Subí a la torre Eiffel, navegué por el Sena, tomé café en el Flore, recorrí el Louvre, escuché a Piaf y al músico sin nombre que hace caminar a 20 cm de suelo a los transeúntes que desafían de la magia de atravesar los jardines y desembocar en el puente de Alexandre III, para oírlo. Deambulé por la Rivera Gauche de noche con los fantasmas, encontré un gato negro, pariente tal vez del de Cortázar, comí tantos quesos como pude, tomé champagne y luego dije: estuve en París.
No tan rápido muchacho, muchacha, como diría Tita, aún hay mucho París para andar.
Por Montmartre con Amélie. La película es un ícono Parisien y sus fanáticos quieren seguir los pasos de la singular protagonista. Desde Rue Lepic se parte en búsqueda de la chica, que vive cerca. En la esquina Café Tabac Deux Moulins, dónde ella trabaja. Cuesta arriba por las callecitas que enamoran, la verdulería donde Amelie hace sus compras, Maison Colignon en el filme, Marché de la Butte, en verdad, aunque ambos carteles coexisten. El hermoso carrusel de la plaza Saint Pierre abajo exactamente de Sacré Coeur, el otro guiño con el cine.
La vendimia parisina. Es una verdadera curiosidad para muchos turistas pero existe, durante una semana los parisinos tienen su fiesta vendimial que hoy culmina en Montmartre. Los mejores vinos y la exquisita gastronomía apostados en la bella plaza y en los alrededores del encantador barrio.
Además, todas las expresiones artísticas están presentes: exposiciones, conciertos, desfiles, productos artesanales y de los terruños, un lujito. Para los que no llegaron a la vendimia, todas las direcciones para visitar las viñas de la ciudad: Vignes de Montmartre rue des Saules, París 18e - M° Abbesses – Blanche – Anvers - Vignes du Parc Georges Brassens rue des Morillons, París 15e - M° Conventions; Vignes du Parc de Belleville 45 rue des Couronnes, París 20e -M° Courones, Vignes du Parc de Bercy 1 rue Joseph Kessel, París 12e - M° Bercy Cour Saint Emilion.
Hágase la luz. Es una excursión nocturna mientras la city se ilumina entre el ocaso y la noche. Es una buena opción para ver París desde otra perspectiva al tiempo que se recibe información de todos los lugares que se recorren en bus, y que quizá no tenga tiempo de visitarlos a todos en su estadía.
El circuito contempla la glamorosa Plaza Vendôme, la Comedia Francesa, el Louvre, Pont-Neuf, el Hôtel de la Monnaie, Saint-Germain-des-Prés, la Catedral Notre-Dame, la Plaza du Châtelet, Conciergerie, el Ayuntamiento, la Plaza de la Concordia, el Pequeño y Gran Palacio, la Avenida de los Campos Elíseos, la Torre Eiffel, Inválidos, la Iglesia de la Madeleine, la ópera, Montmartre, Pigalle. Todo termina con el espectáculo del Cabaré del Moulin Rouge (116 euros).
Erótico. La excursión anterior culmina en el Moulin Rouge, pues por los alrededores la oferta de erotismo abunda en cabarets con diversos espectáculos desde los más light a los de alto voltaje. También hay numerosos sex shop muy visitados por los turistas. Y como estamos en París, también está el museo del Erotismo.
Situado en pleno centro de Pigalle, en sus 7 plantas está la historia del arte en el sexo a través del mundo de manera artística. Allí se pueden ver máquinas y mecanismos con vocación erótica, objetos y estatuas de arte tradicionales de América, África, Oceanía y Asia, numerosas fotos y postales del siglo XIX, etc. Una pícara visita reservada a los adultos. Abierto todos los días de las 10 hasta las 2 de la mañana. 72 bd de Clichy París 18e - M° Blanche www.musee-erotisme.com
Escondido. El parque de la Turlure detrás de Sacré Coeur, un rincón verde escondido detrás de la impresionante iglesia, ideal para un pic nic.
Perfumes. Dejar el free shop por un tiempo y decidirse por La Maison Guerlain en A. Champs Elysées, es una excelente idea. Además una pasadita por la Rue Montignac, la Place Vendóme puede dejar sin aliento. También está el Museo del Perfume, es privado, ubicado en un hotel de 1860 con techos pintados, parqué, los románticos estucos, las chimeneas y las arañas son originales
. Durante las visitas guiadas, se puede descubrir una colección de objetos de perfumería, de la antigüedad hasta el principio del siglo XX. También se puede observar la fabricación del perfume tal como se hacía en el siglo XIX en la fábrica Fragonard de Grasse, ciudad del sur de Francia. La visita es gratuita. Abierto de lunes a sábado de las 9 a las 18. Los domingos y feriados de las 9 a las 17. 9, rue Scribe París 9e - M° Opéra www.fragonard.com
En bici. El sistema de alquiler y devolución de bicis en la vía pública es perfecto, hay casi 2.000 estaciones y más de 20 mil bicis disponibles. Se coloca el dinero en la máquina y esta habilita el móvil de dos ruedas que se devuelve igual de fácil.