En noviembre de 2004, cuando el Club Mendoza de Regatas celebró su 95 Aniversario y se encaminó al festejo y a los actos de homenaje de su Centenario que cumplió en 2009, su biógrafa Haydée Magnani con la valiosa colaboración de Cristina Amils y Marcos Galobart Cannavó y el asesoramiento del periodista Rodolfo Mikkan, presentó un excelente y completo trabajo de investigación editorial sobre el historial deportivo de la prestigiosa institución del Parque General San Martín desde la misma fecha de su creación el 17 de noviembre de 1909.
La obra, que se conoció bajo el nombre de: "CMR: Camino a los Cien Años", incluyó una reseña de todas las disciplinas que se han practicado en la entidad además de una pequeña biografía sobre los deportistas del club más destacados de todos los tiempos. Esa distinguida nómina de 35 referentes perfectamente seleccionados por sus éxitos y condiciones incluye obviamente a Patricia Inés Conte que se convirtió en un símbolo eterno y en una gran embajadora del remo mendocino junto a su eterna compañera de inolvidables triunfos y grandes hazañas, Elina Urbano, en aquel bote doble par sin timonel que envuelto en la bandera argentina y en distancias generalmente de 2.000 metros dio la vuelta al mundo.
Patricia resultó medalla de oro (primer puesto) en los XII Juegos Panamericanos 1995 de Mar del Plata, Argentina (11 al 26 de marzo); medalla de oro (primer puesto) en los XIII Juegos Panamericanos 1999 de Winnipeg, Cánada (23 de julio al 8 de agosto); medalla de bronce (tercer puesto) el 26 de agosto en el Mundial Senior 2001 de Lucerna, Suiza y medalla de plata (segundo puesto) en el Mundial Senior 2008 de Colonia, Alemania por citar las preseas más valiosas compartidas con Elina.
Escribió Haydée Magnani al comienzo de la semblanza personal que hizo de Patricia: "llegó al club a los ocho meses de edad en los brazos de sus padres Santiago y María Inés. Seguro que el murmullo del agua fue la canción de cuna que le señaló su futuro". Poética presentación de aquella pequeña criatura que cuando aprendió a nadar en la feliz época de la infancia solo se metía a la pileta chica porque le tenía temor a la más grande. Y que mucho tiempo después cuando empezó a remar no estaba muy convencida de lo que hacía porque su prioridad pasaba por el estudio que completó en el Colegio María Auxiliadora en el ciclo primario y en la Técnica-Química Capitán Vázquez en el secundario.
Hasta que egresó con el título de Ingeniera Agrónoma de la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNCuyo luego de interesarse primero por la carrera de Farmacia y después por el profesorado de Educación Física. En la actualidad, cuando el remo es un hermoso recuerdo, ejerce su profesión de ingeniera en tareas de asesoramiento a productores y empresas en general en la zona del Valle de Uco donde viaja periódicamente o reside según las exigencias de su trabajo que desarrolla en áreas vitícolas.
Como un Juego
Patricia le contó a Más Deportes en la visita de hace unos días a nuestro diario: "llegué al remo un poco por curiosidad y otro poco por entretenimiento. Como si se tratara de un juego, de una diversión. En esa época tenía alrededor de 16 años y me interesaba mucho más completar el ciclo secundario y pensaba en una carrera universitaria. Me convenció una prima que me pidió que la acompañara a practicar en la escuela de remo que funcionaba en el club. Sin embargo con el paso del tiempo me lo tomé muy en serio y comencé a participar de manera competitiva lo que nunca antes me hubiera imaginado."
"Gané varias pruebas en single y obtuve un segundo puesto a nivel nacional que me colmó de satisfacción y de nuevas energías. Parecía que tenía condiciones, como que si me entrenaba con responsabilidad y le ponía esfuerzo y mucho empeño podía progresar, mejorar mi técnica y alcanzar progresivamente otros logros. A los 20 años fui convocada para integrar un doble par junior con Laura Tirón con quien nos complementamos muy bien y ganamos en nuestra categoría el Campeonato Sudamericano realizado en Uruguay."
"También representé a mi país con un segundo puesto en la Regata Internacional ECO en Río de Janeiro y participé en el Argentino de San Nicolás en un doble par con Fabiana Pedroza. En el 92 gané la selectiva en el Tigre y me clasifiqué para el Mundial de Montreal donde viajé con el apoyo del Club y de la Secretaría de Deportes de la Nación. Como entrenador viajó Alberto Demiddi que era una de las figuras más representativas del remo argentino por el título mundial que había alcanzado. Sin embargo no pude intervenir por un problema de salud, pero si lo hice en el Sudamericano de Melilla. Esos años resultaron muy valiosos por la dedicación y el trabajo serio y responsable del profesor Juan Pablo Mahnic en la Escuela de Remo del club que favoreció a las mujeres que entonces remábamos diariamente porque teníamos que competir y deseábamos superarnos".
Gran Compañera
Después de obtener en 1992 y 1993 el Huarpe que entonces otorgaba el Círculo de Periodistas Deportivos de Mendoza y de representar al país en distintas competencias internacionales en single o doble par en Bélgica, Italia y los Estados Unidos comenzó una nueva etapa para Patricia al formar pareja deportiva con Elina Urbano que provenía del atletismo como especialista en salto en alto y que en 1980 había obtenido la Cruz al Mérito Deportivo.
Además la atleta palmirense había ganado ocho veces de manera consecutiva el Triatlón Vendimia desde su primera edición a partir de 1987 y había debutado en la Regata Vendimia en peso ligero en 1994. En 1995 ambas se consagraron ganadoras del doble par ligero en los Juegos Panamericanos realizados ese año en la Laguna de los Padres en la Provincia de Buenos Aires y en diciembre de ese año triunfaron en el Sudamericano de Mar del Plata en el doble par peso ligero y en el cuatro junto a Julia Garisoain y Marisa Peguri.
Al año siguiente integraron la delegación argentina que participó en los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996 en los que Elina se clasificó sexta en la serie eliminatoria del Single Scull y Patricia fue suplente. A partir de entonces sería imposible enumerar la seguidilla de victorias que obtuvieron en distintas pruebas, distancias y escenarios en su casi imbatible doble par: El Tigre, Río Santiago, San Nicolás (Rosario), Dique Ullum (San Juan), Laguna de San Pedro (Concepción, Chile), Valparaíso (Chile), Mercedes (Uruguay), Pista de Xochimilco y Quetzalcoatl (México), Laguna da Freitas (Río de Janeiro) Lago de Beetzee (Alemania), Alto Paraná y Puerto Sajonia (Paraguay) y Pucón (Chile) entre muchos más. Ganaron también el Doble Par Senior en el Tigre y recibieron el premio "Falúa" instituido por la Prefectura Naval Argentina por haber logrado la mayor cantidad de triunfos durante 1999 y 2000.
Otra Vida
A los 41 años de edad (19-02-71), entre sus viajes o estadía en Tupungato por su labor en las viñas o la administración de algunas fincas y la relación con los obreros, familiera como siempre, de buen ánimo y desenvuelta como en sus épocas de sobresaliente deportista, aunque ahora lejos de los remos, de los botes, del viejo murmullo del agua, de su querido Mendoza de Regatas, de aquel doble par que con Elina Urbano dio la vuelta al mundo y del esplendor de otrora, Patricia Conte le contó a Los Andes con una expresión de infinita nostalgia:
"el remo resultó una parte importante de mi vida que me permitió viajar, conocer gente, relacionarme, hacer amigos. Disfruté de la gloria, triunfos, títulos y premios que entonces me hicieron muy feliz y que me llenaron de un lógico orgullo. También sufrí el lógico desgaste del intenso entrenamiento y de la competencia semanal. Con Elina a la que recuerdo siempre con gran cariño compartí muy bellos momentos porque corrimos juntas desde fines del 94 hasta el 2000 y fueron años de muchos éxitos. Con el tiempo entendí que el ciclo estaba cumplido porque quizás la motivación no era la misma. Cambió mi actitud hacia el deporte, mi visión personal, me había retrasado en el estudio por lo que decidí completar mi carrera universitaria y dedicarme luego a mi profesión de ingeniera. Por suerte tengo mucha actividad y excelentes compañeros de trabajo con los que disfruto a diario. Es como si ahora viviera otra vida en la que me han quedado muy buenos recuerdos del remo y del deporte".