Independiente consiguió lo que tanto esperaba en su regreso a Primera División. En el Libertadores de América se repuso a un mal comienzo y le ganó a Racing, al que le dio vuelta el encuentro y le ganó por 2-1. El equipo de Jorge Almirón no jugó bien, pero se llevó su segunda alegría consecutiva y estiró aún más su paternidad sobre la Academia.
Comenzó mejor el equipo de Diego Cocca; con dominio del balón y la búsqueda de las bandas para lastimar a un Independiente todavía tibio. Diego Milito se paró como el referente y el encargado de cada ataque. Y por él, casi llega el primero. El ex Inter llegó al fondo por la derecha tras un buen pase de Gastón Díaz, la tocó de taco y el propio ex Vélez remató al arco, exigido y sin peligro.
Pero Racing siguió con la iniciativa. Y con insistencia llegó a abrir el marcador. Ricardo Centurión, hasta entonces más comprometido con la marca que con el juego, bajó un pelotazo cruzado, encaró a Droopy Gómez y siguió con la pelota. El zurdo tiró un centro al área y Diego Milito, aprovechando una pésima salida de la defensa, definió solito frente a Diego Rodríguez.
El Rojo era un desconcierto y Racing seguía con la iniciativa. Pero dos pelotas al área iban a revertir el marcador. En la primera, tras una inexistente falta que cobró el árbitro Fernando Rapallini, Federico Mancuello la tiró a la puerta del área chica y Sebastián Penco se estiró para tocarla desde el suelo y marcar el empate. Y dos minutos después llegaría el segundo. Esta vez, Daniel Montenegro tiró otro centro al mismo lugar y Mancuello aprovechó una mala salida de Sebastián Saja para anotar el 2-1.
Las malas noticias seguirían para Racing. Pasada la media hora, Diego Milito sintió un pinchazo en su pierna derecha y su físico no dio para más. Cocca debió recurrir a Gustavo Bou para reemplazar al autor del gol de la Academia.
Después de la desorientación del visitante, con el marcador en contra, sobre el final del primer tiempo casi llega el empate. Racing se acomodó sobre el final y en dos ocasiones Rodríguez salvó al local. Primero, tras un remate de Nelson Acevedo, que tapó abajo. Luego, achicando rápido en el rebote ante la llegada de Bou, que la tocó por arriba, pero muy lejos del arco.
Independiente se replegó en el segundo tiempo. Pero así y todo contó con tres chances inmejorables. Mancuello, con un gran remate, estrelló una pelota en el palo en un tiro libre. Luego, Saja le sacó un tremendo cabezazo a Cristian Tula, quien ya jugaba de regalo, porque el árbitro debió expulsarlo por un fuerte golpe a Centurión.
Racing insistió a su manera, pero nunca logró generar peligro en el arco del Rojo. Tocó de manera intrascendente y se fue del Libertadores de América con su segunda derrota en el campeonato. Esta vez chocó con un Independiente que supo aprovechar sus errores defensivos y con un árbitro que no estuvo en su mejor tarde.