Pasó casi una semana desde la elección y el escrutinio que comenzó el domingo a la tarde sigue dando tela para cortar. Ayer, el Frente Cambia Mendoza, a través de un comunicado que firman los presidentes de los partidos que lo integran, con la UCR a la cabeza, hizo foco en las “trampas” que se materializaron en Guaymallén y que temen se extiendan a toda la provincia, en especial el 21 de junio, cuando se definirá al próximo gobernador.
Desde el oficialismo salieron inmediatamente a contestar y, además de negar maniobras en el recuento de votos, resaltaron que salvo las presentaciones del peronista Alejandro Abraham, que en su disputa por la candidatura a intendente con Luis Lobos pidió que se impugnen 130 mesas en Guaymallén, nadie presentó queja alguna a la Junta Electoral provincial.
La cúpula de Cambia Mendoza se valió, para retomar el tema, de una declaración del presidente provisional del Senado, Eduardo Bauzá, a cargo de la Vicegobernación temporalmente por el pedido de licencia de Carlos Ciurca. Según el comunicado, el peronista “confirmó en una entrevista radial que en las elecciones del domingo pasado existieron irregularidades, aunque dijo que 'no hubo fraude'”.
“Desde el principio de esta etapa eleccionaria venimos denunciando y advirtiendo que el Frente para la Victoria estaba buscando todas las maneras posibles para alterar la normalidad del proceso electoral”, describe el frente opositor, cuya fórmula Alfredo Cornejo-Laura Montero el domingo se impuso por casi cinco puntos a la suma de las tres que se presentaron por el oficialismo.
Para fundamentar su acusación, recuerda Cambia Mendoza las peripecias en el partido gobernante que terminaron con el desdoblamiento, el intento de no financiar las campañas como indica la ley de PASO, que en el decreto de convocatoria se omitió el plazo del escrutinio definitivo y que “violaron la veda electoral con propaganda gubernamental y política”.
Pero hay un párrafo que apunta directamente al corazón del gobernador, Francisco Pérez, y que ya tuvo repercusión en Casa de Gobierno. “Durante la noche del escrutinio, en la DIC (Dirección de Informática y Comunicaciones) dependiente del Gobierno Provincial, se manipuló el tiempo de la carga de datos.
Según varios testigos, la misma esposa del gobernador Francisco Pérez, quien no es funcionaria pública, durante la madrugada del lunes repartía certificados de escrutinio, de acuerdo a su propio criterio. Hoy mismo la carga del escrutinio provisorio no está finalizada”.
Según el comunicado, “en Guaymallén, el espíritu tramposo se materializó entre ellos mismos, por eso Lobos y Abraham están mostrando todas sus estafas electorales. Por ellos nos enteramos de urnas con más votos que votantes, boletas falsas con el número cambiado, boletas faltantes e incorporación dudosa de presidentes de mesa, entre otras cosas”.
Agrega: “Todas esas trampas no les alcanzaron para ganar las elecciones provinciales, pero es de esperar que se potencien en las elecciones generales del 21 de junio”.
Con este “temor” instalado, Cambia Mendoza pide a la Justicia “que preste especial atención, tanto para la definición del escrutinio de las PASO como para los comicios del 21 de junio”.
"Falso y malicioso"
En el Gobierno estallaron de bronca apenas conocieron el comunicado opositor. El primero en hablar fue Bauzá, cuyas declaraciones de ayer a la mañana actuaron como disparador. "La presentación de Abraham fue por irregularidades en la confección de las planillas, no por fraude, y él mismo me lo aclaró después de que salí por radio, a través de un mensaje de texto. Me dijo que nunca habló de fraude".
Respecto del escrutinio, recordó que el presidente de la Cámara de Diputados, Jorge Tanús, ofreció aportar más personal para que termine en tiempo el recuento definitivo de toda la provincia, o sea el jueves, el día previo al discurso del Gobernador ante la Asamblea Legislativa.
El ministro de Trabajo, Justicia y Gobierno, Rodolfo Lafalla, tuvo a su cargo el operativo y enfatizó que las irregularidades planteadas por el guaymallino son “errores”, pero de ninguna manera se trató de manipulación para modificar el resultado. Apuntó que en la Junta Electoral no hay ninguna presentación además de la de Abraham.
Consultado por este diario, Luis Puebla, secretario de la Junta Electoral, se mostró sorprendido por el comunicado de Cambia Mendoza: “Hace un rato estuvo con sus apoderados y no me manifestaron ninguna observación. Ellos no han presentado objeciones ni impugnaciones de ningún tipo”.
“Si hubo un cambio fuerte en la diferencia (en el arranque era de 30 puntos) fue porque se cargaron primero los datos de Godoy Cruz y Capital que, por no elegir intendente ni concejales, estuvieron más rápido que el resto de los departamentos, donde fue más complejo. No hubo trampas, eso es falso y malicioso”, aseguró Lafalla.
En el mismo sentido, desmintió que la esposa de Pérez, Celina Sánchez, el lunes a la madrugada hubiera participado en la carga de datos y que había veedores de la oposición en ese proceso.
El titular de la DIC, Martín Wiens, dijo que la carga de datos estuvo a cargo de 70 personas, que no circulan ‘certificados de escrutinio’ como dice la oposición y que a él no le consta que haya estado en ese sector Celina Sánchez.
Ya entrada la noche, desde el Gobierno aseguraban que varios de los titulares de los partidos que integran Cambia Mendoza, habían desmentido al propio Pérez haber firmado la nota.
Desde la UCR aseguraron tener las respuestas de todos aceptando el contenido del comunicado. Pero anoche Gustavo Cairo, presidente del Pro, aseguró a este diario que avalaba el comunicado, excepto la mención de la primera dama, porque no le consta. Richard Battagión, titular del PD, también manifestó diferencias sobre el mismo punto.