Néstor Speziale, el papá de Camila, la activista de Greenpeace que consiguió ayer la libertad bajo fianza tras dos meses de prisión en Rusia por protestar contra la explotación petrolera en el Ártico, dijo que la excarcelación "es un paso importantísimo" y "una gran alegría para toda la familia".
"La Embajada nos avisó ni bien se supo la noticia y lo tomamos con mucha alegría, este es un paso importantísimo y una tranquilidad gigante para la familia, aunque sabemos que no es el final de la historia", dijo Speziale.
El papá contó que "no se conocen las condiciones, no sabemos si es restringido a San Petersburgo ni tampoco cuándo podrá regresar Camila al país". "Probablemente se demore la salida de la cárcel hasta el lunes, pero saber que ya no va a estar detenida es una gran alegría", enfatizó y agregó que "probablemente se quede en una residencia durante el tiempo que tome la investigación por vandalismo".
Speziale remarcó que "son muchas las variables que intervienen en el caso", por lo que "no se sabe cuándo va a terminar todo esto".
"La semana que viene viajará su mamá a visitarla, creo que para ella también va a ser una gran alegría. Esto era un gran deseo, teníamos dudas porque la prisión podía hacer mermar sus fuerzas", dijo. El hombre contó que hace 10 días que no habla con Camila y expresó: "todo esto detuvo el reloj en casa, tenemos cinco hijos más y obviamente se extraña mucho, ahora tenemos una luz de tranquilidad".
"Agradezco no sólo a los intervinientes directos, a la gente que acercó alimentos y demás, sino también a todos los que mantienen el caso vivo desde acá, a la Cancillería, al Consulado y a toda la gente que se acerca", subrayó.
Para Speziale esta experiencia de pérdida de la libertad profundizó el conocimiento que Camila tenía de sí misma, así como sus principios y convicciones.
"Esto es lo que Camila transmite en sus cartas, vemos que su personalidad se ve enriquecida más allá de todo. Hay un enriquecimiento espiritual que le va a quedar de por vida", consideró.
