Barg, ministro de Agroindustria y Tecnología; Marcos Zandomeni, ministro de Energía, y Guillermo García, presidente del INV.

A propuesta de Irrigación, Pérez eligió 'la ruta del agua' como ordenador general de "la bajada a territorio" de su gobierno. Fue  luego de que el 26 de diciembre anunciara el equipo de trabajo a cargo de la UNCuyo que debe elaborar el primer anteproyecto para la actualización de la legislación hídrica de la Provincia, que deberá estar listo en junio próximo.

En un acto en el centro cultural Julio Le Parc -con la presencia de los ex gobernadores José Octavio Bordón, Arturo Lafalla y Julio Cobos- Pérez se pronunció por una modernización de la ley, ya que "necesita una adecuación a las nuevas formas de producción agroindustrial y a las necesidades de la población en general".