Para el FBI, Esteban Santiago, el tirador de Florida, “planificó el ataque” que ejecutó el viernes en el aeropuerto de Fort Lauderdale y que se llevó la vida de cinco personas e hirió a por lo menos ocho más.
Los agentes federales de ese buró informaron que Santiago eligió la terminal aérea para “hacer ese terrible daño”.
En tal sentido, las primeras investigaciones oficiales que lleva adelante el gobierno norteamericano descartan que el ahora detenido haya cometido el salvaje episodio de Florida por un “rapto psicótico”.
El vocero del FBI en Miami, George Pino, comentó que el ex militar eligió estratégicamente ese aeropuerto para “cometer este horrible ataque”, aunque se desconocen los motivos que lo llevaron a tomar esa decisión.
Los investigadores mantienen la premisa de que el acusado actuó solo durante el ataque en la terminal 2 de la base aérea.
En tanto, el aeropuerto internacional reinició ayer sus operaciones, después de haber vivido caóticas escenas de muertes, heridos y operativos de rescate y la propia detención del enajenado sujeto.
Esteban Santiago, de 26 años, nació en Nueva Jersey, y tiene un pasado militar. De familia puertorriqueña y criado en la isla del Caribe, sirvió seis años en la Guardia Nacional de Puerto Rico y participó alrededor de un año en la misión de Estados Unidos en Irak, desde 2010 hasta febrero de 2011.
Al volver se fue a vivir a Alaska y se enroló en su Guardia Nacional, donde le habrían dado de baja por desempeño poco satisfactorio.
Durante el atentado, no estaba inicialmente armado, sino que extrajo el arma de su equipaje antes de apretar el gatillo en forma reiterada.
Al ser detenido llevaba una credencial militar. Testimonios diversos indican que tenía problemas mentales.
Santiago llegó al aeropuerto de Fort Lauderdale procedente de Anchorage (Alaska), donde reside y tiene una novia y un hijo. Tras hacer escala en Minneapolis, siguió hacia el escenario de la matanza. La ruta Minneapolis-Fort Lauderdale la hizo en un vuelo de Delta Airlines.
Dentro del equipaje que había facturado llevaba un arma de fuego de puño. Al entrar a la terminal 2, en la zona de equipajes, entró a un baño, supuestamente para cargar la pistola, y al salir disparó indiscriminadamente contra pasajeros.
Un especialista confirmó a CNN que los protocolos de la aviación permiten el despacho de armas de fuego como parte del equipaje que viaja en la barriga del avión, siempre que el propietario del arma exhiba los documentos legales para poseerla y justifique su traslado. Sin embargo, aclaró el analista, que la condición de ser militar, no justifica por sí solo portar ni transportar armas.
El joven no estaba incluido en ninguna lista de personas con vínculos con el terrorismo. De todos modos, el FBI no ha descartado todavía que el incidente constituya un ataque terrorista y mantiene abiertas todas las posibilidades. Por de pronto, ya fue alojado en la prisión del condado de Broward (Florida).
Se supo además que el nativo del Estado Asociado de Puerto Rico había comprado dos pistolas Glock. Santiago tenía una Glock 9 y una Glock 40. Se desconoce si alguna de esas pistolas fue la usada en el tiroteo del viernes.
En un video tomado instantes después del suceso se ve a gente en estado de shock y al menos una persona desplomada con un charco de sangre junto a su cabeza. Un hombre vio cuando Santiago, con aspecto sereno, disparaba en la cabeza a otro y después sintió un golpe en su espalda.
Segundos después el asesino era arrestado y él salió hacia el baño a comprobar qué era lo que había notado. Descubrió que a él también le había disparado. Pero no sangraba ni sentía dolor, porque la bala había sido detenida por la computadora que llevaba a la espalda.
Vestido con una camiseta de la película de ciencia ficción Star Wars, Santiago fue detenido casi al momento.
El agresor actuó solo y no existiría ningún testimonio de que haya exclamado un mensaje yihadista o algo por el estilo.
Según han informado fuentes policiales a The Washington Post, Santiago protagonizó un extraño episodio en Alaska el año pasado. Acudió a la oficina del FBI en la ciudad de Anchorage, con la paranoica versión de que el Gobierno federal lo seguía.
Aseguró que la CIA lo forzaba a ver videos del Estado Islámico (EI) para controlar su mente. A partir de ahí sólo se sabe que el FBI recomendó que prestasen atención psiquiátrica a Santiago.
En una entrevista con la cadena ABC, el presidente Barack Obama dijo que se sentía “desconsolado”. “Este tipo de tragedias han ocurrido con demasiada frecuencia durante los años en los que he sido presidente”.
Historial castrense del detenido
Esteban Santiago se unió a la Guardia Nacional de Puerto Rico el 14 de diciembre de 2007.
Fue enviado a Irak con la Guardia Nacional de Puerto Rico desde el 23 de abril de 2010 hasta el 19 de febrero de 2011.
Estuvo en las reservas de la Armada antes de unirse a la Guardia Nacional de Alaska el 21 de noviembre de 2014.
Fue dado de baja de la Guardia Nacional el 16 de agosto de 2016 por desempeño insatisfactorio.
Era un ingeniero de combate.
Cuando fue dado de baja, su rango militar era E3 (soldado de primera).