El tricampeón Marc Coma (KTM) ganó ayer su segunda etapa en este Rally Dakar y se va acercando al objetivo de conseguir su cuarta corona, aunque es cauto y prefiere hablar del día a día.
El español mostró toda su esencia y maestría en el desierto y se aseguró la etapa con un tiempo de 4h49’05’’ y relegó a su compatriota Joan Barreda Bort (Honda) por 1’41’’ y al francés Cyril Despres (Yamaha) por 5’28’’.
Una vez bajada la duna de Iquique, el ganador describió que la etapa fue “difícil, con una parte inicial muy rápida” y consideró que es “ahora cuando empieza a jugar la parte psicológica”.
Mientras, el español Juan Pedrero (Sherco) cruzó la meta en cuarta posición a 8’43’’ y quinto fue el eslovaco Stefan Svitko (KTM) al quedar a casi 10’ del ganador.
Por lo tanto, Coma sigue liderando la clasificación general con firmeza, al tener una marca total de 36h55’24’’, seguido igualmente por sus compatriotas Barreda Bort a 40’19’’ y su coequiper Jordi Viladoms (KTM) a 1h38’45’’.
En cuanto al mendocino Julio Quiroga, concluyó en el 76° lugar de la especial a 3h30’03’’ del líder. Mientras, en la clasificación general, nuestro representante marcha en el 75° puesto a bordo de la Yamaha del JVO Racing español.
Una etapa muy complicada
Los 226 competidores que hasta ayer seguían en carrera tuvieron su primer contacto con el desierto y con el Pacífico, en un bello paisaje que puede resultar muy engañoso si flaquea la navegación.
Aquellos que hicieron las cosas bien o se repusieron de las adversidades tuvieron como premio descender la vertiginosa bajada de tres kilómetros de extensión por la duna de Iquique, que desemboca directamente en el vivac.
En tanto, los que supieron interpretar bien el road-book y leer correctamente las señales del desierto, llegaron durante la tarde. Los que no, tuvieron que bajar la duna cuya desnivelación supera el 30%, sin luz natural. Los menos afortunados pasaron la noche en la más absoluta soledad del desierto, a temperaturas bajo cero.
Las ciudades que se barajan
Enrique Meyer (ministro de Turismo de la Nación) volvió a decir que “la largada de 2015 podría ser en Buenos Aires o Bahía Blanca. Pero también está en puja Puerto Madryn”.
Aparte, comentó que el campamento “estará en la ciudad catamarqueña de Fiambalá”. Por eso, Mendoza podría ser nuevamente paso obligado de la carrera.
