Desde hace siete años secretario general de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (Apla), Pablo Biró, es un sindicalista en ascenso dentro del armado de una CGT confrontativa, como Pablo Moyano.
Biró fue entrevistado por este diario entre su regreso de Mar del Plata, donde fue el único sindicalista invitado a Idea, la máxima cumbre anual empresarial; y su participación como dirigente del Frente Sindical para un Modelo Nacional (Fresimona) de la multitudinaria marcha a Luján por "paz, pan y trabajo", con el respaldo de la Iglesia Católica.
Entre sus definiciones, Biró, perteneciente de una nueva generación sindical (a punto de cumplir 52 años), rechazó la reforma laboral que impulsa el Gobierno y consideró "indefectible que esto termine en un estallido social".
Peronista (también lo fueron su padre aviador y su madre fundadora de una unidad básica), aunque no alineado con sector alguno, opinó que la ex Presidenta Cristina Fernández de Kirchner "tendría que excluirse como referente máximo para que su espacio pueda sumar a la unidad del peronismo. No sirve de nada tener al mejor líder si no tenés consensos".
-Su presencia en el coloquio de Idea sorprendió.
Ya había participado en el precoloquio, junto a dirigentes de UPCN y Satsai. Al coloquio me invitaron a hablar en mesas, no como expositor, sobre problemática del movimiento obrero, política aerocomercial, costo laboral, innovación tecnológica. Pude constatar que los empresarios fueron muy autocríticos y que están golpeados por la causa de los cuadernos. Muchos decían que como lo único que anda es la timba financiera, los capitales productivos se transforman rápidamente en especulativos.
-El ministro de la Producción, Dante Sica, insistió en una reforma laboral.
La reforma laboral no puede tener lugar en un contexto en el que pulverizaron el poder adquisitivo del salario. Para plantear cambios estructurales tiene que haber un escenario estable y armónico, con consensos sobre productividad. En todo caso lo será cuando haya que reconstruir el desastre en la matriz económica, social y productiva que dejarán. Sica lo hizo porque es muy de este Gobierno decir lo que quiere escuchar su hinchada.
-La CGT anticipó un quinto paro nacional en noviembre. ¿Cuál es su posición?
Desde el núcleo del MTA, la Corriente Federal y el Fresimona estamos pidiendo un Comité Central Confederal para remplazar a la conducción de la CGT y hacer un acuerdo programático. La unidad sin contenido no sirve. Todas las medidas que va tomando la CGT son inconducentes, inconexas, poco planificadas y mal ejecutadas. Tiran un paro para noviembre cuando el 24 de este mes tratan el Presupuesto que es la consumación del ajuste. Ese día tendría que estar todo parado. Así está siendo funcional a la anarquía; dicen que no quieren prender la mecha, pero es por culpa de ellos que se va a prender.
-Dentro del sector combativo, algunos te mencionan para conducir la CGT. También a Pablo Moyano.
Si hay consenso de los compañeros que integran la CGT, no importa el nombre. Y con consenso hay un montón de compañeros capaces. Si es así, estoy dispuesto a afrontar el desafío. Pero si es para negociar en un diálogo de sordos, no. Necesitamos un movimiento obrero que confronte y que después negocie.
-¿Cómo evalúa la interna dentro del peronismo? ¿Cree posible un triunfo en 2019?
Es una guerra de egos. Incluyo especialmente a Cristina. Con el kirchnerismo tengo diferencias porque tenía poco de peronismo, hubo muchos momentos de ninguneo.
-¿Quién representa mejor esa unidad?
Felipe Solá es hoy un conciliador sin sectarismo. Pero hay varios caudillos provinciales con buena gestión, como Rodríguez Saa. Quien llegue va a encontrarse con una matriz productiva y social destruida, por lo que habrá necesidad de liderazgos fuertes.
-¿Ve posible una continuidad de Cambiemos?
Sí. El Gobierno se ha especializado en dividir. Hay personajes que en eso le son funcionales; no entienden que la actividad política o sindical es solidaridad en estado puro.
Anticipó medidas de fuerza en la paritaria aeronáutica
“La negociación de la nueva paritaria ya arrancó. La semana que viene habrá una reunión de todos los gremios y seguramente anunciaremos medidas de fuerza”, anticipó Biró. El balance de la paritaria de este año (va de setiembre a setiembre) es positivo en el caso de Aerolíneas (terminará en alrededor de 40% por la cláusula gatillo, después de cerrar en 17%), pero no así en el de LAN donde no hubo gatillo y quedó en 24%.
-¿Qué evaluación hace de la política de low cost que impulsa el Gobierno?
-Es igual que la de cielos abiertos: hacen acuerdos bilaterales con otros países que traen sus trasnacionales y se llevan nuestros pasajeros, sin pautas de equidad ni reciprocidad. Y hacia adentro, las low cost precarizan costos salariales, mantenimiento, entrenamiento, servicio y hasta la seguridad.
-¿Cuál es el propósito?
-Perjudicar a Aerolíneas y a todas las empresas argentinas establecidas. En estos días Andes devolvió aviones y prevé devolver más, como también despidos. En Aerolíneas cerraron la ruta a Barcelona, recortaron presupuesto y Madrid anunció la desprogramación de dos aviones internacionales. Roma comercializará hasta un máximo de 130 asientos sobre 260 por vuelo. Así justifican que el mercado internacional cayó y que tienen que cerrar rutas para optimizar recursos. Ya lo vimos en los 90, cuando quebraron muchas líneas locales.