A partir de esta semana, la Nación incluyó 11 actividades más a las que se encuentran exceptuadas dentro del decreto de aislamiento social, preventivo y obligatorio (dispuesto, momentáneamente, hasta el próximo domingo). Y dentro del sector de la salud; se destacan entre los autorizados para retomar sus actividades los consultorios odontológicos, los laboratorios de análisis clínicos y los centros de diagnóstico por imagen.
En lo referido específicamente a la atención odontológica, se podrá realizar de manera programada y con turnos otorgados con anterioridad. No obstante, en Mendoza los profesionales continuarán trabajando con urgencias de emergencias (el mismo tipo de trabajos con que venían trabajando durante las semanas anteriores). Y así seguirán, al menos, hasta el miércoles.
"Estamos esperando que desde el Ministerio de Salud de la Nación y desde las obras sociales den mayores precisiones y especifiquen las actividades que vamos a poder hacer. Por lo pronto, y durante las próximas 72 horas, sólo vamos a continuar con las urgencias. Porque las obras sociales tampoco han salido a decir que amplían la nomenclatura", destacó el presidente del Círculo Odontológico de Mendoza (COM), Alejandro Kalbermatten.
Desde el inicio del aislamiento -que tiene como objetivo evitar la propagación del coronavirus-, los profesionales adaptaron su trabajo. "Apenas se decretó la cuarentena, esa semana cerramos y cancelamos los turnos programados. Dejamos un cartel en el consultorio aclarando que a raíz de la situación, sólo íbamos a atender urgencias. Hay un protocolo de la OMS que fija cuáles son las urgencias", indicaron por su parte Jorge Gutiérrez y Micaela Sánchez, odontólogos que atienden en su consultorio de Dorrego.
Más allá de la flexibilización de la cuarentena en el rubro, estos dos profesionales continuarán trabajando con urgencias de emergencias. “Hay pacientes a los que, para resolver el problema de fondo, se necesita un tratamiento de fondo también. Pero no podemos hacerlo por el momento, hasta que la Nación defina específicamente. Por ejemplo, para trabajar otras cosas como prótesis, deberían habilitar a los laboratorios dentales”, concluyeron los odontólogos.
Kits de protección
Otra problemática que enfrentan los odontólogos mendocinos tiene que ver con los kits de protección. Según detalló Kalbermatten, es un kit que se exige y viene aparejado con las medidas de seguridad para evitar el contagio de coronavirus.
"El costo del kit de protección oscila entre los 1.200 y los 1.500 pesos. Incluye camisetín para el paciente y para el profesional, cofias, botas y barbijos. A eso hay que sumar otros costos que están incluidos, como el amonio cuaternario (el litro sale 800 pesos). Nuestra intención y nuestro pedido es que la cobertura del kit la haga la obra social, por medio de un reintegro al afiliado", destacó el presidente del COM.
Otros profesionales consultados por Los Andes coincidieron con este pedido, y aclararon que el costo de los kits no debería recaer sobre el paciente o afiliado de la obra social. "Tendría que hacerse cargo la obra social de ese gasto. En Mendoza ninguna obra social lo está haciendo, y hay profesionales que cobran la consulta más el kit a 2.400 pesos. Otro tema son las demoras del pago de las obras sociales. Con suerte, la mejor -en cuanto a cumplimiento- paga con 3 meses de demora", concluyeron.
