El justicialista Francisco Pérez le entregará hoy al radical Alfredo Cornejo una banda de plomo. Será una de las más pesadas que se haya transferido en los últimos años de la democracia mendocina.
El gobernador saliente está convencido de que -con la ley de Financiamiento- deja las herramientas para resolver rápidamente una crisis de recursos.
Para el mandatario entrante la situación es el resultado exclusivo de "la mala administración y las malas decisiones".
La ceremonia de esta tarde se llevará a cabo con un debate pendiente sobre los grados de responsabilidad en la construcción del actual escenario provincial, tras cuatro años de desencuentros. El próximo ingreso a la Legislatura del primer presupuesto de Cornejo con un pedido adicional de endeudamiento de hasta 4.800 millones, según adelantó en una entrevista publicada por este diario el domingo, aparece como el detonante de la discusión postergada.
Mientras tanto, un gobierno entregará hoy el timón exhausto y dejando una montaña de temas pendientes. El otro, asumirá en situación de emergencia y deberá hacerse cargo de una herencia inflamable que lo expone a una realidad explosiva.
En tanto el Estado, al borde de la 'convocatoria de acreedores', viene juntando reclamos, concentrando protestas y acumulando asuntos pendientes por inercia o desencuentro.
Para empezar, hay dos materias adeudadas y con resolución 'pateada' por un año: la definición del agente financiero de la provincia y la licitación de la nueva concesión del servicio de transporte público de pasajeros. Ésta, con la concesión ya vencida, fue prorrogada por un año en medio de reclamos empresarios por subsidios provinciales adeudados por 150 millones de pesos.
También aguardan definición los proyectos de ley impulsados sin éxito ante una Legislatura cíclicamente empantanada en medio de años de puja entre los protagonistas del traspaso: allí quedaron varados el cajoneado plan de ordenamiento territorial, la virtualmente archivada ley de educación provincial, la nunca ingresada nueva ley general de Aguas y la fracasada reforma constitucional.
Cornejo será quien ponga en vigencia los aumentos tarifarios que dejó firmados o avanzados Pérez -en decretos aún no publicados o bien en trámite- aunque el mandatario entrante le había solicitado que no sólo los firmara, sino que también los aplicara.
No es una novedad que Cornejo no tendrá 'luna de miel'. Ni que el recambio por sí mismo le otorgará de inmediato mucho más aire que el que hasta hoy le faltó a Pérez.
Pero también es cierto que el mandatario radical tiene por delante un panorama bastante más cómodo que el del final de su antecesor: entrará en funciones con mayorías iniciales propias en las dos cámaras legislativas, tendrá una relación con la Nación -Mauricio Macri mediante- mejor a la que supo deteriorar Pérez con Cristina Fernández y contará con 2.600 millones de pesos más de ingresos anuales por coparticipación federal.
Estos dos últimos puntos están condicionados a que el nuevo presidente no modifique ni recorte el decreto de Fernández de Kirchner que eliminó los aportes provinciales a la Anses, al generalizar e incluir a todas las provincias en el fallo de la Suprema Corte para San Luis, Córdoba y Santa Fe.
Cornejo se sentará en el sillón de San Martín rodeado del 'clamor' de cientos de proveedores del Estado que acumulan deudas cuya suma le llevará toda la recaudación de impuestos provinciales y las regalías de un mes. Aunque, por el inminente fin de clases, ya sin el riesgo de interrupción de las 200 mil meriendas y viandas diarias y el servicio de transporte en escuelas rurales mendocinas.
Las urgencias
En los próximos trece días hábiles Cornejo deberá cerrar con Carlos Melconián, el próximo presidente del Banco Nación, la mejora al preacuerdo de refinanciación de los 2.400 millones de pesos que vencen el próximo 31 de diciembre, ya que considera 'caro' el entendimiento que le aprobaron a Pérez por un año.
En estos mismos trece días deberá enfrentar el pago del medio aguinaldo y del sueldo de diciembre (poco menos de 3 mil millones de pesos con cargas patronales), a lo que deberá agregar unos 300 millones más de noviembre, salvo que esta mañana se acredite en las cuentas faltantes de la Salud alguna ayuda nacional extra de última hora.
De este cumplimiento depende que ATE lleve a cabo hoy un paro de actividades con concentración en la Casa de Gobierno -horas antes del traspaso- y que Ampros se declare 'en libertad de acción' en su conciliación obligatoria.
Del pago del aguinaldo -y de la firma del decreto de continuidad de los docentes suplentes- dependen la huelga sin clases ya y movilización del SUTE antes de Navidad.
Para hacer frente a los salarios de diciembre Cornejo espera arrancar en la línea de la ayuda nacional con la que finalizó Pérez. Al parecer, los adelantos de coparticipación se prolongarán un tiempo y todo hace esperar que las paritarias 2016 sean de las más duras de los últimos años.
En la cola de las quejas, el nuevo gobernador encontrará a los intendentes. La Provincia mantiene atrasos con los municipios por más de 280 millones de pesos, de los cuales Las Heras reclama 126 millones y Guaymallén 87.
Desde las comunas que perdió el justicialismo se iniciaron reclamos que el nuevo gobierno deberá atender, aunque con intendentes nuevos del mismo signo. Luján y Malargüe fueron a Tribunales mientras General Alvear, Guaymallén y Las Heras visitaron la Fiscalía de Estado y el Tribunal de Cuentas.
Mientras Cornejo apunta a enviar 'en los próximos días' sus leyes de Avalúo, Impositiva y Presupuesto 2016. Ya tiene en Diputados el proyecto de ley de Emergencia Fiscal y aspira a activar el plan de ordenamiento territorial sobre el que los intendentes del Gran Mendoza buscarán apoyar su gestión, con códigos de comercio y de construcción de un mismo texto.