La montañista ecuatoriana Daniela Sandoval se adjudicó anoche el récord femenino al ascender y retornar por la ruta normal de la cumbre del Aconcagua, a unos de 6962 metros de atura sobre el nivel del mar, en un tiempo de 20 horas 17 minutos, informó hoy una publicación especializada mendocina.
La revista online "Cumbres", que cubrió el desafío en el parque provincial Aconcagua, publicó que "visiblemente emocionada y a la vez exhausta, Daniela arribó al puesto de guardaparques de Horcones exactamente a las 21 horas y 17 minutos de la noche" y que fue "recibida con aplausos y felicitaciones por parte del personal allí apostado".
Sandoval, de 27 años, fue asistida en su travesía por el también ecuatoriano Nicolás Miranda, que en 2017 quebró el récord de velocidad de ascenso en la ruta 360° en el Aconcagua.
Ambos son parte del equipo "Ecuador más cerca del sol" y llegaron a Mendoza hace unos días, con tiempo para aclimatarse.
La montañista ecuatoriana quebró así el récord de su colega brasileña Fernanda Maciel, que en febrero de 2016 completó el mismo trayecto en 22 horas y 52 minutos.
"Es un récord notable. Le bajó el tiempo en dos horas y media a Maciel", dijo Pablo Perelló, jefe de Zona de Alta Montaña de la Secretaría de Ambiente de Mendoza, y subrayó que "en condiciones normales, hacer cumbre en el Aconcagua lleva entre 12 y 14 días".
Según informó "Cumbres", Sandoval había intentado superar el tiempo de Maciel la semana pasada, pero a 300 metros de la cumbre las condiciones meteorológicas, con vientos que superaban los 100 kilómetros por hora, no le permitieron continuar.
El reconocido montañista Kart Egloff, que ostenta varios récords, celebró en la red social Twitter el logro de la ecuatoriana al expresar "Nuevo récord femenino en el Aconcagua" y resaltar que mejoró en dos horas la anterior marca.
Guardaparques del Aconcagua confirmaron que la joven salió de Horcones a la una de la madrugada, hizo cumbre a las 13.36 y regresó a ese puesto a las 21.17. Y que se redactó un acta certificando el hecho luego de que la deportista pidiera su registro.
"Para constatar la llegada a la cumbre le entregamos a los andinistas un objeto con el que luego deben fotografiarse en la cima", explicó uno de los guardaparques.