Economía
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hace 28 minutos
El ex presidente sudafricano Nelson Mandela fue sometido con éxito a una cirugía para extraerle cálculos biliares hoy, informó la presidencia del país, mientras el político que luchó contra el apartheid y estuvo en prisión por 27 años, seguía hospitalizado por octavo día a causa de una infección pulmonar.
Los médicos que lo atienden esperaron para realizarle la endoscopía porque primero querían atenderle su padecimiento pulmonar, dijo en un comunicado el vocero presidencial Mac Maharaj.
El líder político de 94 años fue internado en un hospital cerca de la capital de Sudáfrica, Pretoria, el 8 de diciembre para ser sometido a análisis. Funcionarios del gobierno dijeron que Mandela sufría de una recaída de una infección pulmonar, un mal que también tuvo en el 2011.
”El procedimiento fue exitoso y Madiba se está recuperando'', indicó Maharaj utilizando el nombre de clan de Mandela, como muchos en Sudáfrica lo hacen en señal de afecto.
Mandela es venerado por haber sido líder en la lucha contra la segregación racial en Sudáfrica.
Fue el primer presidente elegido democráticamente, por un mandato de cinco años, antes de retirarse de la vida pública. Su última aparición pública fue cuando su país fue sede del mundial de fútbol 2010.
La salud de Mandela se ha vuelto más frágil en años recientes, aunque su presencia en la política nacional nunca se ha reducido.
Funcionarios del gobierno han dado información contradictoria sobre el lugar donde se encuentra Mandela en días recientes. El sábado, el Foro Nacional de Editores Sudafricanos emitió una declaración, en la que criticó al gobierno por dar datos equivocados'' sobre el paradero del ex presidente y sobre su estado de salud.
Mandela tiene antecedentes de problemas pulmonares desde que se enfermó de tuberculosis en 1988, casi al final de sus 27 años en prisión y antes de la subsecuente presidencia. Aunque los médicos dijeron en ese momento que la enfermedad no causó daño permanente a sus pulmones, expertos en medicina indican que la tuberculosis puede provocar problemas años después a los infectados.
El premio Nobel tuvo una aguda infección respiratoria en enero de 2011. Tras el caos que rodeó la estancia de Mandela en un hospital público en ese entonces, el ejército sudafricano se hizo cargo de su cuidado y de controlar la información sobre su salud.
