El Parque Central se quedó sin patos: se los llevaron a Tunuyán

Desde el martes no hay más patos ni gansos en el Parque Central -en realidad queda un patito rebelde que no se dejó capturar y que hoy será trasladado- gracias a la actividad comprometida de un grupo de personas autoconvocadas que cuidan y protegen a estas aves.

Desde la campaña "Cuidemos a los patos del Parque Central de Mendoza", que empezó en Facebook, se creó conciencia sobre el maltrato que los animales recibían tanto por parte de la gente como de los perros. Muchas veces los mordían o los niños los apedreaban.

"Yo me encontré muchas veces con situaciones de agresión hacia los patos, o cuando ya estaban muertos o heridos. En esos casos los llevé al veterinario, los recuperé y los di en adopción a granjas educativas", explicó Gonzalo López, organizador de la campaña en las redes sociales.

Gonzalo explicó a Los Andes que junto a otras tres personas -un voluntario, un veterinario y un empleado municipal- lograron capturar todas las aves y cargarlas a un camión que proveyó la Municipalidad para trasladarlas a una finca en Tunuyán.

"Le pusimos punto final a este sufrimiento, se terminaron de sacar los patos que quedaban en el lago del Parque Central. ¡Después de un año de insistir e insistir por fin se logró!", comunicaron a través de Facebook desde la organización.

Esta fue la etapa final del operativo conjunto de los voluntarios con la Municipalidad de Capital que empezó en octubre del año pasado con el traslado de la primera tanda de aves a la finca de la familia Moscuen en Tunuyán. Ahora, de los 100 ejemplares que había, cinco se quedaron en el Gran Mendoza. "Algunos se quedan en el vivero de Paseos Públicos que funciona en la calle José María Godoy de Las Heras", dijo López.

Para el veterinario Gustavo Pronotto (director del Zoo), la medida de trasladar a las aves no es mala pero es una solución a corto plazo. "En realidad es un problema de educación y de crear conciencia del cuidado de los animales", consideró. "Los patos son bonitos y entretenidos para los niños pero hay que educar para que la gente los cuide", agregó.

Voces en contra

"No ta' pato, no ta'", repetía ayer Tiziano (3) desde su cochecito mientras su abuela miraba en todas las direcciones buscando a las aves. Una mezcla de incertidumbre, sorpresa e indignación invadió a varios vecinos al darse cuenta de que el lago está vacío. Muchas familias que solían darles de comer y se entretenían mirando los patos graznar, bañarse y nadar mostraron su descontento cuando llegaron al Parque y no vieron a los animales.

"Por qué no se organizan para cuidar la limpieza y a los patos en vez de llevárselos", dijo Mirta a Los Andes. Antonia, otra señora que va por las tardes, también se mostró disconforme con la ausencia de las aves: "Eran el atractivo del Parque y ya no están".

Al respecto, Gonzalo López aclaró que la gente quiere que los patos estén en el lago porque desconocen lo que sufren los animales: "Muchas personas están en contra porque no están al tanto de las agresiones. Por mes aparecían dos ejemplares muertos por lo menos".

No más aves

Desde "Cuidemos a los patos del Parque Central de Mendoza" pidieron que la gente no lleve más patos al lago porque la comuna no se hará cargo de la alimentación ni de su cuidado. "Ahora vamos a repartir folletos para informar por qué no hay patos y para concientizar para que no dejen más animales en el Parque", agregó López.

Cuando se inauguró el Parque Central, en 2006, la Municipalidad compró una treintena de ejemplares, pero después muchas personas llevaban patos y gansos domésticos y los dejaban en el lago. Así, la población se incrementó y llegaron a ser casi 100 aves.