La Legislatura es el escenario de una pelea silente. En esta oportunidad es por el nuevo escalafón del Senado. Lo firmaron la vicegobernadora y presidenta de la Cámara Alta, Laura Montero, y dos gremios, la Asociación del Personal Legislativo (APEL) y ATE; se esperaba que lo firmara también el cornejista presidente de la Cámara de Diputados, Néstor Parés, pero esa rúbrica no llega, ni llegará en el corto plazo. Incluso hay quienes arriesgan que ese nuevo escalafón para los empleados nunca se aplicará, justamente por las diferencias entre las partes.
Es más que una de tantas peleas entre Cornejo y Montero. En un punto, trasciende a Cambia Mendoza: uno de los firmantes del nuevo escalafón es el secretario general de APEL, Gustavo Ramón, hermano del candidato a gobernador de Protectora José Luis Ramón. El Ramón sindicalista aspira ser senador provincial.
También interviene en la pelea la resistencia de varios empleados legislativos. Muchos de ellos sienten que la nueva jerarquía fue hecha a sus espaldas y los perjudica.
Y no es una pelea de los eternos "ñoquis" de la Legislatura, porque varios de los empleados que están haciendo reclamos administrativos y hasta amenazando con presentaciones judiciales están a diario trabajando en la Casa de las Leyes.
La pelea tiene protagonistas impensados. Antes del receso de vacaciones de invierno hubo una reunión. Estaban Montero, Parés, colaboradores de ambas autoridades de cámara y quien podría reemplazar a Montero en la vicegobernación, en caso de que el oficialismo ganase la elección provincial: Mario Abed. Se empezó a levantar la voz y los emisarios de Diputados se levantaron y se fueron de la oficina de la vicegobernadora.
La versión de esa fuerte discusión circula en la Legislatura como reguero de pólvora. Los supuestos protagonistas no hablan de ella, pero no ocultan sus diferencias. Parés explica: "No puedo avanzar en la implementación sin analizar el impacto presupuestario de cambiar el escalafón".
Y el candidato a vicegobernador de Cambia Mendoza pide tiempo: "Yo creo que debería esperarse a que se elijan las nuevas autoridades para avanzar", dice Abed.
El secretario Legal y Técnico Pedro Mosso es uno de los colaboradores de Montero que viene trabajando en el escalafón y sostiene que la resistencia de los trabajadores es un problema sindical.
En la mirada de Mosso, hay dos gremios que tienen la representación paritaria, ATE y APEL, y uno que quiere tenerla y no la tiene, UPCN. El nuevo escalafón sería una pelea alimentada por UPCN para sumar afiliados que le permitan llegar a la mesa paritaria.
El funcionario de Montero asegura que no hace falta un retoque presupuestario porque ya fue previsto el cambio de escalafón. Además sentencia que “en cuatro años de gestión, nos hemos ahorrado un presupuesto entero”.
Mosso argumenta que el escalafón "es muy beneficioso para todos los empleados. Nadie cobrará menos. El salario de los empleados subirá un 23% real en promedio y las clases que menos ganan subirán un 30%. Tiene un régimen de promoción horizontal, por la capacitación que da la misma Legislatura, puede ascender en grado y cobrar mas; nadie puede ingresar, ni ascender sino es por concurso. La idea es ordenar la planta de personal", explica el funcionario dela vicegobernadora.
Hay dudas de que el Senado pueda avanzar solo en la aplicación y dejar a Diputados con otro régimen. En el entorno de Montero creen que pueden, pero necesitan la homologación vía decreto del gobernador Alfredo Cornejo.
La pregunta es si el mandatario firmará esa norma y avalará el nuevo régimen.
Las dietas de los legisladores subieron $ 50 mil en un año
La izquierda volvió a mostrar los bonos de sueldo de los legisladores para pedir por la limitación del salario de los funcionarios que impulsa el Frente de Izquierda y de los Trabajadores. Ayer fue el senador Lautaro Jiménez quien hizo público su bono de julio de 2019 por $ 145.015,89, junto al de julio de 2018, que documentaba una dieta de $93.888,13.
"Las dietas aumentaron 50 mil pesos en un año. Tenemos que sumar fuerza para que se trate el proyecto de ley de sueldos de Noelia Barbeito para que los funcionarios políticos cobren como una maestra", publicó Jiménez en su cuenta de Twitter.
Los legisladores cobran el 95% del sueldo del gobernador y a su vez el del mandatario es equivalente al doble de la clase 13 del escalafón de los estatales. Es decir que cada vez que aumentan los sueldos de los empleados públicos, sube el de los legisladores.
