Los hechos de discriminación han aumentado en Mendoza y, aunque hay diversas situaciones por las que las personas dicen haberlos sufrido, la obesidad es la más mencionada.
Entre quienes dicen haber sufrido o presenciado situaciones de discriminación 29,6% menciona que fue por la obesidad o sobrepeso; 21,1% por rasgos físicos y 18,1% por vivir en situación de pobreza.
Los datos se desprenden del Mapa Nacional de la Discriminación 2019 de la provincia de Mendoza.
Allí se aprecia que son las mujeres las que sufren más este tipo de situación mientras que en el caso de los varones adquiere mayor peso la discriminación por aspecto físico.
El color de piel, discapacidad, ser migrante o mujer también se encuentran - en ese orden- entre los más mencionados.
Alejandra Mellado, titular del Programa provincial de Obesidad aceptó que la mirada social y el trato impactan en quienes tienen esta condición. Dijo que afecta su calidad de vida "porque la discriminación no está sólo asociada a la mirada del otro sino que también es una cuestión de oportunidades, las que se reducen en muchos planos como las laborales o de vestir adecuadamente".
Por eso, las acciones que realizan desde su área tienen que ver con favorecer la inclusión y no sólo la recuperación de cuestiones de salud. "Se trata de concientizar sobre que es una problemática de salud y no de voluntad", subrayó.
En cuanto a la percepción de discriminación, es decir a quienes creen que se discrimina más, se destacan las personas de aspecto sospechoso (90% lo manifestó) o en situación de pobreza (88%).
En tercer lugar aparecen las personas con sobrepeso, segmento que supera a personas con orientación e identidad de género diversa y con discapacidad.
El cuerpo grande
Mariana (42) sabe de qué se trata. Contó que con un cuerpo grande de algún modo se es invisible y que incluso se llega a sufrir maltrato.
Estudió Recursos Humanos y en una oportunidad en que fue a una entrevista de trabajo le dijeron directamente que otra postulante más delgada tenía más posibilidades. Ella respondió que debían evaluar capacidades y finalmente se quedó con el puesto.
“En el trabajo sentís que te dicen ´gorda levantá el culo de la silla´. Vos hacés como que no te importa, tengo carácter, pero al final del día te duele. Vos te ganaste un puesto por tus capacidades”, cuenta.
Se sentía incómoda en el transporte por falta de espacio y estuvo años sin ir a la pileta. Comprar ropa es otro problema. En algunos lugares la miraban de arriba a abajo. La ropa grande, que es más moderna, es más cara.
Logró operarse y pasó de pesar 120 kilos a 75. Ahora reconoce el cambio: gente que antes ni la saludaba ahora le escribe por las redes e incluso sus fotos con menos peso reciben más "me gusta".
Rafael (43) ha sufrido algo parecido. "Afecta en todos los ámbitos. Sabés que es más difícil lograr un trabajo con esa foto y tenés que mostrar otras cosas ya que la presencia no es tu fuerte. Tenés que capacitarte más o demostrar más", señaló. "Vas a bailar y te discriminan porque sos gordito. Cuando te vas a comprar ropa no hay talles en ningún lado. Los talles son cada vez más chicos y hay que salir con muchas ganas a buscar". Dijo que por eso le dice a su hijo que cuide su peso, es grande y alto y ya lo tratan de gordo en la escuela. Teme que eso afecte su autoestima.
Luciana Sturniolo es licenciada en Psicología; trabaja en el Hospital Lencinas en el marco del programa de Obesidad. "Sienten que no son vistos de la misma manera", explicó. Dijo que esto implica discriminación en diversos ámbitos, incluso dentro de su propia familia. A veces les cuestionan que hay cosas que no pueden hacer por su sobrepeso.
Comentó que para los varones la preocupación es más por la salud pero para las mujeres por la apariencia, lo cual expresa la carga social.
La situación "afecta su salud mental y la calidad de vida; por eso en muchos casos la obesidad va de la mano de la depresión", destacó.
El ámbito donde más frecuentemente sucede es el educativo, donde el principal tipo es también por obesidad o sobrepeso; le siguen por rasgos físicos, por situación de pobreza, por el color de piel, ordenados desde el primero al cuarto. Los otros entornos donde suelen presentarse estas situaciones son el ámbito laboral, vía pública y bares o boliches. El informe indica que en la mayoría de los ámbitos presentados aparecen destacadas las categorías por obesidad o sobrepeso, por rasgos físicos y por ser mujer.
50% de la población encuestada fue víctima alguna vez
Según esta investigación realizada por el Inadi, se aprecia un aumento de quienes dicen haber sufrido discriminación.
"Se consultó a las personas entrevistadas de la provincia de Mendoza si alguna vez se sintieron discriminadas, ante lo cual el 53 % afirmó haber sufrido discriminación, lo que representa una situación menos alentadora que en 2013 cuando las respuestas de este tipo habían acumulado el 37 % de los casos", expresa el informe nacional sobre la situación que se presenta en la provincia.
Por otra parte, si se suma a quienes fueron víctimas y quienes fueron testigos, la proporción aumenta a 82%, es decir 8 de cada 10 habitantes de la provincia experimentaron un hecho de discriminación.
El informe del Mapa Nacional de la Discriminación 2019 de la provincia de Mendoza destaca que con las épocas van cambiando los tipos y formas de discriminación.
Refiere que la Ley N° 23.592 de Actos Discriminatorios, sancionada en agosto de 1988, establece que se considera un acto discriminatorio toda acción por la cual una persona arbitrariamente impida, obstruya, restrinja o menoscabe el pleno ejercicio sobre bases igualitarias de los derechos y garantías fundamentales reconocidos en la Constitución de la Nación Argentina. En ese marco se considera actos u omisiones discriminatorios a aquellos determinados por motivos tales como la raza, religión, nacionalidad, ideología, opinión política o gremial, sexo, la posición económica, condición social o los caracteres físicos.
La discriminación vinculada a etnia, orientación sexual, cultura, religión, nacionalidad, aspecto físico, entre otros ejes temáticos, ha llevado a lo largo de la historia a la violación de los derechos humanos en las formas más extremas y aberrantes.
En el abordaje de esta investigación nacional, en nuestra provincia se realizaron un total de 800 encuestas en las ciudades de Mendoza ciudad, Godoy Cruz, Guaymallén, Las Heras, Luján, Maipú, San Martín, San Rafael, Tunuyán y Lavalle.
Se incluyó a varones y mujeres casi en iguales proporciones de entre 18 y 74 años, con mayor participación de las franjas más jóvenes.
¿Qué se entiende por discriminación?
De los encuestados, 42% la vincula con segregación-maltrato, el 39 % la relaciona con negación de derechos y el 19 % menciona la variable estigmatización-prejuicio.
Por otra parte, la gran mayoría (66%) le atribuyó un nivel de alta importancia como problemática social, un crecimiento de esta valoración respecto de 2013 (53%).
También se evaluó la percepción del nivel de discriminación en nuestro país. Las respuestas se concentran entre mucho (61,7%) y bastante (33,1%), mientras que poco acumula el 4,7% y nada 0,5%. En la investigación de 2013, 48% había señalado que era mucha la discriminación.