El concepto de “oposición”
La denominación de “oposición” es antidemocrática y errónea. Sus electores no los votan para que se “opongan” sino para que “colaboren con el gobierno” y más adelante diré cómo. No encuentro otra palabra que exprese el nombre y la esencia del espacio político derrotado en elecciones democráticas. Quizá sea “confrontación”. Oponerse es contradecir, impedir, obstaculizar, algo que solo se concibe en oportunidades muy especiales de una democracia. Confrontar es estar frente a otro. Agustín Rossi, de notoria militancia kirchnerista, ha manifestado en los medios que cuando vuelva al gobierno su partido hará todo lo contrario a lo que hace el actual Presidente Javier Milei. Es tan torpe (la torpeza es habitual en él) que debe entenderse sus declaraciones como que piensan volver a emitir moneda sin respaldo, a tener inflación, al aumento desmedido de la base monetaria, al déficit fiscal, comercial y financiero, a agrandar al Estado, a impedir la actividad privada, a retornar a la pobreza e indigencia enormes, a restringir la libertad, a evitar que aumente el empleo privado, a que vuelva la corrupción de los más altos cargos y funcionarios del gobierno kirchnerista, a que los jubilados cobren menos, a la pauperización de las fuerzas armadas, a que aumente la inseguridad, a volver a excelentes relaciones con las dictaduras, a aislar al país del mundo, etc.
Rossi y el kirchnerismo en general piensan que en el rol que están solo tienen que “oponerse” a todo. Y así lo hacen desde el 11 de diciembre de 2023. Mienten en el Congreso con una hipocresía perversa y no proponen nada, solo se oponen a todo lo presentado por Milei. Los legisladores K cobran fortunas solo para levantar la mano y decir no a los proyectos del oficialismo. ¡Esto no es democracia!
El que gana gobierna y el que pierde ayuda
¡Qué ciertas estas palabras de Ricardo Balbín! Es una verdad de perogrullo que en una democracia gobiernan todos en el rol que coloca a cada candidato el electorado. Gobernar significa dirigir, orientar, encausar. Sin dudas esta es la principal responsabilidad del Órgano Administrador o Ejecutivo (administrar proviene de “ad ministrare”, servir a, gobernar, dirigir). Pero en su rol, también gobierna el Órgano Legislativo. Alguien dijo alguna vez que el verdadero gobierno es el de la ley. Tanto es así que todos los órganos del Poder deben subordinarse a la constitución y a la ley. Juan Domingo Perón “dentro de la ley todo, fuera de la ley nada” aunque no siempre cumplió con este dogma. Cuando el legislador se opone a todo no solo no gobierna sino que también es antidemocrático.
Es obvio que cuando me refiero a partido oficialista y opositor parto de la premisa de que ambos espacios políticos son democráticos. De no ser así, se trataría de una falsa democracia como la que ejerció el kirchnerismo cuando fue gobierno.
Tampoco es correcto mencionar a la mayoría como gobierno y minoría como confrontación. Ejemplo de lo que afirmo es que hoy en Argentina actúa una minoría en el Congreso, La Libertad Avanza del partido gobernante, y una mayoría, el kirchnerismo y el conjunto de la confrontación. Un partido es gobierno cuando obtiene la mayoría del electorado, el 50% más un voto, y lo es también cuando obtiene menos del 50% pero derrota al otro partido por mayor cantidad de votos, 40% a 20% por ejemplo. En este caso gobierna la primera minoría.
Cuál es la tarea de la confrontación
El ámbito de la confrontación es solo en el Congreso porque el partido gobernante actúa en la sede de la Administración. Debe oponerse cuando el Ejecutivo propone la discusión y sanción de leyes contrarias al Ordenamiento Jurídico. Pero cuando se trata de proyectos que benefician al bien común debe ayudar y colaborar para que se sancionen y promulguen. No ayudar ni colaborar en estos casos es incumplir el mandato que recibió del electorado.
Destaco algo que la confrontación no entiende. Además de desconocer gran parte de las ideas que expongo en este trabajo, la pérdida de la elección y del gobierno la enardece de tal modo que no advierte el poder inmenso que tiene en el Congreso. No entiende que la colaboración y la ayuda cuando corresponden, son aplaudidas por el electorado y crece en la votación de la gente.
Pero hay algo mucho más importante. No solo debe tratarse en el Congreso los proyectos de ley enviados por el Órgano Administrador sino también los presentados por cualquier diputado o senador con dictamen previo de la o las comisiones. Y si la iniciativa es sancionada y promulgada debe obedecerse y ejecutarse conforme a las normas constitucionales en vigencia. Así se entiende y cobra importancia fundamental el otro dogma que cito en este trabajo: el verdadero gobierno es el de la ley. Si la ayuda y colaboración del Congreso son muy bien recibidas por el electorado ¿cuánto más lo son los proyectos de ley sancionados y originados en iniciativas de los legisladores?
Las elecciones se pierden porque los partidos derrotados ignoran estos conceptos. Sus miembros hacen reuniones y debates para analizar las causas de las derrotas y reflexionar cómo oponerse más fuertemente al partido gobernante, con lo que solo consiguen seguir perdiendo elecciones. Educarse políticamente en estos temas contribuirá notablemente al fortalecimiento de la Democracia y perfeccionamiento de la República. Cuando existe una excelente confrontación bien entendida, obliga al Presidente a ser mejor en beneficio del país o a perder las elecciones y en su caso, el gobierno en caso contrario.
* El autor es Doctor en Ciencias Jurídicas y Sociales.