Es dueña de una risa angelical. Un halo especial. Es de esas personas a las que todas las quieren y se advierte. Llegó tarde para la nota, pero en cuanto pisó el parquet del Vicente Polimeni revolucionó el estadio. Se llama Luz Ana Paloma Palma, tiene 10 años y al igual que Lionel Messi (su ídolo) se le ha diagnosticado un déficit de hormonas del crecimiento. Este es un conflicto endocrinológico relativamente frecuente dentro de lo que son las enfermedades infantiles no tradicionales. Afecta aproximadamente a uno de cada 20.000 nacimientos.
"Un chico con este problema crece menos de lo que corresponde, es difícil saber cuánto hubiera medido si no se trataba. Lo que se sabe es que no alcanzará la talla que deberá tener por su genética", cuentan los médicos.
Paloma, que hoy forma parte del equipo de patinaje artístico de la Municipalidad de Las Heras, tiene un diagnóstico de que su altura máxima será no más de 1,20 metros y necesita un tratamiento para poder llegar al menos a 1,35. Fue por ello que Nahuel, pareja de su mamá, se comunicó con la Fundación Lionel Messi para tratar de que desde allí se la ayudara y en las últimas horas le confirmaron que su caso está entre las prioridades para realizar su tratamiento en Barcelona, el que duraría tres meses y hacia donde viajaría con su mamá.
Sólo faltan detalles administrativos para que la situación se defina y la noticia ha puesto muy contenta a todas sus profesoras y compañeras de entrenamiento. "Estoy muy contenta. Me gustaría mucho poder conocer a Messi. Yo quería jugar al fútbol, porque él es mí ídolo", cuenta Paloma, mientras se toma un descanso después de hacer sus figuras arriba de los patines.
"Este deporte me hizo muy feliz y ya no quiere dejarlo (se refiere al patín), acá me siento cómoda porque participo con chicas de mi edad. Antes hice baile (hace el gesto de las castañuelas con sus manos) y gimnasia artística, pero ahí me ponían con nenas más chiquitas y me aburría", sigue en su alocución con una madurez que no es propia para los chicos de su edad.
Esta alumna de la escuela José Manuel Olascoaga, habla con mucho cariño de sus tres hermanos (20,16 y 13) y con total naturalidad cuenta que: "ya me han internado varias veces para darme las hormonas que necesito para crecer, pero lamentablemente no han tomado y por eso sería bueno poder ir a España. El tratamiento es que me internan un par de horas y me van sacando sangre del brazo con una jeringa”, asegura mientras Paola, su mamá, la escucha y se le llenan los ojos de lágrimas.
Hay mucho amor en esa madre que lucha día a día para tratar de revertir la situación de su hija. “Yo me levanto todos los días a las seis de la mañana y amaso pan y tortitas que vendo por la calle. Mi pareja trabaja en una pizzería. El tratamiento de ella cuesta 15.000 pesos mensuales. Estoy desempleada y la verdad que el tratamiento nos requiere mucho dinero. Hoy es imposible para mí y lo peor es que no tengo una obra social que me respalde. Agradezco mucho todo lo que han hecho en el Notti, especialmente a la doctora Carina López Avellaneda. Pero las hormonas que entran a la Argentina no han surgido efecto en Paloma. Necesitamos una más potente y esa no tienen autorización para entrar en el país", cuenta con la rapidez de una persona que necesita deshagorse.
“El tiempo nos apremia, porque necesitamos que la hormona se despierte antes de que Paloma se desarrolle. El problema es que sus órganos siguen creciendo, pero el cuerpo no. Por ejemplo, ella ya tienen bien grandes los dientes, pero sus huesos no están madurados para soportarlos. La gente que nace con enanismo tiene una complexión muscular adaptada, en este caso no es así. Las hormonas le han hecho crecer en lo mental, lo que hace que todo le resulte fácil. Tiene un cuerpo de cuatro, unos órganos de diez y una maduración mental de 13 años", sigue contando Paola, con un entusiasmo que transmite.
Paola agradeció el trabajo que está realizando su profesora Andrea Yovino, quien también contó sus sensaciones. “Es impresionante todo lo que ha crecido en este año que llevamos juntas. La verdad que cuando llegó le pedí todos los estudios médicos necesarios, porque este es un deporte de riesgo, hay caídas y golpes duros. Los avances que ha tenido son extraordinarios. Es una nena que contagia. Tiene muchas habilidades, pero sabemos que ha sido discriminada desde chiquitita y nos enfocamos mucho en su autoestima. De todas maneras, es una nena muy despierta, con un vocabulario muy amplio que ha pasado por tantas cosas. El grupo la ha aceptado muy bien y es una de las más queridas. Ahora estamos trabajando para que haga un dúo y participe en los certámenes en esa categoría”, cuenta la profe, quien está muy .
Paloma no para de hacer giros y piruetas sobre sus patines. Antes de irnos, agradece la nota y se le iluminan los ojos cuando le consultamos si nos dará una nota cuando sea campeona. Seguramente, al igual que Lionel, debe haber soñado mil veces ese momento de gloria. “Claro que sí”, dice con su desenfado y sigue llenando de figuras y esperanza el Polimeni. Por lo pronto, la historia recién comienza.
Una escuela que crece
Si bien es muy nueva, la escuela de patinaje de la Municipalidad de Las Heras ha conseguido muy buenos resultados en el último certamen regional que se disputó en Junín.
"Fueron 35 chicos los que presentamos y clasificamos a cuatro para el Nacional, más allá de que hubo seis que se quedaron con el título. El tema es que Valentina Zuarzo y Luz Ilardo no pueden viajar porque son menores de ocho años y la Federación ha decidido que por edad no pueden representarla. Los que si viajarán a Termas de Río Hondo entre el 17 y el 23 de setiembre son Benjamín Funes, Aixa Funes, Noralí Montiveros y Ana Paula Carrizo", cuenta la profe Belén Costantino.
Para todos aquellos que quieran iniciarse en la actividad, la Municipalidad tiene varios Cedrys con la disciplina y también pueden acercarse al Vicente Polimeni los martes o jueves de 18 a 21 horas.