Federico El Grande (1740-86), rey de Prusia, si bien mantuvo bajas tarifas aduaneras involucró al Estado en la promoción de industrias como textil, armamentos, porcelana, refinación de azúcar subsidiando a las exportaciones y contratando trabajadores experimentados extranjeros.
Alemania es conocida como el país que intelectualmente y prácticamente protegió a sus industrias con políticas de Estado. Antes de convertirse en Estado Nación en 1870, las tarifas aduaneras eran menores a otros Estados europeos.
1834, Zollverein (unidad aduanera) se inició en Prusia, Estado al que se adhirieron otros para crear una zona de aranceles unificados. El desarrollo industrial de Prusia atrae a otros Estados que ven más rentable liberar sus aranceles con Prusia.
En 1841, Friedrich List publica el libro “Sistema Nacional de Política Económica”, donde estudia históricamente como se fue dando el proceso de industrialización en Inglaterra, Francia y otros países de Europa, incluso en EEUU. Con List arranca la Escuela Historicista Económica Alemana la cual le da una importancia al estudio histórico del desarrollo económico de los países y rechazó la idea de que existen leyes o teoremas económicos que podían ser tomados como universalmente válidos, como postula la economía clásica liberal inglesa.
En 1844 hubo un aumento de tarifas para la importación de hierro y en 1846, se incrementaron las tarifas para la importación de algodón
Otto von Bismark, canciller de la ahora Alemania ya unificada, incrementa significativamente en 1879 las tarifas aduaneras para consolidar la alianza política entre los Junkers (terratenientes aristócratas) y los industriales liberales. Sin embargo el nivel de tarifas sigue siendo menor a la aplicada por Inglaterra durante su desarrollo industrial.
El Estado tuvo una participación muy fuerte no sólo en aplicar barreras aduaneras sino también en promocionar a las industrias mediante subsidios, contratación de trabajadores ingleses con experiencia en calderas a vapor e industria del acero y compra de maquinaras para ser copiadas por empresarios alemanes. También con la creación de facultades y escuelas técnicas, incentivando los estudios de estas disciplinas para formar una densidad de profesionales preparados para las nuevas tecnologías.
Japón
La industrialización de Japón comenzó tarde y fue a partir del ataque imperialista perpetrado por el comodoro Perry de la Armada de EEUU en la bahía de Tokio en 1853, con lo cual obligó a Japón abrir sus puertos al comercio extranjero.
En 1868, la Restauración Meiji llevó adelante una remodelación del antiguo régimen y desde entonces el Estado jugó un papel importante en el desarrollo industrial del país. Debido a los tratados a que fue obligado a firmar a partir de 1858, Japón no pudo efectuar una protección aduanera, solo le permitieron un 5% mientras EEUU tenía un 45%. El gobierno japonés se vio obligado a buscar por otros medios la promoción industrial hasta que recién en 1911 pudo recobrar su autonomía en fijar sus propias tarifas aduaneras. A falta de un sector privado que tomara la iniciativa, el Estado estableció un número de fábricas estatales en industrias prioritarias como minería, astilleros, textil y armamentos.
En 1880, muchas de estas fábricas fueron privatizadas y subsidiadas, por ejemplo los astilleros se llevaron casi el 50% de los subsidios. Hacia 1880, casi todas las ciudades importantes estaban conectadas por el telégrafo, en 1869 el Estado había iniciado la instalación del mismo. El Estado construyó en 1881 la primera línea de ferrocarril y tuvo que otorgar subsidios para involucrar a inversores privados en la ampliación de líneas férreas.
En 1901, el Estado instala una fábrica para laminación de acero. Para lograr este desarrollo industrial acelerado, el Estado contrató a ingenieros y técnicos extranjeros para lograr la transferencia de las nuevas tecnologías. En 1857 habían sido contratados 527 de estos profesionales, en 1885 solo 155, lo que marca la rápida absorción de los nuevos conocimientos.
En 1871 fue creado el Ministerio de Educación. Al comienzo las universidades adoptaron el modelo americano, pero luego viraron al francés y alemán. El éxito de la rápida industrialización de Japón se debió al involucramiento del Estado como actor rector y a una política de protección aduanera de sus industrias estratégicas.
Corea del Sur
Corea fue invadida y quedó como una colonia de Japón entre 1910-45. Durante dicho periodo Corea pasó desde una sociedad campesina y atrasada a una sociedad con un grado de industrialización debido al interés geopolítico de Japón.
Entre 1910-30 Japón modernizó la agricultura atrasada mediante la incorporación de riego, fertilizante y maquinaria agrícola.
Entre 1936-45, luego de la Gran Depresión grandes corporaciones industriales japonesas se establecen en Corea: Mitsubishi, Nissan, Mitsui y Sumitomo. También desarrollaron el sistema ferroviario conectando a Corea con Manchuria, China y Rusia. Con el inicio en 1942 de la guerra del Pacífico contra EEUU, Corea se fue transformando desde una sociedad campesina a sociedad semi-industrializada debido al interés de Japón de tener industrias en dicho país.
Entre 1950-53, se produce la guerra de Corea y con el armisticio queda dividida en dos coreas en el paralelo 38, queda la economía y fábricas y ciudades destrozadas. El espectacular desarrollo alcanzado a partir de 1970 se debe a políticas similares a las llevadas a cabo por Inglaterra, USA, Alemania y otros países europeos en el siglo XIX.
*El autor es ingeniero electromecánico - Universidad de Buenos Aires
