La empresa constructora brasileña Odebrecht, envuelta en uno de los mayores escándalos de corrupción en la historia reciente, encontró en República Dominicana un lugar propicio. Tanto, que la firma trasladó su oficina de gestión de sobornos a la nación caribeña, donde funcionarios locales se beneficiaron con casi 100 millones de dólares.
Sin embargo, cinco meses después de que fue revelado el esquema de sobornos, nadie en el país caribeño ha sido castigado, ni siquiera identificado como beneficiario de las millonarias coimas, lo cual ha generado indignación tanto en grupos civiles como políticos.
Los críticos esperan que al menos el silencio termine mañana viernes, cuando se espera que la compañía entregue a la Procuraduría los nombres de los beneficiarios como parte de un acuerdo mediante el cual el gobierno renuncia a procesar a los ejecutivos de la compañía y le permite continuar sus operaciones en el país.
De acuerdo con documentos difundidos por el Departamento de Justicia de EEUU, ejecutivos de Odebrecht confesaron haber pagado unos 788 millones de dólares a funcionarios de 10 países de América Latina y dos de África para conseguir contratos millonarios con los gobiernos.
En República Dominicana, a partir de 2001, Odebrecht distribuyó 92 millones de dólares en sobornos para obtener 17 contratos de construcción de carreteras, presas y una termoeléctrica. Uno de los principales implicados trabajó como asesor del presidente Danilo Medina en sus dos campañas electorales.
Cuando comenzó a sentirse acosada por la investigación judicial que inició Brasil tras descubrir los millonarios sobornos, Odebrecht trasladó a República Dominicana en octubre de 2014 el llamado Departamento de Operaciones Estructuradas que, en realidad, era la oficina de gestión de las coimas.
Desde que comenzó a operar en República Dominicana en 2001, Odebrecht suscribió 17 contratos por un monto total de U$S 5.000 millones, cerca del 7% del PBI local en un país donde la gran mayoría gana menos de 200 dólares al mes.
De los 17 contratos, 15 fueron suscriptos en las cuatro administraciones consecutivas del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), del que forma parte el presidente Danilo Medina y que es encabezado por el ex mandatario Leonel Fernández.
Entre los contratos de Odebrecht se encuentra la obra insignia del gobierno de Medina: una planta termoeléctrica de carbón que, con una inversión de U$S 2.000 millones, generará 720 megavatios.
La termoeléctrica de Punta Catalina, 60 km al oeste de Santo Domingo, fue licitada en 2013 en medio de críticas de grupos ecologistas y cuestionamientos de la sociedad civil y partidos de oposición que aseguraron que la obra fue sobrevaluada en al menos 600 millones de dólares.
El ex gobernador de Cusco, Perú, preso por coimero
Un ex gobernador de Cusco, la más importante región turística de Perú, fue detenido ayer luego de que la fiscalía lo acusara de pactar un soborno por 3 millones de dólares con la empresa brasileña Odebrecht para ayudarla a obtener un contrato de construcción de una ruta.
Jorge Acurio, quien gobernó la región entre 2011 y 2013, fue capturado en la ciudad andina, cuna del Imperio Inca, tras una investigación por delitos de corrupción y lavado de activos. Junto al ex gobernador fue detenido un abogado cuyo estudio realizó un arbitraje entre la firma brasileña y el Estado peruano.
Según las investigaciones, el valor final de la ruta de más de 9 kilómetros que Odebrecht construyó en la región turística de Cusco se incrementó en U$S 17 millones por encima de lo esperado al finalizar su construcción.
AFP