9 de febrero de 2025 - 00:55

Oscar 2025: ¿cómo pasó "Emilia Pérez" de ser la película favorita a ser la más odiada por el público?

Con 13 nominaciones en los Oscar, la película de Jacques Audiard era la preferida de la Academia. Por qué es tan criticada y qué tanto hay de valor en ella.

Lo que está sucediendo con "Emilia Pérez" quedará en los libros de historia del cine. Lo que comenzó como una campaña en México contra una película de producción francesa considerada ofensiva para este país tomó rumbos impensados hace apenas unas semanas.

Y el punto de quiebre fueron sus insólitas 13 nominaciones a los Oscar, que la convirtieron en una de las películas más nominadas de la historia, quedando en el mismo selecto grupo de clásicos como "Lo que el viento se llevó" (1939), "Forrest Gump" (1994) y "El Señor de los Anillos: la Comunidad del Anillo" (2001). Sí, una exageración por parte de la Academia de Hollywood.

Recordemos que este "narcomusical", que es la principal apuesta de Netflix para este año, fue dirigido por el francés Jacques Audiard ("Un profeta", "Dheepan") y protagonizado por la actriz trans española Karla Sofía Gascón, Zoe Saldaña y Selena Gómez (de orígenes dominicanos una y mexicanos otra). ¿El argumento? Un derroche de inverosimilitud. Un sanguinario narcotraficante mexicano decide cambiar de sexo, y una vez convertido en una elegante mujer europea vuelve a su país y se convierte en una heroína de la lucha por recuperar los cuerpos de los desaparecidos por el narcotráfico. La película termina con ella convertida en una santa popular, de hecho.

La película más polémica

Sí, "Emilia Pérez" no es una película que deje indiferente. Audiard rompe la barrera de géneros cinematográficos con una audacia pocas veces vista, y sus méritos técnicos son incuestionables. Incluso el ataque que recibió Selena Gómez en redes por su terrible español es injustificado, puesto que su personaje es el de una estadounidense que vive en México. El problema de "Emilia Pérez" es, sobre todo, una cuestión moral. ¿Se puede trivializar el narcotráfico, la redención de un criminal? ¿Se puede querer llegar a lo más alto del reconocimiento a través de los estereotipos y de la desinformación (el director dijo que ni siquiera investigó sobre México para hacer la película)? ¿Por qué la directora de casting consideró que no había ningún mexicano con el talento suficiente para interpretar a alguna de las tres protagonistas? ¿Por qué el primer mundo se apropia de la representación del tercero? Sí, la película empezó con el pie izquierdo.

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Y fueron los propios mexicanos los primeros en advertirlo. Una intensa campaña en su contra encendió las redes sociales el mes pasado: memes que se reían del ridículo guion (escrito por el francés), coreografías y canciones pretendidas de vanguardistas que dejan al espectador preguntándose "WTF", y muchos errores derivados del desconocimiento de su cultura. De hecho, apenas 110 mil mexicanos fueron a verla al cine: muchos de ellos lo hicieron incluso con el solo objetivo de pedir después el reembolso de Cinépolis, cuya "garantía de satisfacción" fue usada por miles de clientes y tuvo que ser redefinida por la empresa. Y para sumarle más humor al asunto, un grupo de detractores filmó "Johanne Sacreblu", una parodia musical de media hora que parodia, a la inversa, todos los estereotipos franceses: desde los croissants a las ratas de París. Lo vieron casi tres millones de personas y se proyectó también en algunos cines. Un país entero unido contra una película. Pero esto era solamente el principio.

Cuando empezó la campaña de promoción de cara a los Oscar, asomaron los verdaderos problemas fuera de México. En una entrevista, Audiard le bajó el precio al español, asegurando que era una lengua de países pobres, migrantes y en desarrollo. "¿Y el francés?", se preguntaron todos. Y casi en simultáneo, Karla Sofía Gascón rompió en otra entrevista una regla de oro: no hablar mal de una colega.

Fue lo que hizo al asegurar que el entorno de la brasileña Fernanda Torres, quien compite junto a ella en la categoría de Mejor Actriz por su papel en "Ainda Estou Aqui", había organizado una campaña en su contra en redes sociales. Los tuiteros de ese país, multitudinarios y furibundos, pidieron que se le retirara la nominación. Algo que todavía no ha sucedido pero, viendo que falta mucho todavía para el 2 de marzo, no hay que descartar. Pero además, siguiendo el ABC de una cancelación, algunos fueron a buscar tuits de ella del pasado, y lo que descubrieron fue oro puro.

Lo cierto es que Karla Sofía Gascón resultaba desde el principio un personaje antipático. En distintas entrevistas, se refería a ella reiteradamente como una de las mejores actrices del mundo y a "Emilia Pérez" como la mejor película de la historia. Sin dudas, afirmaciones bestiales, que quedaron completamente olvidadas una vez que miles de usuarios empezaron a reflotar tuits de su pasado (no tan lejano).

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La respuesta de los Oscar y de Netflix

Fiel al estilo picante de la red hoy llamada X, Gascón tenía la costumbre de arremeter contra minoría, religión o famoso existiera. Descubrieron muchas declaraciones islamófobas y otras racistas. Criticaba a Adele, a Maradona y hasta a la banda coreana de K-Pop BTS, cuyo enorme fandom (conocidos como los "ARMY" en las redes) se sumó a la campaña contra "Emilia Pérez". La tormenta se hizo cada vez más grande.

Pero resulta que ni su compañera de elenco se salvaba: en un tuit decía que Selana Gomez era una "rata rica". Y en otro criticaba con cinismo la diversidad forzada de los Oscar: algo de lo que hoy ella misma es beneficiada, por ser la primera actriz trans en ser nominada. Luego de que se difundiera esto, la Academia de Hollywood dejó de seguirla en Instagram.

Pero el culebrón siguió. Hace seis días, la actriz española dio una larga entrevista a CNN, en la que se disculpaba de todo y tiraba perlitas como: "Si yo fuera racista, no habría trabajado con Zoe Saldaña". No aclares que oscureces, dice el dicho. La actriz de "Avatar" manifestó después que se sentía "triste y también decepcionada" por las palabras de su compañera. Audiard, en otra entrevista, prácticamente le soltó la mano, diciendo que Gascón estaba en una "actitud autodestructiva" y lamentaba que no cuidara con sus declaraciones a sus compañeros de la película. Pero sobre todo a él, queda claro.

Pero, más importante que Audiard, quienes le soltaron la mano a Gascón fueron los propios ejecutivos de Netflix. Después de esta polémica, han decidido no pagarle ni viajes ni viáticos para que pueda asistir a los numerosos premios y eventos que todavía quedan de acá al 2 de marzo. Es decir, que si quisiera ir deberá pagarlo todo de su bolsillo. Y por otra parte, Netflix empezó a enfocar la campaña de promoción en la figura de Zoe Saldaña, nominada (muy merecidamente) a Mejor Actriz de Reparto. Karla Sofía Gascón prometió llamarse al silencio, para no entorpecer más estas semanas camino al Oscar. Aunque quizás ya sea demasiado tarde.

"Emilia Pérez", odiada por un país entero y alabada por la "intelligentsia" de Hollywood, fue una de las favoritas de la temporada, pero ahora está hundida en el más absoluto desprestigio. No está descartado todavía que la bajen de alguna candidatura. Incluso, los especialistas especulan con que si se lleva algún galardón las consecuencias para los Oscar se harían sentir: desde apagones a la gala hasta pérdidas enormes de seguidores en redes sociales como escarmiento. Lo cierto es que ninguna película en las últimas décadas empezó tan alto y terminó tan en el barro: ¿"Emilia Pérez es una bajeza del séptimo arte o una joya incomprendida? Solo el tiempo lo dirá.

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