El nombre. Octavio Alberto Joaquín Tapia. Nació en Mendoza en 1958 y a los 14 años comenzó a estudiar en la vieja Escuela de Bellas Artes de Mendoza. En los '70 fue expulsado de la facultad por su militancia como estudiante.
Trayectoria. Además de exponer y dictar talleres, hace 16 años trabaja en arte-terapia. Técnica que busca movilizar a las personas con alguna patología psiquiátrica, a través del arte. "Buscamos en ese proceso lo estético".
Obras. Sus dibujos fueron expuestos en Egipto, Alemania, Colombia y en Art Basel, el reconocido encuentro de arte en Miami. Sus creaciones conjugan surrealismo y expresionismo, sostenidas por un criterio y conducta.
Actualidad. Hace dos años comenzó a trabajar con plástico y elementos reciclables. Dos de sus creaciones las expone en la muestra "Superficie expansiva. Caos y convivencia", junto a Ayelén Villalba, hasta el 8 de noviembre, en la sala Sacchero del ECA.
Moscas y langostas. Parte de los dibujos que conserva, resaltan esta obra con color, realizada en tinta y fibra. "Las rayas se transformaron en moscas y langostas. Luego salió un laberinto, que representa ese laberinto que cada uno recorre en la vida, buscándose", aporta.
Papel al natural. Sobre una de las paredes de lugar de trabajo, expone una obra de gran dimensión de la muestra "Puro Papel". Un conjunto de creaciones, donde moldea el papel de revista y lo muestra con su naturaleza. "Trabajo con todo los materiales. Uno no tiene que condicionar su impronta a un material", sostiene el artista sobre su visión en las artes plásticas.
Como ostras. Con la forma del rostro de un manequi, moldeo el papel de revista y creo diferentes figuras, que expuso en el Museo Contemporáneo de Punta del Este. "En esta obra me interesaba lo opuesto, quien se encuentre con la obra, vea el otro lado. Los expuse como ostras sobre un espejo y ahí se producía el efecto, de encontrarse".
Plástico en proceso. La nueva búsqueda del artista pasa por el uso de objetos reciclables. "Lo llamo 'Lo que mata embellece', porque si lo quemamos contamina. Y tiene que ver con lo que se consume, con el plástico. Uso desde un envoltorio de caramelos, bolsas y voy anudando de tal manera, que queda una especie de telar". Bajo esta técnica, ha realizado parte de su obra más reciente. Ahora planea crear un telar de nueve metros de ancho.
Psiquis y arte. Con sábanas en desuso de un hospital psiquiátrico, el artista creó una especie de manto. Una historia oscura y conflictiva, convertida en arte.
Dibujos. "Yo busco y cuando me aburro de algo, me voy a otra historia y busco que madure. Luego volveré al dibujo, pero desde otro lugar", afirma sobre su presente. Sobre uno de los muros de su taller, conserva esta serie de dibujos, de los que expuso cuatro, en 2014, en la Bienal Internacional de Arte Contemporáneo de Argentina. "Trabajo en lápiz y tinta, dando vuelta la obra y así se puede ver de distintas perspectivas. Lo que me condiciona es la composición, el resto lo hace el que interpreta la obra".
Esculturas. Trabaja en esculturas de pequeños formatos. En este caso, se inspiró en un homenaje al expresionismo de Rodin. Color y acrílicos, unidos bajo un solo concepto.
En lápiz. Uno de sus dibujos, realizados en lápiz h, al cual le saca sus valores oscuros. Explora al máximo un material. "Uno puede hablar de la transparencia con una birome", dice.
