Whatsapp o deliverys: las estrategias de los negocios para no morir en cuarentena

El aislamiento social preventivo y obligatorio busca "darle tiempo" al sistema de salud argentino para adaptarse a una nueva enfermedad que ha hecho estragos en el mundo, la estrategia es limitar los contagios y para eso la Organización Mundial de la Salud sugieren evitar al máximo la circulación de personas. Sin embargo, esto tiene un efecto directo en la economía, y de acuerdo con un estudio de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), a través del sector de Jóvenes Empresarios, para marzo se espera una caída de la facturación del 70%.

La estimación coincide con los datos que maneja hoy la Unión de Kiosqueros de Mendoza, y la Asociación de Panaderos, que aseguran que ya se han reducido un 70% sus ventas, y estiman que continuará, en tanto continúe la cuarentena.
En este panorama, las estrategias de delivery (envíos a domicilio), o los pedidos que se preparan por encargo para reducir los tiempos de espera de muchos clientes, y el comercio electrónico son algunas de las medidas que los comerciantes adoptaron para salir adelante y acortar la caída.

Deliverys

Según adelanto Fernando Barbera, titular de la Asociación de Empresarios Gastronómicos de Mendoza al iniciar la cuarentena, se trata más de un servicio social que de una estrategia con la que podrán ganar dinero, los ingresos se han reducido considerablemente, y esto no cubrirá las faltas, pero ayuda.
De esta manera, se acerca a los consumidores, especialmente a los grupos de riesgo, o a quienes por diferentes razones tienen la movilidad reducida, alimentos preparados. Incluso los patios de comida de los grandes centros comerciales fueron habilitados únicamente para las ventas por envíos de pedidos. 
Las aplicaciones como Pedidos Ya, o Glovo, están a la orden del día para elegir solo con el celular y pagar a distancia. Sólo se necesita un teléfono celular y una cuenta de correo electrónico para descargarlas y comenzar a operar.
Además, muchos negocios tienen sus propias páginas web para hacer pedidos, o ponen a disposición sus redes sociales para lo mismo.
Esta no es la única estrategia, en los negocios de barrio, como verdulerías o carnicerías, se pusieron a disposición de los vecinos números de whatsapp para adelantar pedidos, y luego simplemente realizar el pago y la entrega, para reducir tiempos de espera, y por lo tanto concentración de gente, en la entrada de los negocios.

Comprar sin salir de casa 

Con esta metodología están funcionando emprendedores a través del MarketPlace de Facebook. Por ejemplo, Marcos de Nápoles inició su negocio de reparto de Verduras, alimentos no perecederos y bebidas por Chacras, Luján, Guaymallén, Dorrego, Ciudad y Las Heras, una semana antes de que se decretara la cuarentena (261 389-3492). 
"La idea es hacerlo para la gente mayor, pero se empezaron a pasar los números y cada vez nos llaman más. Hacemos los pedidos con un día de anticipación, y aceptamos todos los medios de pago, efectivo, tarjeta y Mercado Pago. Tenemos una lista de precios muy accesibles (Nápoles120 en Instagram)", explicó este comerciante que le encontró la veta a su negocio, y al mismo tiempo brinda un servicio invaluable para muchas personas que por su salud no pueden salir a su casa, ni para ir al supermercado.

Cobros a distancia, sin tarjeta de débito

Quedarse en casa para muchos también significa quedarse sin efectivo, y no todos los comercios reciben débito, a pesar de la obligación que tienen de hacerlo. No obstante, el Banco Central habilitó desde el año 2016 el DEBIN otro sistema de pago electrónico.

¿Cómo funciona?
En este caso, se trata de una transferencia online inmediata por medio de la cual el cobrador inicia el trámite y el pagador solo debe aceptarlo. Para esto, los sistemas de home banking y de banca móvil sumaron el menú "Pagos DEBIN", donde el usuario puede generar pedidos de pago y también ver la lista de solicitudes recibidas para aceptarlas o rechazarlas.
El DEBIN admite pagos en pesos o en dólares, entre cuentas de igual moneda. A diferencia de las transferencias comunes, la otra parte no debe ser incorporada previamente y basta con pedirle su nombre de cuenta (Alias CBU), sin agregar otros datos como el DNI o el CUIT. También permite programar, para cobros recurrentes, la aceptación automática de pedidos futuros hechos desde ciertas cuentas, con fechas y topes fijados.
Y más simple resulta el uso de las Fintech. Por ejemplo, Mercado Pago permite generar un link de cobro y enviárselo a cualquiera, no se necesita ser un comerciante para ello porque no se piden mayores datos que el DNI del usuario.
¿Cómo se hace? Hay que descargar la aplicación, llenar los datos que se solicitan (tener a mano el DNI, la app solicita unas fotografías del mismo para validar la identidad del usuario), y luego se puede comenzar a operar.

Al iniciar la aplicación se verán las pestañas "cobrar" y "pagar". Al elegir cobrar nos encontramos con la opción de generar un código Qr, con el que será posible operar si las dos personas que participan de la transacción económica tienen Mercado Pago, o enviar un link de pago, que se envía por Whatsapp y por el que quien lo recibe puede enviar dinero desde su home banking o desde su aplicación (si la tuviera) a la cuenta del comerciante.
Como ya se dijo, no es necesario ser vendedor para tenerla, fuera de la cuarentena, era una estrategia utilizada por amigos y familiares, para dividir los gastos de una juntada.