Un hombre fue condenado hoy a 11 años de prisión por el Tribunal Oral en lo Criminal N 1 de Morón, acusado de "intento de femicidio" por rociar con alcohol y prender fuego a su esposa.
"No era lo que esperábamos, pero al fin se hizo justicia", sostuvo la víctima, Karina Abregú, quien el 1 de enero de 2014 resultó con quemaduras en el 55 por ciento del cuerpo y se salvó porque se arrojó a una pileta, en el partido bonaerense de Merlo, al oeste del Conurbano.
Ese día, Gustavo Albornoz, le dio una brutal paliza a Abregú, tras lo cual la roció con alcohol y la prendió fuego.
"Estoy en tratamiento hace dos años y cuatro meses, que todavía no se terminan, tengo unos cuantos años por delante", contó la mujer al canal Todo Noticias (TN) tras conocer la sentencia.
Además, se manifestó satisfecha de que Albornoz "esté unos años en prisión y que vea lo que no es hacer una vida libre, sino convivir encerrado".
"Llegó (al juicio) en libertad, solo estuvo 33 días detenido", indicó y añadió que "siempre dije que de acá (de tribunales) se tenía que ir preso".
Abregú, quien había denunciado 15 veces a su agresor, estuvo internada durante seis meses en un centro especializado de Laferrere y fue sometida a 30 operaciones.
La mujer, además de las graves secuelas físicas, sufrió la pérdida de su trabajo.