El mexicano Oribe Peralta debutó con 30 años cumplidos en un Mundial y se llevó todas las portadas todas su gol ante Camerún. Un nuevo tanto de oro de este delantero desconocido en Europa que ha relegado al banco de suplentes a “Chicharito” Hernández.
Lo avisó el técnico Miguel Herrera antes del partido: Oribe era su mejor arma para definir ante los africanos.
No importó que el delantero se quedara sin jugar en los tres últimos partidos con la selección y la fase final de la liga. La confianza de Herrera en Peralta es inquebrantable y el DT no se planteó otras opciones para el ataque.
México y el propio Herrera le deben al nuevo delantero del América una buena parte de su presencia en Brasil. El goleador logró diez tantos en once partidos cuando México vivía la más dramática clasificación mundialista en décadas.
El “Piojo” Herrera le correspondió anunciando, meses antes de dar la lista de convocados, que Peralta era el único jugador que seguro que estaría en ella.
Después, el carismático técnico grabó comerciales con Peralta, un jugador que también tiene experiencia televisiva.
Pero, a la vez, este nuevo ídolo del aficionado mexicano siempre mantiene un perfil discreto en sus declaraciones, incluso después de su primer tanto en un Mundial.
“Es un gol de todos, todos colaboramos y trabajamos para eso”, dijo el delantero de Torreón (norte de México) tras el choque con Camerún.
El tanto llegó gracias a una de sus principales virtudes: el oportunismo. Tras una combinación entre Andrés Guardado y Giovani dos Santos, el portero rechazó el disparo de este último y Peralta apareció para aprovechar el rebote y anotar el 1-0 que fue definitivo.
Este delantero de 1,77 m de altura no destaca por su velocidad, ni potencia de disparo, pero sí por nunca perder la fe en sí mismo.
