La nueva Copa Davis impulsada por Kosmos, empresa del futbolista del Barça Gerard Piqué, también tiene detractores. "Para mí, es una sentencia de muerte para la competición", ha asegurado el jugador francés Lucas Pouille, nº 15 mundial, una de las voces críticas contra el proyecto.
La Federación Internacional de Tenis (ITF) anunció el lunes el acuerdo con Kosmos para los próximos 25 años y una inversión de 2.500 millones de euros que prevé aumento de premios para jugadores y federaciones y la financiación de proyectos de base y programas para el desarrollo del tenis.
La propuesta está sujeta a su aprobación definitiva en la reunión general anual de la ITF que se celebrará en Orlando (EE.UU.) el próximo mes de agosto, donde serán necesarias dos terceras partes de los votos para dar la luz verde.
La nueva Copa Davis se jugaría a partir de 2019 en una única sede durante una semana de noviembre entre 18 países –los 16 del Grupo Mundial más otros dos– con una liguilla inicial de seis grupos de tres –pasan los seis primeros y los dos mejores segundos– y eliminatorias a partir de cuartos.
“Ya no puedes llamarlo Copa Davis. Si no juegas en casa o en el país de tu rival, ya no es Copa Davis. Cualquiera que haya vivido un partido de la Davis sabe que es diferente. Así ya no será lo mismo ni el mismo ambiente. Creo que es una idea muy mala”, ha asegurado Pouille.
Tanto en Francia como en Bélgica, vigentes campeón y finalista de la Davis, se han pronunciado otras voces en contra de la propuesta de Kosmos y la ITF.
“El fin de la Copa Davis. Qué tristeza. Han vendido el alma de una prueba histórica. Perdón señor Davis”, ha tuiteado el capitán francés, Yannick Noah, campeón de Roland Garros en 1983.
“Lo que yo entiendo es que todo el mundo estaba pidiendo a la ITF una evolución de la Copa Davis y ellos han salido con una sentencia de muerte para esta competición. El espíritu de la Copa Davis desaparecerá para siempre con este campeonato de una semana en noviembre. Sin eliminatorias en casa o fuera, sólo tres partidos para decidir cada confrontación”, ha opinado Amélie Mauresmo, ex nº 1 del tenis femenino.
El presidente de la Federación Belga de Tenis, Andre Stein, también se ha declarado “absolutamente en contra” de la nueva propuesta y ha dicho que otras federaciones europeas también votarían en contra en la decisiva reunión de agosto.
Cada confrontación constará de dos partidos individuales y uno de dobles, todos al mejor de tres sets. Es decir, adiós a las cuatro semanas anuales del Grupo Mundial y las eliminatorias de cinco partidos al mejor de cinco sets.
Es un cambio radical que colma los deseos de los principales tenistas, tal como ratificaron las primeras valoraciones de Rafa Nadal. Él y otros jugadores pedían desde hacía años una competición más ligera.
“Cuando una cosa no funciona a la perfección hay que buscar soluciones, hace años que esto es así. Es una buena iniciativa que puede funcionar, ojalá tenga éxito”, ha dicho el nº 2 mundial en Acapulco (México), donde reaparece en competición esta semana.
Por contra, los grupos zonales de la Davis no sufrirán cambios y seguirán disputándose con el sistema actual durante las tres semanas habituales de febrero, abril y septiembre. De ellos saldrán los ocho equipos que se clasificarán para jugar el playoff de ascenso que también se disputará durante la nueva fase final: los ocho vencedores ganarán su billete entre las 18 mejores selecciones del año siguiente.
