Los neozelandeses rindieron homenaje hoy a los 50 fieles muertos en el ataque a dos mezquitas de Christchurch, mientras iban aflorando más informaciones sobre la matanza.
Cuando los restos de varios fallecidos empezaban a ser restituidos a las familias, un listado todavía provisional mencionó detalles de las víctimas y mostró que tenían edades de entre 3 y 77 años, y que al menos cuatro eran mujeres.
El autor de la matanza es un extremista australiano, Brenton Tarrant, quien ante el tribunal que lo inculpó el sábado por asesinatos hizo con la mano derecha un gesto típico de grupos supremacistas blancos.
Este expreparador físíco, "fascista" autoproclamado, documentó su radicalización en un largo manifiesto de unas 70 páginas, repleto de teorías de conspiración e ideas racistas.
Los cuerpos de varias de las víctimas de los tiroteos aún permanecen en el interior de las mezquitas para ser identificados, mientras las familias esperan para comenzar los ritos funerarios musulmanes.
En un cementerio local, excavadoras ya comenzaron a remover tierra y preparar las sepulturas de tantas víctimas.
Según autoridades locales, 34 personas continúan hospitalizadas
El médico Greg Robertson dijo que esos pacientes presentan desde heridas relativamente superficiales hasta "heridas de bala severas y complejas".
Entre los heridos se encuentra una niña de apenas 4 años, Alin Alsati, quien se hallaba en una de las mezquitas acompañando a su padre y recibió tres heridas de bala.
El padre de la niña también resultó herido en el tiroteo. La familia había emigrado recientemente de Jordania, y el padre había abierto una peluquería.
"Por favor, recen por mí y mi hija", dijo en un video publicado en Facebook desde el hospital.