El de mayor convocatoria
22 de julio 1978.
Hubo récord de recaudación para el fútbol vernáculo, personas que no pudieron asistir por la lenta venta de entradas en los puestos aledaños al estadio o que ingresaron ya finalizada la primera parte (desde San Rafael llegaron espectadores que se quedaron afuera). El resultado fue un justo empate y los dos equipos se brindaron por el espectáculo brillante jornada de fútbol que contó con cerca de 45 mil espectadores.
La recaudación que se comunicó luego oficialmente fue: Generales $16.135.400, Plateas $17.450.200. La suma total, entonces, fue de $33.585.600, cifra que es récord absoluto para un encuentro disputado entre equipos mendocinos.
El primero en cancha de Gimnasia y Esgrima
9 de diciembre 1934.
Se lo recuerda por ser el primer clásico que se juega en el reluciente estadio de Gimnasia y Esgrima, inaugurado el 25 de marzo de 1934. Un lleno total festejó la goleada de una tarde soleada.
Entre las filas de ese Lobo estaba el delantero Roberto Irañeta quien fue convocado para disputar la Copa del Mundo de ese, que se disputó en Italia. Ante la negativa de los clubes de ceder a sus jugadores profesionales (el profesionalismo regía desde 1931) la Selección
Argentina debió presentar una formación integrada solamente por futbolistas del Interior del país, provenientes de la Asociación Amateur, entidad que estaba afiliada a la FIFA.
El de la vuelta olímpica
29 de octubre 1939.
Aquella tarde de domingo, Gimnasia se daba el gusto de igualar en cancha de Independiente y dar la vuelta en la cancha del archirrival. El Lobo llegaba puntero aventajando a la Lepra por tan solo un punto de diferencia en la tabla de posiciones. La última fecha del fixture disponía que en la última jornada tenían que enfrentarse.
La particularidad de esa tarde fue que el Blanquinegro dio la vuelta olímpica ante el aplauso generalizado de todos los asistentes. La multitud que había colmado el estadio de Independiente Rivadavia felicitaba al flamante campeón de pie y con palmas. Todo un mensaje. Es sólo el eterno rival deportivo y nada más que eso.
El último en la vieja cancha del colegio nacional
17 de julio 1932.
Esa tarde se jugó el último clásico en la vieja cancha del Colegio Nacional en calle Godoy Cruz al 600, de ciudad. Los cronistas de la radio LV10 por primera vez transmiten en directo las alternativas del encuentro. Estaban subidos al techo del galpón de los Balmaceda y desde las “alturas” relataban las alternativas de juego. Abajo, la apiñada multitud superaba las cinco mil personas detrás de la baranda blanca.
Diario Los Andes y Diario La Libertad sacan parlantes a las calles para que la gente pueda escuchar las alternativas del brillante encuentro por las calles de nuestra ciudad. Era todo un acontecimiento que paralizaba a los mendocinos.
El de la goleada histórica
5 de agosto de 1928.
La tarde que quedó grabada a fuego en la memoria de todos los simpatizantes de Independiente. Fue un verdadero baile leproso, la mayor goleada que se dio. Se dio un 7-2 en favor de Gimnasia, por la Liga Mendocina, entre “el Lobito” y la “Leprita” en la década del ‘90. Ambos clubes disputaban categorías mayores por eso se considera el 6-0 de 1928 como el resultado más abultado. Esa Lepra era un equipo de temer con una delantera demoledora. Había logrado importantes goleadas a muchos equipos en ese torneo de 1928. A los 30 minutos del segundo tiempo, tras el sexto gol, Gimnasia, que estaba con dos hombres menos por lesiones, abandona el campo de juego.
