Bienvenidos al "Tiatro" Pulgarcito. No, lector, no leyó mal ni este cronista se equivocó. Frente a la calesita del parque General San Martín está el predio donde se ubica el escenario que tiene más de 70 años de historia. Pero en su entrada, el cartel que lo anuncia no dice teatro, sino "tiatro".
Es que luego de que se descascararan algunas letras de la pintura del cartel original, alguien -seguramente con muy buena intención- quiso darle un rápido mantenimiento al avisador con pintura amarilla, pero sin buena ortografía.
Si bien el dato resulta gracioso, sirve para introducirse en un tema preocupante: el estado del predio -denominado de los Abuelos y los Niños- donde se encuentra el Pulgarcito. Es que la infraestructura del histórico lugar enclavado en el Parque SanMartín deja mucho que desear, producto de la falta de atención que durante años se le prodigó al lugar.
En el último cumpleaños del Parque se anunció que se le iba a dar una renovación para darle mayor trascendencia al predio, que en sus orígenes supo ser el zoológico de la provincia (ver aparte). Luego, el lugar fue visitado por Quino y Julio Le Parc aunque las miradas estuvieron puestas en la escultura que se presentaba y no en cómo estaba el mantenimiento de la zona.
Esta no es la primera vez que se busca reactivar el teatro. En 2001 se elaboró el "Proyecto Pulgarcito", del que participaron lo que en aquel entonces era la Subsecretaría de Cultura provincial y la Facultad de Artes yDiseño de la Universidad Nacional de Cuyo.
La idea era, en medio de la crisis que aquejaba al país, remodelar el lugar y de hecho algunas obras se hicieron, como la renovación de los asientos con quebracho, la refacción de los camarines, la mejora de los canales por los cuales ingresa el agua a la fuente del teatro y de los sanitarios para el público. En cambio, otros trabajos planeados nunca se concretaron.
El camino al abandono
El predio que tiene como centro el teatro es de forma triangular, rodeado por las calles Carlos Thays, Los Plátanos y del Grifo. Dentro hay importantes ejemplares de cipreses, tilos, casuarinas, ceibos, palmeras, paraísos, palmeras datileras, magnolias, grandes cedros, un eucaliptus, un enorme ejemplar de algarrobo español y un bosquecillo de alcornoques, tal como se detalla en la página web del gobierno provincial.
Pero lo que no se dice es que allí también hay piletones con restos de agua sucia que evidencian un largo estancamiento, basura, graffitis en los árboles, maleza, un bebedero -el único del prado- que ya no funciona, un banco-también único ejemplar- de madera desgastada y, finalmente, el ingreso por la calle Los Plátanos, junto al cartel "equivocado" que presenta al teatro, está dañado.
Además, las rejas que rodean al teatro están rotas a lo largo de su perímetro y en algunos lugares ya han comenzado a despegarse del suelo. En el interior del Pulgarcito, las farolas tienen todo el aspecto de haber festejado varios cumpleaños y los durmientes que hacen las veces de asientos se están rompiendo.
En definitiva, el lugar no muestra un estado total de abandono, pero sí da claras señales de que el mantenimiento ha sido bastante pobre en los últimos años.
Nuevo piso y más luz
La actual gestión gubernamental pretende dar nueva vida a este espacio, que es uno de los recorridos obligados por el Parque y que habitualmente es utilizado para montar obras durante la época de Vendimia.
La idea es empezar con las obras a mediados de enero. Las mismas, que no pretenden modificar la estructura general sino arreglarlas, consisten en cambiar los durmientes y el piso donde están apoyados, modificar el escenario y darle una correcta iluminación no solo al teatro sino al predio en general.
"La idea es que el abuelo pueda ir con su nieto a un prado que es muy bonito. Queremos hacerlo en poco tiempo, porque hace mucho que no se hace nada", explicó Oscar Arancibia, de la administración de Parques y Zoológicos. "También queremos poner juegos para los niños y bancos", agregó el funcionario.
Según estimaron desde el Gobierno, el costo de la obra terminada será de un millón y medio de pesos y los trabajos se irán realizando por etapas, para que "pronto" estén terminadas.