Francisco Pérez empezó a despedirse de la vida pública y aseguró que vuelve al llano, no importa quién gane el domingo el balotaje. “Voy a volver a ejercer la profesión y a la actividad privada. Llegó el momento de una nueva etapa de mi vida, volver al estudio, al ejercicio de la profesión y, además, disfrutar un poco más de la familia y los afectos”.
Luego recordó que otro gobernador que también era abogado y también oriundo de San Martín, Santiago Felipe Llaver (UCR), cuando terminó su mandato volvió al llano. “Se puede trabajar desde una ONG, no hace falta un cargo público o político para seguir militando. Tengo más de 30 años de militancia y solamente en los últimos ocho años he ocupado cargos públicos”, decía el Gobernador.
Se está yendo. Le queda un único espacio para mantenerse en la vida pública: la presidencia del Partido Justicialista, pero hasta ese lugar está en entredicho. “Se verá el resultado electoral del domingo. Hay que convocar a un congreso partidario, llamar a elecciones, ver cómo queda el peronismo mendocino y el nacional para el año que viene. No tiene sentido apurarse a tomar decisiones”, decía Pérez.
Ayer, quizá por un momento el gobernador Pérez disfrutó de un momento de sol en la Base Cóndor, cuando entregó los nuevos 117 móviles policiales adquiridos por el Gobierno nacional (ver aparte). Pero los cimientos de su existencia parecen hundirse bajo sus pies. No sólo termina el mandato: la realidad financiera y política mendocina le cierra puertas de la vida pública. Hasta no hace mucho soñaba con ser funcionario de una eventual presidencia de Daniel Scioli. Hoy ya no importa si Scioli es presidente, Pérez vuelve a su casa.
De hecho el martes por la tarde, cuando Scioli se regodeaba en el calor de la militancia mendocina, Pérez estaba enfrentando el gélido destrato de los funcionarios del Banco de la Nación Argentina, pero esta nueva reunión no trajo buenas nuevas.
“Estuvimos conversando, vimos muy buena predisposición del nuevo presidente del Banco Nación. Pasamos a un cuarto intermedio para esta mañana (por ayer); quedaron el ministro (Legal y Técnico Francisco) García y el ministro (de Agroindustria Marcelo) Costa, con los abogados del BNA y del Ministerio de Economía de la Nación, atentos a que el ministro Kicillof llegaba ayer de la reunión del G20”, relataba Pérez.
Al hablar de la realidad, el momento cálido bajo el sol se evaporó y Pérez empezó a quejarse veladamente. Primero, del radicalismo y del electo Alfredo Cornejo. Dijo que los atrasos en los pagos de sueldos y proveedores son una situación coyuntural y que “este problema el gobernador electo no lo va a tener. Va a tener herramienta de crédito de más de 8.000 millones de pesos”.
Más adelante diría: “no es la mejor ley, tuvo muchos inconvenientes, mucha disputa política, pero hay una herramienta de crédito que yo no tuve estos dos años. El nuevo gobernador sí la va a tener”.
Luego se quejó de los cambios en las reglas de juego que hizo el Banco Nación. Recordó que sufrió sucesivos recortes en el descubierto bancario: con Juan Carlos Fábrega ese descubierto era de mil millones, en marzo fue recortado a 600 millones (y los sueldos de marzo se pagaron escalonados) y Pérez dijo que este lunes volvió a ser recortado.
“Fueron varias situaciones. Primero no teníamos herramientas, segundo no teníamos presupuesto, tercero cuando tuvimos herramientas todavía no las aprobaba el Ministerio de Economía de la Nación y además el BNA cambió las reglas de juego de manera sorpresiva e intempestiva” se quejaba Pérez.
En un primer momento pareció que la crítica estaba dirigida al ministro Axel Kicillof, al ex titular del Banco Nación Juan Ignacio Forlón y a La Cámpora.
Pero luego aclaró que hablaba de los empleados jerárquicos de carrera del agente financiero de la provincia: “Hace 15 días estuve con la señora Presidenta y se comprometió a que esto se iba a resolver. Después la burocracia estatal o los abogados que asesoran quedan embretados en sus propios dictámenes y no resuelven esto, no acatan la decisión política de la Presidenta”.
Más adelante diría que “yo no puedo hoy vertir declaraciones que de alguna manera agraven o compliquen la situación de los mendocinos. Ellos están por encima de cualquier interés político partidario. Hoy no tengo elementos para abrir un juicio de valor contundente de las causales de que la provincia se encuentre en la situación de octubre y noviembre”.
Sin tener solucionado el endeudamiento por 5.800 millones de pesos autorizados por Ley, Pérez anunció que firmará un decreto para iniciar los trámites administrativos necesarios para llegar a la licitación de ofertas para tomar ese endeudamiento.
Por último una breve explicación para los sueldos de noviembre. Pérez dijo que el 25 o 26 de noviembre podrá confirmar la forma en que los pagará, en función de que cómo avancen las negociaciones y de cuánta plata disponible haya.
Sobre la situación de los hospitales
Francisco Pérez también se refirió a la crisis en los hospitales, cuyos directivos vienen reclamando incremento de partidas presupuestarias para terminar el año con insumos asegurados. Pérez dijo que los cinco hospitales grandes (Central, Lagomaggiore, Perrupato, Schestakow y Notti) gastan el 80% de lo que reciben los 26 nosocomios de toda la provincia y que hasta ahora el crédito ejecutado este año ha crecido 70% respecto de 2014.
Las explicaciones de Pérez tiran un manto de duda sobre la gestión en los hospitales. “El crédito ejecutado al día de hoy, respecto del año pasado, creció el 70% y la paritaria fue del 30%. El 80% de lo que reclaman es para prestaciones, no es de insumos ni de otros proveedores.
Lo que hemos pedido a cada uno es que nos den detalladamente a qué van a imputar lo que están solicitando”. Pero más aún, dijo que le pidió al ministro de Hacienda, Juan Gantús, que pasara todos los números de los hospitales al referente financiero del radicalismo, Martín Kerchner, como para compartir las sospechas.
Más de cien nuevos móviles policiales
Ayer al mediodía Pérez llegó a la Base Cóndor de la Policía de Mendoza. Allí lo esperaba el ministro de Seguridad, Leonardo Comperatore, para entregar oficialmente los móviles policiales nuevos, comprados por el Gobierno nacional. 117 vehículos en total: 57 autos Renault Fluence, 39 camionetas Ford Ranger y 21 camionetas Volkswagen Amarok.
Estos móviles son parte del Programa Federal de Fortalecimiento Operativo de las Áreas de Seguridad y Salud. Originalmente estaban destinados para Mendoza 185 móviles que se comprarían con 64 millones de pesos (125 autos y 60 camionetas).
Pero, al parecer la licitación y la inflación recortaron el número de móviles que llegaron a la provincia. Ahora hay que pagarlos. La tasa de interés es del 15% para las primeras 36 cuotas y variable para los 24 posteriores pagos.
De paso, también mostraron lo que serán las instalaciones de la Dirección de Investigaciones, que también estará en el predio de la base aérea policial, donde descansan los helicópteros policiales.