Los países del G20, que agrupa a las 20 mayores economías mundiales, propusieron ayer una serie de medidas para aumentar en 1,8% el valor de su PIB (producto bruto interno) en los próximos 5 años, al terminar su reunión en Australia.
Reunidos durante 2 días en Cairns, en la costa oriental australiana, los ministros de Finanzas y gobernadores de los Bancos Centrales del G20 se han propuesto ese crecimiento suplementario mediante la puesta en marcha de reformas e inversiones, un objetivo que se habían fijado en febrero en Sydney.
"Análisis preliminares del FMI-OCDE indican que estas medidas aumentarán nuestro PIB colectivo en un 1,8% adicional hasta 2018", reza el comunicado final al término de la reunión. Australia asume este año la presidencia del G20.
Para conseguirlo, estos países que representan 85% del comercio mundial y 2 terceras partes de la población del planeta, se pusieron de acuerdo sobre 1.000 medidas, en particular inversiones en infraestructuras, reformas financieras e iniciativas para desarrollar sus intercambios comerciales y económicos.
Los ministros, que allanan el terreno para la cumbre de mandatarios que tendrá lugar en noviembre en Brisbane, también en la costa oriental del país, se han comprometido a crear una Iniciativa Global sobre Infraestructuras, en realidad una base de datos, para intercambiar información sobre proyectos e inversiones "de calidad".
"La inversión es esencial para incentivar la demanda y aumentar el crecimiento", reza el comunicado.
"La iniciativa también incluirá medidas clave en nuestras estrategias de crecimiento para mejorar la seguridad, fundamental para atraer la participación del sector privado", añade el texto.
No obstante, el anfitrión del encuentro, el titular de Economía australiano Joe Hockey, aseguró que el "G20 reconoce que muchas de las decisiones y acciones para que la economía siga creciendo son difíciles. Pero seguimos determinados a incrementar el crecimiento de los naciones”.
Posición de la titular del FMI
Al término de la reunión, la directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, abogó por la adopción de políticas económicas que contribuyan al crecimiento.
"Pese a la recuperación (económica) mundial, el ritmo de crecimiento es bajo e irregular, en parte debido a las tensiones geopolíticas y a los riesgos de turbulencias en los mercados financieros.
Por ello es esencial promover políticas económicas que contribuyan a un crecimiento más sólido de la actividad económica y del empleo" aseguró Lagarde.
Por su parte, el secretario estadounidense del Tesoro, Jack Lew, urgió ayer domingo a la Eurozona a que tome medidas para incentivar la demanda y lleve a cabo las reformas estructurales necesarias para que su economía crezca.
"Las discusiones durante este fin de semana han arrojado un consenso creciente de que Europa necesita hacer más para que su economía crezca", dijo Lew.