Los bonos argentinos se encuentran en una fase de recuperación desde el mes pasado gracias a que el mercado tomó a bien la ley de emergencia economía, la cual tiene un sesgo de ajuste importante.
De esta manera, los bonos en dólares recuperaron en promedio un 20% en las últimas dos semanas y distintos analistas consideran que se redujo la probabilidad de enfrentar una fuerte crisis monetaria en 2020.
En este escenario, y ante el rally ya evidenciado en los bonos soberanos, la renta fija provincial se muestra como una opción interesante para inversores con perfiles arriesgados que buscan posicionarse en renta fija local.
La suspensión del pacto fiscal les da a las provincias un punto de partida más solido para enfrentar compromisos en 2020. La semana pasada, el presidente Alberto Fernández firmó con los gobernadores una suspensión del pacto del Consenso Fiscal de 2017 para frenar la reducción estipulada de alícuotas del impuesto sobre Ingresos Brutos y otros impuestos ´distorsivos´ hasta el 31 de diciembre de 2020.
Con la suspensión de dicha cláusula, las provincias tienen libertad para aumentar las alícuotas máximas establecidas para los impuestos provinciales de acuerdo con sus necesidades. A cambio, todas las provincias acordaron suspender las acciones legales contra el Gobierno nacional por un período de un año por reclamos relacionados con el régimen de coparticipación fiscal nacional.
Para los analistas de Banco Mariva, las provincias argentinas obtendrían un "alivio fiscal" de $ 60.000 millones en 2020. Casi la mitad de dicho alivio sería para la provincia de Buenos Aires, según estimaciones del Gobierno nacional.
"Creemos que estas nuevas medidas contribuirán a mejorar la situación fiscal de las provincias en 2020. Dicho esto, las provincias continuarán bajo un escenario de estrés en 2020 y esperamos que el nivel de actividad económica débil prevalezca con una inflación alta. Además, las fuentes de liquidez para las provincias seguirán siendo bajas mientras el Gobierno nacional no resuelva definitivamente el problema de la deuda externa", explicaron los analistas de Banco Mariva.
Los bonos sugeridos
En este contexto, el posicionamiento en bonos provinciales es para perfiles medianamente agresivos y que puedan disponer de tiempo para mantener en cartera dichos instrumentos. Distintos analistas sugieren posicionarse en bonos de provincias que tienen los fundamentos más fuertes para navegar la crisis económica en Argentina.
"La Ciudad de Buenos Aires, la provincia de Córdoba, la provincia de Santa Fe y la provincia de Neuquén son, en nuestra opinión, los 4 distritos sub soberanos con la mejor calidad crediticia en Argentina.
Continuamos recomendando mantenernos alejados de los bonos de las provincias pequeñas porque, una mayor proporción de sus ingresos depende de los ingresos fiscales y otras transferencias del Gobierno nacional", sugirieron desde Banco Mariva. A la hora de identificar oportunidades, los analistas de Delphos Investment coincidieron con sus pares de Banco Mariva y señalaron que provincias como Neuquén o Chubut, los bonos están garantizados con regalías, lo cual las hace más atractivas que el resto.
"Neuquén principalmente se encuentra en el centro de la escena. Pero su bono garantizado al 2028 ya opera cerca de u$s 96, lo cual lo deja con poco atractivo más allá del tema impositivo. Claramente CABA es la unidad provincial más solvente y el precio de sus bonos así lo refleja operando casi a la par.
Por otro lado, los bonos de Neuquén, Chubut, Córdoba y Santa Fé se encuentran mejor posicionados que los soberanos, operando en paridades de 73%, 68%, 72% y 69% respectivamente", señalaron.
Respecto de sus rendimientos, los bonos de la provincia de Santa Fe a 2023 operan con tasas 17,5% y de 13% a 2027. Los bonos de la provincia de Córdoba en dólares rinden 14,3% a 2027 y 16,3% a 2024. La Ciudad de Buenos Aires rinde 10% a 2027, similares al 9,7% que rinden los bonos de Neuquen. Todos estos bonos operan dentro de la curva del soberano, el cual muestra rendimientos muy superiores.
La parte corta de la curva ley Nueva York se encuentra en torno al 98% y 75% mientras que en la parte media, los bonos se encuentran operando con tasas que van del 17% al 34%.
Este escenario coincide con paridades que van de 40% al 45% en distintos tramos de la curva, con algunas excepciones como los bonos discount que muestran paridades por encima de 50%.