Cerca de 1,5 millón de fieles llegados del mundo entero iniciaron ayer la peregrinación a La Meca, punto cúlmine del calendario musulmán, ensombrecido el año pasado por una mortal avalancha y ahora por una abierta crisis entre Arabia Saudí e Irán.
La gran peregrinación a La Meca, llamada hach, es uno de los cinco pilares del Islam, que todo fiel debe cumplir al menos una vez en su vida, si tiene los medios para ello.
“He conseguido reunir el dinero necesario” para el viaje y “es magnífico estar aquí”, se felicitaba Mohamed Hasan, peregrino de 28 años procedente de Egipto.
Ayer, los peregrinos acudieron al valle de Mina, a algunos kilómetros al este de La Meca, donde las temperaturas superaban los 40ºC, antes de iniciar la ascensión del monte Arafat, primeras etapas de los cinco días de rituales.
“Es maravilloso. Aquí estoy más cerca de Dios. Es un sentimiento indescriptible” declaró un peregrino egipcio de 45 años de edad que sólo quiso dar su nombre, Louza.
Gestionar el ininterrumpido flujo de peregrinos, organizar su recepción y su transporte y garantizar su seguridad es una enorme operación logística que supone un reto para Arabia Saudita, que será monitoreada de muy cerca.
Riad fue objeto de fuertes críticas tras la estampida -la más mortal de la historia del hach- del 24 de setiembre de 2015, producida durante el ritual de la lapidación de Satanás, que tendrá lugar mañana.
Al menos 2.297 fieles murieron en este drama según datos compilados de las estadísticas de los gobiernos extranjeros.
Arabia comunicó por su parte una cifra de 769 víctimas mortales. Los resultados de una investigación llevada a cabo por las autoridades todavía no han sido divulgados, un año después de la tragedia.
Este año, los saudíes han empezado a equipar a los fieles con pulseras identificatorias en caso de avalancha o pérdida de conciencia por cualquier motivo.
En efecto la identificación de las víctimas en 2015 había sido muy difícil y los gobiernos denunciaron la confusión que reinó en esos momentos. Sin embargo, no se sabe cuál es la proporción de personas dotadas este año con estos brazaletes.
El portavoz del ministerio de Interior saudí, el general Mansur Al Turki, destacó “los grandes esfuerzos desplegados por el reino, no sólo para la seguridad de los peregrinos, sino también para facilitar” los ritos.
Abdelatti Abu Zayan, peregrino libio de 44 años, se declaró confiado en la organización saudí, tras haber asistido a la oración del viernes en la Gran Mezquita de La Meca. “Fue un sentimiento increíble, millones de personas vinieron a rezar a la mezquita y, gracias a Dios, todo transcurrió bien”, explicó.
Por su parte, Nasser Benfitah, un peregrino marroquí de 54 años, declaró que tenía “mucha suerte de estar aquí, y hacer mi hach en muy buenas condiciones, todo está bien organizado”.
“Estamos preparados para todo lo que pueda pasar”, afirmó por su parte, con una sonrisa, Hawa Shemsia, una nigeriana de 27 años. “He oído hablar sobre la estampida de 2015 pero eso no me impidió venir”, añadió.
Este año, ningún peregrino de Irán acudirá a La Meca. Es la primera vez en tres décadas que esto sucede.
De los 60.000 fieles que vinieron en 2015 más de 460 perecieron en la estampida lo que provocó la cólera de Teherán, que mantiene muy tensas relaciones con Arabia Saudí, su gran rival sunita de la región.
El hach en cifras
La peregrinación musulmana o hach, que comenzó ayer en el oeste de Arabia Saudita, es una de las mayores concentraciones anuales en el mundo.
Estas son las cifras que ilustran su importancia, según autoridades y medios locales.
- Se espera la participación de alrededor de 1,5 millón de peregrinos extranjeros llegados de cinco continentes, junto a otros 100.000 fieles de Arabia Saudita.
- Los peregrinos serán trasladados en 18.000 colectivos, 1.696 de los cuales son nuevos.
- 60.000 empleados están movilizados por el ministerio saudí del hach.
- 158 enfermerías han sido instaladas a lo largo de los diferentes recorridos de la peregrinación. También hay disponibles 25 hospitales y 5.000 camas de hospital.
- 17.000 socorristas, varios helicópteros, 100 ambulancias y 51 autobuses medicalizados estarán dispuestos a intervenir en caso de necesidad.
- 1,5 millón de botellas de agua del venerado pozo de Zamzam se repartirán el domingo en el momento de la ascensión y el estacionamiento en el Monte Arafat.
- 23.000 empleados de limpieza estarán encargados de mantener limpio el sitio de La Meca.
- Los peregrinos extranjeros gastaron unos 20.000 millones de riyales (5.300 millones de dólares) durante el hach el año pasado.
- 2.297 peregrinos murieron en una trágica embestida en setiembre de 2015. Según medios extranjeros. Arabia Saudita dio un balance de 769 muertos.