A los 40 años, el bahiense la rompe y es furor entre los seguidores de la NBA. Incluso los más famosos.
Emanuel Ginóbili jamás se debe haber imaginado, a los 40 años, jugando en el nivel en el que lo está haciendo. Tampoco, con tanto reconocimiento. Aunque la realidad es que Manu viene repitiendo actuaciones de novela. Y mientras sus rivales hacen fila para elogiarlo, sus admiradores mueven cielo y tierra para verlo en el All Star Game. Pero hay un fanático muy especial que ante la posibilidad de que el bahiense no sea elegido, decidió poner miles de dólares para tenerlo frente a frente. ¿Quién es? Un tal Brad Pitt.
No, no es un chiste. El actor estadounidense, una de las grandes estrellas de Hollywood, es uno más de los tantos fans de Ginóbili. Y, a la vez, es uno de los privilegiados que compró una “experiencia exclusiva” para ver un partido de los San Antonio Spurs y, de yapa, conocer en persona a Manu. ¿Cuánto pagó? 40.000 dólares, unos 770.000 pesos argentinos.
La transacción, según informó AP y reprodujo el diario “My San Antonio”, se concretó el último sábado por la noche, en una cena a beneficio de la Organización de Ayuda Haitiana del también actor Sean Penn. El costo del cubierto era de 15.000 dólares y tenía como bonus una subasta, que incluía todo tipo de ofertas, como la experiencia con el equipo texano que compró Pitt.
La “experiencia exclusiva” le servirá para ver un partido de los Spurs desde un sector privilegiado del AT&T Center de San Antonio y para conocer a los integrantes del plantel personalmente. Entre ellos el gran Manu, el pibe de 40 años que sigue sorprendiendo a todos.
Esa misma noche, Pitt también quiso quedarse con una pintura pero fue superado en la subasta por Arnold Schwarzenegger, que pagó 70 mil dólares. Y tampoco pudo quedarse con el otro paquete por el que ofertó: ver un capítulo de Game of Thrones con Emilia Clarke (puso sobre la mesa 120 mil dólares, pero finalmente fue vendido en 160 mil).
Pero su revancha llegó cuando aparecieron los Spurs en escena. Ahí, el protagonista de varios éxitos del cine, insistió y subió su oferta hasta quedarse con la posibilidad de ver a Manu de cerca. Y, también, cumplir un viejo sueño, ya que Pitt jugó de chico al básquet y le encanta el deporte.
Populares, millonarios y con el ego por las nubes, los actores y actrices de Hollywood suelen ser los protagonistas que todo el mundo quiere conocer. Pero muchas veces no tienen problemas en intercambiar roles. Si bien no puso ni un dólar, el año pasado Julia Roberts, por ejemplo, fue invitada al Santiago Bernabéu a presenciar el clásico entre el Real Madrid y el Barcelona y, luego del partido, no quiso irse del estadio hasta conocer a Lionel Messi.
Ahora llegó el turno de un Brad Pitt que, como tantos otros, está completamente entregado a los pies de Manu.
