Orozco tuvo un feliz bautismo profesional

La púgil mendocina venció a la cordobesa Juárez en lo que fue su debut en el campo rentado. El jurado la vio ganadora: 39-37, 39,5-38,5 y 40-37.

Orozco tuvo un feliz bautismo profesional

Fue revancha nomás para Yanina Orozco (1-0-0). La nueva licencia profesional del boxeo mendocino en su debut se impuso a la cordobesa Natalia Juárez (0-2-0) en fallo unánime, en una gran velada llevada a cabo en el gimnasio de su entrenador, Jorge Arias, que estuvo colmado para alentar a la púgil local.

De esta manera la espigada lasherina superó claramente a la cordobesa de campana a campana. Fue revancha porque la única vez que se habían enfrentado fue como amateurs en una de las instancias decisivas del Argentino disputado en Salta a principio de año, donde, según la propia Orozco, destacó que había ganado ella. “Gané porque de los cuatro rounds, tres fueron míos y el último de ella, pero como es muy conocida del jurado se la dieron a ella. Esta noche (por el viernes) quedó demostrado que también gané yo”, dijo con una gran sonrisa la pupila del Flaco Arias.

El jurado la vio ganar con estos guarismos: Miguel Leiva 39 a 37; Salvador Núñez 39,5 a 38,5 y Sergio Carreño 40 a 37. Para Más Deportes también ganó Orozco 40-37,5.

Orozco pesó 66 kg y su rival 68,300, una ventaja que parecía que no le iba a favorecer, pero sin dudas asimiló muy bien cada embate de su rival y además se mostró muy aplomada desde el primer momento. “Me sentía nerviosa por el debut y pensé que iba a estar más condicionada pero, cuando logré conectarle los primeros golpes, comencé a tomar confianza”, contó rumbo al camarín entre medio de felicitaciones de amigos, compañeros de gimnasio y familiares.

Yanina aprevechó la distancia teniendo en cuenta que es alta para la división y por momentos hizo alarde de la escudería de Arias. Con un perfecto jab de izquierda en punta y combinando con golpes seguidos, frente a una Juárez que buscó la corta distancia y el contragolpe, algo que estuvo lejos de efectivizar dado a que la anfitriona siempre la anticipó. Si bien el primer asalto fue el pasaje de fuego para Orozco, salió airosa y con cross de derecha sacudió a su rival.

Yanina mantuvo la distancia aunque cuando se prendió en el golpe por golpe en la corta distancia, al que invitaba la cordobesa, recibió varios cruzados de derecha, pero lo más importante es que supo asimilarlos para descargar una contra muy sólida que movieron la integridad de Juárez, que directamente buscó amarrarla.

La pelea se hizo intensa y franca, sin especulaciones, donde el mayor rédito fue para la mendocina. “Siento que esta categoría me resulta cómoda en la que no me cuesta dar el peso, pero siento que voy a bajar a 63 kg, superligero, porque mi mano es pesada y en esa división va a tener más peso. Bah! es lo que pienso ahora que ya gané”, comentó.

La mendocina, más allá de que por momentos la ansiedad le jugó algunas malas pasadas, ganó claramente y mostró muchas cualidades técnicas; caminó muy bien el ring, se desplazó hacia los laterales y sacó provecho de su mayor alcance de brazos. Está claro que tiene para mejorar, pero sin dudas éste puede ser el comienzo de una gran carrera, como ella misma lo afirmó. “Sé que tengo mucho para dar y mejorar técnicamente, tirar más golpes no descuidarme defensivamente, tener variantes...Pego fuerte y tengo que aprovechar eso”, expresó.

“¿Cuánto es lo que tengo que mejorar? No lo sé, será hasta ser perfecta, ése es mi objetivo”, manifestó con grandes convicciones.

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