Valencia remontó agónicamente la eliminatoria frente al Getafe y avanzó a las semifinales de la Copa del Rey. "Hemos demostrado un carácter impresionante", dijo Rodrigo, autor de los goles del 3-1 en el Mestalla, tras el 0-1 de la ida. Sin embargo, el festejo se vio empañado por los jugadores de ambos equipos, que terminaron a las trompadas.
Ni la Policía ni la seguridad privada pudieron evitar las peleas entre ambos planteles. Tal es así que el defensor argentino Ezequiel Garay debió pasar la noche internado en observación por los "fuertes golpes en la cabeza", según él mismo contó en su cuenta de Instagram.