Si algo tiene José María Pepe Monje son años de oficio. Con apenas seis años comenzó a estudiar en el Instituto de Artes Combinadas Manuel José de Labardén, en Buenos Aires, donde eligió el teatro para nunca más dejarlo.
Aunque muchos se extrañen por su reducida participación en la televisión abierta en los últimos años, el actor nunca dejó la profesión y el año pasado visitó Mendoza con el premiado unipersonal Patova.
Ahora llega en otro plan, el de compartir su experiencia tanto en teatro como en cine y televisión, con actores y estudiantes de Mendoza en un Seminario Intensivo de Actuación frente a cámara y escenario.
Este intercambio se realizará gracias a la gestión de la Asociación Cultural Mendoza, con el apoyo del Teatro Independencia y Fundación Mendocina Síndrome de Down.
El encuentro se dividirá en dos jornadas. Por un lado, hoy desarrollará una parte teórica junto con las inquietudes del grupo. Mañana pondrán a prueba su capacidad, en la filmación y actuación de escenas.
"Los lenguajes del cine y el teatro son muy distintos. En cine filmás antes escenas que en la historia suceden después. Entonces el actor no tiene desde dónde construir y necesita jugar a actuar".
Siempre jugar
“A los 50 años sigo jugando arriba del escenario. Por lo tanto, las formas, los modos y todo vínculo que pueda tener el actor con el escenario, los observo y son un compañero porque comprendo el problema del actor. A partir de eso comienzo a transferir información y se va diagramando de acuerdo a los tiempos, al grupo de gente. El actor debe tener la técnica para desenvolverse en todos los ámbitos, sin perder su identidad. Ése es el sentido de compartir las experiencias”, comenta Pepe Monje sobre su trabajo en los talleres de actuación que desarrolla por todo el país.
–De las diferencias que vos marcás entre el teatro y la televisión, la pantalla, ¿genera ciertos vicios en la interpretación?
–Se dice que son convenciones. A veces el director te pide que respirés detrás de una puerta y vos decís: “Yo no puedo hacer eso”. Entonces te dicen los directores que es una convención televisiva. Tiene un formato la televisión. Y a su vez está cubierto por la edición. Pero en el teatro se trabaja en un tiempo dinámico y constante, lo que dure la obra. Se trabaja con la totalidad del cuerpo. Ahora, el actor que interpreta un personaje en televisión, teatro o cine es el mismo. Solamente que tiene diferentes estilos y formas de encarar el trabajo. Algunas cosas lo favorecen y otras lo complican.
–¿Por ejemplo?
–En cine vos podés terminar de filmar una película un año después de que la comenzaste y filmás antes escenas que en la historia suceden después que otra. Son otros los tiempos. Lo único que uno empieza a trabajar es el “ritmo cardíaco”. El actor entra muy desprotegido y no tiene desde dónde construir. Y hay mucha información, que es necesaria, porque es una búsqueda solitaria, que no la podés resolver con el director. El actor necesita hacer un piso para empezar a trabajar. De ahí se adapta, se pone a disposición del director. El actor tiene que jugar a actuar.
Regreso a la tele
Después de siete años de ausencia en la pantalla chica, Monje volvió a la tele con una participación en la serie infantil Heidi, bienvenida a casa.
Paralelamente continuó en el teatro con Justo en lo mejor de mi vida, obra dirigida por Luis Brandoni y protagonizada por Miguel Ángel Rodríguez y Diego Pérez, que acaba de culminar su temporada en la calle Corrientes.
–¿Qué proyectos tenés en el teatro?
–Ahora comencé con otro ensayo de una obra, donde voy a trabajar con Enrique Dumont (hijo de Ulises Dumont). Tuve el placer de trabajar con su papá y ahora trabajaré con el hijo. En mayo estrenaré otra obra. En ese transcurso sumaré otra más. La idea es hacer tres obras independientes al año y en el mismo momento. Voy a probar eso.
–¿No es demasiado?
–No me preocupa tanto porque es un entrenamiento. En la medida que vaya ensayando y resolviendo los estrenos va a ser mejor. Por ahora me tengo que abocar a una y luego las siguientes. Pero no debería complicarme. El actor tiene que tener esa capacidad. Es como los libros: a veces te cuesta agarrar un libro y en otros momentos tenés tres libros abiertos a la vez. Nunca sabes cuál es tu ritmo como actor. Estás tranquilo un año y después viene todo junto.
"Todos los papeles son arriesgados. Subirse a un escenario exige una gran valentía. El actor no hace lo que quiere sino lo que puede y si el maestro o director no lo sabe guiar puede resultar muy angustiante".
–¿Alguno de los personajes es más arriesgado que otro?
–Todos son arriesgados. Subir a un escenario es arriesgado y una gran valentía. Hay que ser muy precavido y observador. El actor no hace lo que quiere sino lo que puede. Uno se convierte en una persona más tolerante. Hay momentos en que el actor está muy perdido y si el maestro o director no lo sabe guiar, puede resultar muy angustiante. Pero uno se tiene que subir lo más liviano posible. En el escenario la tenés que pasar bien.
–Después de una temporada en el teatro comercial, ¿cómo ves el presente con la afluencia de público?
–El teatro tiene la capacidad de moverse y adaptarse de acuerdo a las circunstancias. Ahora en Buenos Aires hay una nueva forma de hacer teatro, que es el micro teatro. Son obras de 15 minutos, con poco público en un espacio reducido y repiten la función, cada media hora. También están los unipersonales, las giras. El actor se mueve según los momentos de crisis. En esas crisis, la creatividad y el arte deberían evolucionar. Se modifican las cosas de acuerdo al espacio que uno tiene. Por eso, a veces las crisis son favorables.
–Este año volviste a la televisión en una serie infantil, ¿tenés otros proyectos para la pantalla chica?
–Hay posibilidad de hacer alguna ficción. Hoy hay otros espacios que salen del monopolio de medios donde uno podía estar. Mientras tanto uno se va preparando para lo que viene.
La ficha
Seminaro de actuación
Ante cámara (TV y Cine ) y escenario con Pepe Monje
Días y horarios: hoy, de 10 a 18. Domingo 3 de diciembre de 10 a 18.
Lugar: Teatro Independencia (Chile y Espejo, Ciudad).
Costo seminario: $ 1.100 $ 900 (estudiantes).
Informes: 156569880 - 154541452 . asociacionculturalmendoza@gmail.com