El giro total de fondos nacionales a Mendoza aumentó un 40,8 por ciento en el primer bimestre del año, al alcanzar los 5.936,7 millones de pesos, por lo que el Pacto Fiscal le está dando buenos resultados a la administración de Alfredo Cornejo.
Según datos de la Dirección Nacional de Asuntos Provinciales a los que accedió Los Andes, Cornejo recibió de la gestión Macri en el primer bimestre 1.718,9 millones de pesos más que en el mismo período del 2017.
Fueron exactamente 5.677 millones por fondos de origen nacional (como coparticipación de impuestos), 107 millones de pesos por el Fondo Federal Solidario (que se forma con las retenciones a las exportaciones de soja) y 152 millones pesos por compensación de la Ley 27.429 del Pacto Fiscal.
Según analizó la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP), la inversión real directa de la Nación en Mendoza y las transferencias de capital a la provincia crecieron un 61 por ciento en el primer bimestre del año, al alcanzar los 508 millones de pesos.
Como contrapartida, hay que descontar el 24,8 por ciento de inflación aproximada acumulada en el período. Fuentes del Gobierno nacional consultadas por Los Andes vaticinaron que los giros a Mendoza crecerían este año en torno al 25%, unos cuatro puntos porcentuales por encima de la inflación real proyectada.
El Pacto Fiscal firmado en noviembre pasado por el presidente Mauricio Macri, Cornejo y otros 22 gobernadores (el único rebelde fue el puntano Alberto Rodríguez Saá) modificó la forma de contabilizar algunas transferencias y compensaciones, por lo que este año habrá que mirar con lupa las comparaciones anuales. Pero hasta ahora, a Mendoza no le va nada mal en el reparto.
En el primer bimestre del año aterrizaron en la provincia unos 508 millones de pesos de transferencias de capital, una cifra muy superior (61%) a los 316 millones del mismo período del año pasado, según datos oficiales analizados por ASAP. Ese dinero representa el 14 por ciento de los 3.628.6 millones que el Gobierno nacional prevé enviar a Mendoza a lo largo de 2018 en este concepto.
Ese Pacto, impulsado enérgicamente por Cambiemos, busca bajar la presión tributaria total (de Nación, provincias y municipios) sobre la actividad privada y para ello reorganizó el reparto de fondos y la forma de gastarlos, atando el crecimiento de las erogaciones a la inflación, entre otros aspectos.
Es que el Gobierno está buscando reducir el rojo fiscal nacional al 3,2% este año, 2,2% en 2019 y 1,2% en 2020 para soñar con el equilibrio en 2021 o 2022, por la necesidad urgente de frenar el vertiginoso avance de la deuda externa, que aumentó en unos 80.269 millones de dólares en lo que va de la gestión de Macri.
Denuncias opositoras
La distribución de los recursos no automáticos en lo que va de 2018 registra un fuerte crecimiento para Mendoza, aunque en otros casos esos incrementos son exponenciales (alcanzando al 384% anual en el caso de Corrientes) y en otros, muy magros. Fuentes de Casa Rosada explicaron a Los Andes que eso responde exclusivamente a las urgencias que van mostrando las provincias.
En la vereda de enfrente no lo ven así. El diputado salteño Pablo Kosiner, jefe del interbloque Argentina Federal, espacio que representa los intereses de los gobernadores del PJ, denunció que hay una "fuerte discrecionalidad" en la asignación no automática de recursos. "Veo cosas que me generan alarma. Por ejemplo la situación de los Aportes del Tesoro Nacional que están concebidos para situación de crisis, o de desfasaje económico. Lo vimos en el último informe del jefe de Gabinete, Marcos Peña, donde de acuerdo a la información que dio, un 75% de los ATN fueron distribuidos en el 25% de los municipios que administra Cambiemos", sostuvo.
ASAP analizó que en el primer bimestre las provincias y los municipios recibieron 17.535 millones de pesos en concepto de transferencias. Se trata de un 18% más que en el mismo período del año pasado, pero el monto está por debajo de la inflación del período (25,4%, según el Indec), de manera que se trata de una reducción en términos reales.
Las transferencias de carácter corriente registraron un fuerte dinamismo, con un incremento del orden del 59,1% anual, que fue contrapesado por la retracción de los flujos para el financiamiento de inversiones, que cayeron un 17,2% anual. Por este último dato es que ya expresaron sus quejas algunos gobernadores.
Incluso, esta situación llevó a que La Pampa decidiera a fines de marzo bajarse del Pacto Fiscal. El ministro de Hacienda de esa provincia, Ernesto Franco, dijo que la decisión responde a que el diálogo con Nación está cortado. "Desde 2016 a la fecha sólo nos envían lo que no es discrecional y, a su vez, no hay obras. Entonces, si hoy nos mantenemos, lo podemos hacer", expresó.
Horas antes del Jueves Santo, mediante una carta con copia a Rogelio Frigerio, el bloque Córdoba Federal de la Cámara Baja pidió una reunión urgente con la secretaria de Infraestructura Urbana, Marina Klemensiewicz, la funcionaria más importante del Ministerio de Interior y Obras Públicas. Pero por ahora no obtuvieron respuestas.
En el PJ y el resto de la oposición preocupa que ante la caída anual de las transferencias discrecionales el pago de compensaciones (sobre todo los plazos de giro) se tornen ahora una herramienta de negociación de la gestión Macri con los gobernadores que mayores tensiones políticas tienen.
Y se respaldan en los antecedentes: desde diciembre de 2015, los gobernadores y -sobre todo- los intendentes aliados a Cambiemos recibieron más Aportes del Tesoro Nacional (ATN) que sus pares de la oposición. En promedio, por cada peso que recibió un intendente opositor vía ATN, uno del oficialismo consiguió 7,6 pesos. Entre los gobernadores, por cada peso que percibió un opositor, los oficialistas accedieron a 2,3 pesos.
En el Gobierno dicen que no existe tal discrecionalidad: los ATN se distribuyen por emergencia (inundaciones) y desequilibrios financieros (básicamente, pago de sueldos) de las provincias y municipios. Pero los gobernadores e intendentes aseguran que el mayor nivel de discrecionalidad se da en este último caso. Y en el final de 2017 y principio de 2018 el desbalance comenzó a atenuarse.