Nunca tan punto como ahora

Está claro que para la final de mañana, Real Madrid parte como claro favorito ante un San Lorenzo que, lejos de ser banca, intentará sorprender al equipo “galáctico” para agrandar más su historia.

Nunca tan punto como ahora
Nunca tan punto como ahora

Real Madrid y San Lorenzo cumplieron los pronósticos en semifinales y se clasificaron para la final del Mundial de Clubes, pero si algo dejaron claro sus partidos del martes y el miércoles, respectivamente, es que los españoles son los grandes favoritos al título.

El equipo Blanco llegaba ya como principal candidato a la victoria final y lo demostró desde el primer instante, con un juego sólido y eficaz que le permitió imponer su superioridad contra Cruz Azul mexicano, al que arrolló 4-0.

Una imagen contundente que contrasta con el juego gris que hizo el Ciclón en su debut mundialista, sufriendo mucho y teniendo que ir al alargue ante el Auckland City neocelandés, una formación semiprofesional, para ganar 2-1.

“San Lorenzo sólo tiene canciones”, estimaba el diario español El Mundo al titular su crónica del partido, en alusión a los cánticos de aliento recibidos desde las gradas por los más de cinco mil hinchas cuervos desplazados a Marruecos, que no se cansaron de animar pese al partido sin brillo de sus jugadores.

Es más el propio DT Edgardo Bauza admitió que los suyos habían hecho un mal partido y que habrá que mejorar, pero dijo estar convencido de que San Lorenzo le puede ganar al Real Madrid.

“Estoy conforme porque ganamos. Los noté nerviosos, imprecisos y con muchas pérdidas de balones y muy pocas llegadas”, declaró Patón en la conferencia de prensa posterior al partido.

El elegido como jugador más valioso del partido, Pablo Barrientos, también reconoció, después del sufrimiento de la semifinal, que hubo nervios y que ahora el Merengue supone un salto de calidad al que habrá que saber hacerle frente: “Contra el Real Madrid será durísimo. No nos pusimos a pensar qué hay que cambiar. Esto es fútbol y hay que jugar los partidos. Veremos lo que nos dice el técnico y trataremos de cumplir lo que nos pide para ser dignos rivales”.


Optimismo Merengue
Si en San Lorenzo la sensación general es de alivio y de que habrá que elevar el rendimiento para ser competitivos, la amenaza en el Real Madrid es el triunfalismo y el exceso de confianza, ya que el club se encuentra en un momento tan óptimo que pocos parecen pensar que el Mundial puede escaparse.

La goleada a Cruz Azul, el campeón de la zona Concacaf, fue la 21ª victoria consecutiva del equipo de Carlo Ancelotti, que está en un momento de forma espectacular y que tiene como objetivo terminar a lo grande un año 2014 en el que hizo historia logrando el décimo título de campeón de Europa del club.

La prensa internacional no ahorró elogios para definir la exhibición de fuerza del líder de la Liga española y el propio Ancelotti, que considera que sus jugadores merecen ser los campeones.

“Estos jugadores demuestran cada día su fuerza, su concentración, su organización. En este momento mis jugadores están muy bien, siempre atentos y dando el máximo en cada partido”, señaló el italiano.

Cristiano Ronaldo, la superestrella del equipo Blanco, dio dos asistencias en ese partido, pero no marcó y llegará además con hambre a la final, donde se ha fijado como reto ser el mejor y llevarse el galardón a mejor jugador del torneo, para sumarlo a su impresionante colección de reconocimientos.

Aunque si algo enseñó Auckland en este Mundial es que ser favorito no significa ganar fácilmente, a lo que se agarra San Lorenzo para soñar con la gesta y llegar a la cumbre del fútbol.

Para mañana, Ramos en duda y jugaría James

¿Podrá ser San Lorenzo el que le pare el carro al Real Madrid? Después de haberse clasificado angustiosamente ante el modesto Auckland City, el equipo de Edgardo Bauza tendrá una tarea mucho más ardua mañana, cuando choque con uno de los conjuntos más poderosos -sino el más- del mundo, en otra edición de la Final del Mundial de Clubes.

Los merengues llevan 21 cotejos consecutivos ganando y, en Boedo, apuestan a al menos un empate para sacar provecho en la tanda de penales y levantar el trofeo más importante de su historia. Descansados por haber jugado un día antes, los dirigidos por Carlo Ancelotti ya se enfocan y concentran en el duelo decisivo. Y hay noticias positivas para el DT italiano.

James Rodríguez, quien hace poco más de 10 días sufrió una distensión en su gemelo derecho, se movió a la par del resto y podría ser de la partida en Marrakech (arrancará a las 16.30), aunque el DT se tomará su tiempo para confirmarlo o no.

En caso de que el colombiano regrese a la alineación principal, el apuntado para salir es Asier Illarramendi, quien estuvo presente en la Semifinal ante Cruz Azul.

La otra alternativa es el alemán Sami Khedira, quien ya sumó minutos de fútbol tras una lesión y podría regular el mediocampo. El que está en duda por una molestia muscular (cara posterior del muslo izquierdo) es Sergio Ramos, quien trabajó apartado del grupo. Si el referente de la defensa es baja, aparece el francés Raphael Varane como alternativa.

El que sí se lo perderá es el croata Luka Modric, víctima de un desgarro en su cuádriceps izquierdo, quien de todas formas viajará para apoyar desde la tribuna.

En consecuencia, para buscar el título que le falta, el equipo español alistaría a: Iker Casillas; Dani Carvajal, Pepe, Sergio Ramos, Marcelo; James Rodríguez o Sami Khedira o Illarramendi, Toni Kroos, Isco; Gareth Bale, Karim Benzema y Cristiano Ronaldo.

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