Los bancos centrales son construcciones más modernas y recientes de lo que pensamos. En general alrededor del mundo sus orígenes con sus finalidades y formas fueron distintos y no fue hasta hace unos 50 años que la convergencia comenzó.
Si comparamos con los Bancos y Bolsas que tienen 300 o 400 años de historia y maduración, los bancos centrales son jóvenes e inexpertos, han mutado considerablemente y sus funciones no son necesariamente exclusivas, ni de ellos ni del sector público.
De todos modos, existen múltiples motivos por los cuales tener instituciones centralizadas como los bancos centrales en las economías modernas.
Pero de nuevo, dada la historia y evolución de los mismos, también se puede decir que son entidades que en el momento mismo que dejen de ser dinámicas y de vanguardia como los mercados y agentes que vigilan, en el sentido más darwinista posible, su extinción es posible o inclusive deseada. Sin embargo, el vox populi no suele ni siquiera plantearse, o solía, la necesidad o no de un “Banco Central”.
Algunas economías avanzadas por ejemplo, no tienen Ministerio de Economía*, en cambio no hay ninguna economía desarrollada, de la OCDE o de PBI relevante que no tenga Banco Central. Principalmente por este motivo es que la idea de “Dinamitar” el BCRA es por lo menos llamativa.
DISCLOSURE: En lo personal, soy sostenedor de una figura centralizada y práctica, activa, en cuanto a lo monetaria y financiero. Tengo diversos interrogantes sin definir aún como la democratización o no de sus autoridades, la transparencia de su accionar, su tamaño, entre otros.
Encuentro el debate sobre la existencia como un excelente disparador. Pero en extrema síntesis, soy contrario a la abolición de dicha institución.
Creo más en una transformación profunda de la regulación bancaria (desregulación) y de consecuencia el rol del banco central (logrando independencia, y que sea apartidario, y apolítico cuanto posible)
— Primero entendiendo el personaje que canaliza el mensaje tenemos al flamante vencedor de las PASO, Javier Milei, quien sembró en la Argentina múltiples debates profundos y polémicos en los últimos años. Entre ellos, puso en duda la necesidad de existencia del Banco Central.
Muy lejos de ser un disparate de un loco, sus ideas tienen una base teórica e ideológica arraigada. Muchos piensan que “cerrar el banco central” es un slogan típico del populismo “de derecha”, cercano a la gente y muy figurativo para que llegue con vehemencia cuando en realidad son, al menos en lo económico, frases que condensan un alto contenido intelectual.
Por otro lado el esquema teórico, en este caso el liberalismo, que como toda escuela de pensamiento tiene distintos matices.
En nuestro país, cuando pensamos en EEUU por ejemplo, pensamos en una economía liberal donde los demócratas son liberales más sociales y los republicanos más conservadores. El liberalismo del cual habla Milei en EEUU es presentado por Industrias Koch y el Cato Institute. La escuela de pensamiento a la base es la Escuela Austriaca, cuyos pilares son el mayor grado de propiedad privada y fuerzas de mercado posible, poniendo al individuo al centro y su capacidad de optimizar. que cuenta con personalidades como Hayek, Wenger y Von Mises.
DISCLOSURE 1: Escuela que a mi parecer se destaca por tener una gran virtud ligada a un gran defecto, ambos intrínsecamente inseparables: logra un formidable análisis y diseccionado del ciclo económico (una variable macro) partiendo de razonamientos micro. Pero niega profundamente los beneficios del crédito, la elasticidad del dinero y un sistema financiero avanzado. En extrema síntesis, el desprecio por las finanzas opaca lo demás, y son fruto del momento histórico y el contexto cultural principalmente. Por último y en particular, la visión del Sistema Financiero y Monetaria de la escuela Austriaca es significativamente distante del mainstream, pero también de la mayoría de las escuelas heterodoxas o clásicas.
En esencia, la obra de von Mises tiene un mantra claro: fomentar la máxima estabilidad posible para lograr un crecimiento sostenido y constante, en el cual la fluctuación del ciclo económico es debido exclusivamente a la fricción debida reasignación de recursos. Se diferencia fuertemente de las demás escuelas en cuanto el sistema financiero debe ser pequeño por definición, no es un tema de regulación o quien ejerce el control (como lo puede ser para lo keynesianos, neokeynesianos, neoliberales) sí propio de minimizar su rol en el ciclo económico.
Crecer “sin prisa, pero sin pausa”
Entrando en los detalles y para desentrañar la relación entre el ciclo económico y el banco central, Los tres grandes ejes de todo sistema monetario de los últimos 50 años son (1) el Dinero (conocido como el lubricante de la economía), (2) los bancos que están en el negocio del dinero en el tiempo (pido a corto plazo y presto a largo) y de la creación de dinero (polémico apartado) y (3) el banco central que se encuentra en el negocio de la creación de dinero y guardián de su valor (como también market-maker y guardián de la estabilidad financiera).
1. DINERO:
● Desde una óptica austriaca, el dinero fiduciario (fiat) es un monopolio del estado en un monopolio estatal, una situación que podría evitarse mediante la adopción de otras formas de dinero respaldadas por commodities (hoy día se habla también de Bitcoin). Según Mises, la importancia se debe a que tanto el valor y utilidad del dinero reside en su valor específico, si no a que gracias a ello habría mayor aceptación generalizada. Su inclinación por el patrón oro buscaba principalmente limitar la incidencia del estado en la oferta de dinero, no por una contrariedad al dinero fiat en sí.
● En los tiempos de Mises el desarrollo financiero y los Bancos Centrales, e incluso los niveles de deuda pública y privada eran minúsculos respecto a los de estos tiempos. Hoy en día, se puede decir que vivimos en un sistema monetario de Dinero-Crédito más que Dinero fiat. Existen diversos tipos de “calidad” de dinero y creadores. Una concepción más articulada que la de Mises, pero que igualmente no implica cambios en su razonamiento lógico general.
2. BANCOS Y CREACIÓN DE DINERO Y LA TASA DE INTERÉS
Mises concibe la tasa de interés como el retorno del capital físico/productivo, es decir retorno no-financiero. En general, construye su visión macroeconómica a partir de la microeconomía y más cercana al empresario. En línea con lo anterior entonces, la idea de que sea el sistema financiero a decidir el valor del retorno de las inversiones y no la productividad, no le es amena y por ello restringe la función del dinero, los bancos y el sistema financiero.
● Dado que el dinero fiduciario (aquel sin respaldo de activos o valor intrínseco) no existe, los bancos son los entes encargados de crear dinero mediante sus propias promesas de pago (dinero), obviamente respaldadas por sus activos. Es decir que en todo momento un banco es capaz de canjear un depósito de un privado de su cuenta corriente en otras forma de efectivo (como dinero de otro banco, oro u otro activo). Nuevamente, una visión más cercana a un sistema monetaria rígido con poquísima capacidad de apalancamiento que prioriza la solvencia y liquidez del banco en todo momento.
● El respaldo duro, (pegging) impacta la capacidad del sistema bancario de prestar dinero (crédito) y también de crear dinero. Los canales centrales de esto son los depósitos de la población, es decir el ahorro, la riqueza creada y la renta de las inversiones.
● Este punto contrasta considerablemente con el sistema de fractional reserves, que ponía en riesgo los ahorros, recientemente mencionado como canal de crédito y también catalizador natural de la inversión.
● Otra consideración es que el sistema basado en los encajes es inexistente en la banca moderna como mecanismo de creación de dinero, generando dudas sobre la postura de Mises. Decidí restarle presencia en el texto, pero gran parte de la teoría del ciclo económico y del crédito de Mises (y su inestabilidad) se construye a partir de esta premisa. Aun así, en general su visión sobre el rol de la banca y el crédito creo que sería similar ya que en la actualidad es una concepción difusa en la academia.
● En cuanto al ahorro como motor de la inversión, puede sonar sumamente neokeynesiano, pero en realidad desde un punto de vista estrictamente financiero, con el nivel de crédito y el sistema financiero moderno la verdad es que la conexión entre ahorro privado e inversión es más débil. Otro punto donde posiblemente las motivaciones de Mises podrían ser diferentes hoy en día.
3. BANCO CENTRAL:
En su versión más pura, no hay motivo para la existencia misma de un Banco Central.
● Si los bancos prestan dinero respaldado por activos, por ende no hay necesidad de nadie que los asista en periodos de falta de liquidez (lender of last resort), porque no existirían. Un banco que no puede devolver dinero a sus depositantes es exclusivamente debido a un problema de solvencia, es decir que no tiene activos para liquidar o su capacidad crediticia se acabó, probablemente debido a dudas en su solvencia.
● En un sistema poco apalancado, no debería haber momentos de frenesí ni de pánico, los precios de los activos son estables y los mercados tienen volúmenes predecibles y constantes, no hay motivo para que alguien intervenga creando mercados de emergencia, de garantías en activos para dar confianza y reactivar su intercambio o haga de contrapartida asumiendo el riesgo y liderándolo del mercado (dealer of last resort).
● Si los bancos crean dinero respaldado en sus activos y reputación, o existen activos considerados dinero con valor intrínseco (oro, BTC), no hay necesidad de que nadie imprima billetes.
● Ya que el estado es pequeño y se financia con impuestos para su funcionamiento (probablemente la inversión pública es ínfima, no necesidad de endeudamiento), no hay necesidad de que nadie monetizar la deuda (en una visión bastante heterodoxas podríamos decir)
● Por último, en este contexto, los créditos y productos financieros son escasos, ya que principalmente el ahorro privado determina la disponibilidad de crédito y de consecuencia la inversión. La tasa de interés entonces no refleja el valor de la liquidez, del dinero, etc, si no que es determinada y refleja principalmente el retorno de las inversiones físicas o productivas, eliminando también la necesidad de alguien que controle el nivel de tasas de interés como medio de controlar la oferta de dinero.
** Es decir, las tasas de interés no es el valor del dinero en el tiempo, si no la productividad o retorno que genera en la economía real una inversión. Por ello. En general, estaba en contra del crédito porque genera periodos de boom y contracción “no naturales”. Si a ello se le suma la intervención de una institución pública que participa en el mercado del dinero, en su visión esa tasa de interés era completamente artificial. Digamos que Mises no quería que la tasa de interés afecte la cantidad de dinero para hacer transacciones, ni que el costo y volumen de crédito interfiriera en las decisiones de inversión reales y de consecuencia en el ciclo económico. Conclusión entonces: la postura austriaca ante un trade-off te un sistema monetaria flexible y dinámico contra uno rígido y estable es clara. El dinero debe tener una función clara y acotada, facilitar los intercambios de bienes y servicios y todo aquello que lo aleje o lo distorsione debe ser eliminado. Como consecuencia el sistema financiero es pequeño, el banco central obsoleto y la oferta de dinero determinada completamente por el sector privado y pura y exclusivamente por sus ahorros. —
ATENCIÓN: Condensar escuelas de pensamientos, teoría económica, política y financiera en pocos párrafos es tanto difícil como sujeto a interpretaciones y subjetividades. No obstante, el objetivo es tratar de sentar las bases para una discusión con algunos puntos comunes y despertar el interés en aquellos apartados demasiado sintéticos o parciales.
— *entendiendo economía no como haciendo o planificación, si no que su función es pura y exclusivamente diseñar política económica y controlar/intervenir en las variables macroeconómicos
**Otra línea de pensamiento reciente se expande haciendo hincapié en la descentralización. Con el surgimiento de la tecnología blockchain y las cryptomonedas se planteó que los mecanismo de creación y regulación de la oferta de dinero más liberales y eficientes eran descentralizados, por ende el sistema bancario, que es considerado suficientemente concentrado, era ineficiente.
La creación de dinero en este caso es altamente de mercado, oferta y demanda. Pero no es el caso de las ideas de Milei ni compartido por toda la escuela austriaca ya que la concentración en sí puede deberse a una eficiencia de mercado y ser deseable desde su punto de vista, mientras que esta postura encuentra como axiomática la descentralización como algo deseable. Por otro lado, dado que el dinero cumple una función clave que es que debe reflejar precios relativos y ser resguardo de valor, un tipo de dinero comandado por la oferta y la demanda será inherentemente más volátil que uno comandado por el ahorro.
El autor es Economista & Data Scientist