Cuando en el fixture aparece que se enfrentarán los dos equipos que están en el fondo de la tabla de posiciones, es casi seguro que saldrá un encuentro cerrado y con pocas situaciones y que ganará el que sea más efectivo... y eso pasó en el partido entre Palmira y Luján, donde el Granate le ganó con lo justo al Jarillero con un golazo de Facundo Bailo.
Tanto el entrenador local, Tomás Ortiz, como el visitante, Juan Pablo Videla, coincidieron que el primer tiempo fue muy flojo, donde ambos equipos casi no llegaron al arco contrario.
Está claro que Luján necesita de un buen campo de juego para que su mediocampo pueda sacar diferencias, ya que no juega con un volante central de marca, sino con dos organizadores como Ibaceta (Nahuel) y Matías
Guardia, mientras que por los costados Bailo y Rosales son los encargados de hacer jugar al equipo, pero lamentablemente en ésta época del año no se puede pedir mucho de las canchas.
En el segundo tiempo la visita metió un cross al mentón gracias al golazo de Bailo, que ingresó por el vértice derecho del área y tomó la pelota de volea para clavarla en el ángulo de un Leandro Irrera que no pude hacer nada.
Apenas llegó el gol, el “Loro” mandó a la cancha a José Ortiz y Cristian Mortes, quienes le cambiaron la cara al Jarillero y ahí llegaron las situaciones para el local.
Primero fue un tiro libre de Joselito que dio en el palo y después Matías Pérez apareció en dos oportunidades para mantener en cero su arco.
De esta manera Luján se quedó con tres puntos más que importantes, ya que son los primeros del torneo y servirán para recibir con otra expectativa a Jorge Newbery.
Por el lado de Palmira, la continuidad de Ortiz quedará en sus manos, pero también deberá pensar que tendrá que visitar al líder Andes.