Los alumnos de los colegios de la Universidad Nacional de Cuyo no comenzaron las clases la semana pasada como el resto debido a que los docentes realizaron paro desde el miércoles. Ante esto, un grupo de padres organizados solicita que la casa de estudios implemente un plan de contingencia para evitar la pérdida de contenidos. El año pasado fueron 49 las jornadas en que no asistieron a  clases por medidas de fuerza por lo que advierten dejaron de ver una importante proporción del programa. Les preocupa que 2019 haya iniciado igual por lo que hoy mismo presentaron al Rectorado la solicitud formal.

"Nuestros cálculos nos indican que en los últimos cinco años se perdieron por huelgas cerca de 180 días de clases, es decir el equivalente a un año lectivo completo", sostienen en una nota presentada hoy al rectorado de la casa de estudios.

Son alrededor de 5.700 alumnos los que asisten a estos colegios.

Fernando Rozzi  miembro del grupo "Padres en acción por la educación argentina",  comentó que además han solicitado un informe a la UNCuyo para conocer fehacientemente cuáles son los contenidos que no se vieron. Quieren saber si  los alumnos los recuperarán al comienzo de este ciclo lectivo o se hará lo que ya estaba planificado. "Solicitamos un plan de contingencia si siguen los paros, algo que ya habíamos solicitado el año pasado, para que los chicos no se queden en la casa sin hacer nada", comentó.

Sugirieron entonces clases a través de la web como contenidos virtuales y tareas. También contratar profesores suplentes y solicitud de apoyo a la provincia, cuestiones que no fueron tomadas en cuenta en aquel entonces.

Descuento del sueldo

En el escrito piden el compromiso del rectorado para evitar el abuso de las medidas de fuerza, solicitan el control del ausentismo y que sean descontados los días de paro, una medida que para ellos no ha tenido resultados positivos en cuanto a mejoras salariales.

Francisca Staiti, secretaria general del gremio Fadiunc comentó que entre 2005 y 2011 se descontaban esos días y los paros se realizaban igual.

Actualmente realizar o no el descuento es una atribución del Consejo Superior pero no se ha discutido.

Staiti aclaró que no son todos los padres los que cuestionan esta medida e hizo un llamado: “A los papás les decimos que no hay que esperar a que empiecen las clases para hacer acciones conjuntas, los hemos invitado a esto, hacer presentaciones a las autoridades pero no para confrontar sino tomar conciencia de que quien está dañando la educación es el gobierno”.

El conflicto

Los docentes de la de Universidad Nacional Cuyo  hicieron paro el miércoles y jueves pasado, cuando el calendario marcaba el inicio de clases. Esto debido a la adhesión de Fadiunc, la Asociación de Docentes e Investigadores de la UNCuyo,  a una medida convocada a nivel nacional por Conadu Histórica mientras que el viernes 8 se sumaron al paro nacional (e internacional) de mujeres.

Estos padres ya se han manifestado años anteriores por las consecuencias negativas que advierten que este tipo de medidas tiene sobre la calidad educativa.

“Por los días perdidos el año pasado mi hija terminó primer año sin ver algunos temas”, contó Mariana Gamarra, mamá de una alumna del CUC.

“Se habló con algunos docentes que dijeron que supuestamente los abordarían este año pero ya comenzaron con paro, o sea, perdiendo más días; nadie se comprometió a nada pero imagino que lo charlarán entre los docentes  para cubrir esto”, prosiguió.

Y agregó:” mi hija tenía clases un martes y no volvía hasta el otro miércoles o tenían que presentar un trabajo en una materia que tienen los miércoles y había paro y pasaba un mes”.

Más días sin clases

Aunque existen varios grupos de padres, la mayoría advierte que no es que estén en desacuerdo con el reclamo sino con la manera en que se implementa ya que los perjudicados son los chicos.

Advierten que el año pasado hubo 49 días perdidos entre paros de docentes (47) y paros generales (2). Sostien que los días de clase efectivos fueron 123, teniendo en cuenta que en la segunda mitad del año hubo 6 semanas corridas sin actividad, considerando también feriados.

“Ya desde el comienzo se arranca con menos días y la perspectiva es que estaremos atravesados por paros todo el año sin que a las autoridades se les mueva un pelo”, dijo Gabriela, mamá de una alumna del DAD.

Consideró que se trata de un escenario gravísimo si a los 49 días del año pasado se suman la totalidad de los que un alumno pierde en todos los años de su tránsito por el secundario. Esto impacta en su aprendizaje y también en su sociabilización además de generar conflicto entre quienes piensan diferente.