Las declaraciones del entrenador de Independiente Rivadavia de Mendoza, Pablo Quinteros, quien advirtió que aceptaría con gusto una incentivación económica en caso de ganarle el fin de semana a Patronato, tomaron por sorpresa a los dirigentes, jugadores y cuerpo técnico de Atlético Tucumán, equipo que pelea el ascenso con los entrerrianos, y el manáger de la entidad, Diego Erroz, aclaró que "no es posible hacerse cargo de las palabras de un técnico de otro club".
"Hoy por hoy dependemos de nosotros mismos en el campeonato, así que lo que se diga o pase en el partido entre Patronato y los mendocinos, más allá de que nos interese el resultado, no será porque Atlético tuvo algo que ver”, afirmó Erroz.
"Nosotros no nos podemos hacer cargo de las palabras de un técnico de otro club", insistió el manager del equipo tucumano que es puntero de la B Nacional con 78 puntos y el único que puede pelearle el ascenso directo a Primera División es Patronato, escolta con 75, cuando quedan tres fechas para concluir la temporada.
"A nosotros lo único que nos tiene que importar es ganar los tres partidos que nos quedan", señaló por su parte Cristian Lucchetti, arquero y figura del equipo que está a un paso de regresar a la máxima categoría del fútbol argentino.
Quinteros sorprendió hoy al declarar a diferentes medios que "si viene Atlético Tucumán" y le ofrece dinero "para ganar", lo aceptaría.
Independiente Rivadavia será el próximo rival de Patronato, partido que se jugará el domingo, en Paraná, un día después de la presentación de los tucumanos en Mar del Plata, frente a Unión de esa ciudad.