Patty Duke, quien ganó un Oscar de adolescente por su actuación en ``The Miracle Worker'' ("Ana de los milagros'') y mantuvo una larga y exitosa carrera mientras batallaba problemas personales, falleció. Tenía 69 años.
Duke murió la madrugada del martes de septicemia provocada por una perforación gastrointestinal, dijo su agente Mitchell Stubbs. Murió en Coeur D'Alene, Idaho, según Teri Weigel, publicista de su hijo, el actor Sean Astin.
Duke alcanzó el éxito temprano interpretando a la joven Helen Keller primero en Broadway y después en la aclamada adaptación cinematográfica de 1962, ambas con Anne Bancroft como su profesora, Annie Sullivan.
Entonces en 1963 saltó a la pantalla chica para protagonizar una serie de comedia, ``The Patty Duke Show'', que se transmitió por tres temporadas. Actuó por partida doble bajo una premisa poco convencional: un par de primas idénticas que viven en Nueva York.
En el 2015 volvió a dar vida a mellizas, como un par de abuelas en un episodio de la serie de Disney Channel ``Liv and Maddie''.
``Estamos tan agradecidos de que haya vivido una vida que despierta tanta compasión y sentimientos en otros'', dijo Astin a The Associated Press al reflexionar sobre las efusivas manifestaciones de cariño que han expresado los fans tras la noticia del deceso.
``Ella realmente sufrió'' con su enfermedad, agregó Astin. Desde fines de la semana pasada hasta la madrugada del martes, relató, ``fue un proceso muy, muy, muy difícil. Fue duro para ella, fue duro para quienes la adoramos...''.
Duke, cuyo verdadero nombre era Anna Marie Pearce, nació en Queens, Nueva York, el 14 de diciembre de 1946 y tuvo una infancia difícil con padres abusivos. A los 8 años estaba bajo el control de éstos, unos managers de talento que pronto la pusieron a trabajar en telenovelas y publicidad impresa mientras le daban alcohol y medicinas con receta, algo que aceleró los efectos de su entonces no diagnosticado desorden bipolar.
En su libro de memorias de 1988, ``Call Me Anna'', Duke escribió de su condición, su diagnóstico apenas seis años antes y del tratamiento que posteriormente estabilizó su vida. El libro fue llevado a la TV en 1990 como una película que ella misma protagonizó, y Duke se convirtió en una activista por las causas de la salud mental, ayudando a desestigmatizar el desorden bipolar.
Con el fin de ``The Patty Duke Show'' en 1966, que la dejó encasillada no como una, sino como dos adolescentes inmaculadas, Duke intentó dar un brinco a la adultez en el melodrama ``Valley of the Dolls'' ("Valle de las muñecas''), en el que hizo de una aspirante a artista que cae presa de las drogadicción, un matrimonio fracasado y sus sueños rotos.
El filme, basado en la popular novela sensacionalista de Jacqueline Susann, tuvo éxito comercial pese a que recibió malas críticas.
Durante su carrera ganó tres premios Emmy, por la película hecha para TV ``My Sweet Charlie'', la miniserie ``Captains and the Kings'' y el remake de 1979 de ``The Miracle Worker'', en el que interpretó a Annie Sullivan (Melissa Gilbert, la estrella de ``La pequeña casa de la pradera'', hizo de Keller).
En los años 80 protagonizó un trío de series de comedia de corta duración: ``It Takes Two'', `'Karen's Song'' y ``Hail to the Chief'', en la que hizo de la primera mujer presidenta de Estados Unidos.
Actuó en varias producciones teatrales, incluyendo su regreso a Broadway en el 2003 para encarnar a la tía Eller en una reposición del musical ``Oklahoma!''.
Para entonces, ya había pasado una docena de años viviendo en Idaho con su cuarto esposo, Michael Pearce (quien le sobrevive), para refugiarse del desorden, el ruido y la agitación de las grandes ciudades, y de su turbulento pasado.
Al describir el papel de la tía Eller, y quizás también a sí misma, Duke dijo: ``Esta es una mujer que ha tenido conflictos en su vida, que ha hecho las paces con parte de eso y ha llegado al punto de la aceptación. No se rinde''.