Estamos cambiando la forma de gestionar el patrimonio cultural de la provincia. Este cambio tiene que ver con reconocer a los actores locales y a la sociedad civil en todo el proceso de patrimonialización, desde la identificación de las prácticas y bienes que merecen ser protegidos, hasta el compromiso con su conservación y con su gestión y uso. Esto aleja al Estado y a los especialistas como únicos activadores e incorpora a otros agentes y otras voces.
Ese es el eje central de nuestra gestión y por ese motivo, nos vinculamos con todos los departamentos de la provincia para estar en contacto con los bienes y sus contextos socio-culturales.
En ese camino, y como acciones concretas, podemos mencionar:
Hemos recuperado una institución fundamental para la gestión del patrimonio: el Consejo Provincial del Patrimonio Cultural. En este espacio, consejeros de toda la provincia y de organismos del Estado provincial, municipal y de entidades no gubernamentales, debaten y proponen acciones y asesoran, en aporte sustancial para el órgano de aplicación de la Ley provincial N° 6034 y su decreto reglamentario Nº 1.882 /2009.
En referencia al registro de bienes del patrimonio cultural, estamos actualizando y acrecentando el inventario de los bienes del patrimonio artístico de la provincia, que se encuentran en diferentes reparticiones del Estado provincial, en áreas centralizadas y descentralizadas y en los departamentos.
En patrimonio arqueológico y paleontológico, trabajamos en un nuevo modelo de gestión de concesiones de áreas de investigación científica. Desde 2016, hemos apostado a la gestión de Qhapaq Ñan -Sistema Vial Andino-, declarado patrimonio mundial, creando la Unidad de Gestión provincial y las unidades de gestión locales, que trabajan en la formulación de los planes de manejo para su conservación y desarrollo, en los cuales las comunidades locales son protagonistas.
Iniciamos, en colaboración con la Agencia de Ordenamiento Territorial y los municipios, el trabajo para la incorporación de la variable patrimonio en todas sus categorías, en los planes de ordenamiento territorial municipales.
La gestión de los museos de la provincia es a nuestro criterio fundamental. En Mendoza funcionan más de cincuenta museos de diferentes escalas y tipologías, que en conjunto atesoran y difunden el acervo de los mendocinos. Hemos concebido para estos espacios de gestión del patrimonio, el programa Mendoza Museos, que está permitiendo mejorar paulatinamente la gestión técnica institucional, la comunicación, el guión y las muestras museográficas. Lo estamos logrando con la participación de cada museo, de las comunidades de pertenencia, de instituciones académicas y de los gobiernos locales. Asimismo la creación de los museos de Arqueología de Alta Montaña, de Arquitectura y Diseño, y de la Ciudad en algunos departamentos, están dando sus primeros pasos.
El compromiso sobre el patrimonio edilicio está evidenciado en las obras de puesta en valor de cuatro espacios para la gestión cultural: el Espacio Contemporáneo de Arte; el Espacio de Fotografía Máximo Arias; el Museo de Bellas Artes Emiliano Guiñazú Casa de Fader y el Museo Carlos Alonso Mansión Stoppel.