El gobierno francés cuestionó ayer al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, por su falta de "decencia elemental" al criticarlo en el mismo día en que las autoridades conmemoraban el tercer aniversario de los atentados en París y Saint Denis, en los que murieron 130 personas.
"Ayer fue 13 de noviembre. Conmemorábamos el asesinato de 130 compatriotas hace tres años en París y Saint Denis. Voy a responder en inglés: 'common decency' (decencia elemental) habría sido deseable", indicó el vocero gubernamental, Benjamin Griveaux.
En las últimas 24 horas, tras haber participado el domingo en París en el centenario del armisticio de la Primera Guerra Mundial (1914-1918), Trump arremetió contra el plan de creación de un Ejército europeo, esbozado por el presidente francés, Emmanuel Macron.
"Sugiere crear su propio Ejército para proteger a Europa de Estados Unidos, China y Rusia, pero fue Alemania (la que atacó) en la Primera y Segunda Guerra Mundial. ¿Cómo le fue eso a Francia? Estaban empezando a aprender alemán en París antes de que llegara Estados Unidos", dijo en un primer mensaje.
Trump también arremetió contra supuestas trabas comerciales francesas, en respuesta al llamado de Macron a apostar por el multilateralismo y dejar de lado los nacionalismos.
"Francia produce un excelente vino, pero también lo hace Estados Unidos. El problema es que Francia dificulta que Estados Unidos venda sus vinos en Francia y cobra grandes aranceles, mientras que EEUU se lo pone fácil a los vinos franceses y cobra tarifas muy pequeñas. No es justo, ¡esto debe cambiar!", apuntó.
Trump destacó que "el problema" es que Macron afronta una tasa de popularidad muy baja, del 26 %, y un desempleo de cerca del 10 %, y consideró que el mandatario galo estaba "solamente intentando cambiar de tema".
"Por cierto, no hay país más nacionalista que Francia", destacó en referencia al discurso del domingo de Macron, que ante cerca de 70 jefes de Estado y de Gobierno, incluido Trump, subrayó que "el patriotismo es justo lo contrario del nacionalismo".
El presidente estadounidense aprovechó esa cadena de mensajes para justificar la cancelación de su desplazamiento el sábado a un cementerio estadounidense en París.