Con un escenario incierto, por el posible ingreso de nuez del exterior al mercado argentino, y una baja considerable del precio en el mercado internacional, los productores nogaleros de Mendoza tienen un ojo puesto en el plano comercial y el otro en la finca, donde avanza una cosecha afectada por el clima y algunos problemas sanitarios.
Sobre este punto, y contrariamente a lo ocurrido con la mayoría de las producciones de la región, que a raíz de las alteraciones del clima en primavera habían tenido problemas de cuaje, en los nocedales el proceso se dio “sin problemas; al contrario, el año había arrancado con perspectivas de muy buena producción”, comentó Hugo Gottardini, productor del Valle de Uco que empaca y comercializa en el mercado interno y en el exterior.
A poco más de diez días de iniciada la cosecha en sus plantaciones de Tupungato, está lidiando -como la mayoría de quienes están en la actividad- con las complicaciones de una temporada donde el granizo y -particularmente- los problemas sanitarios, hicieron mella en los cultivos.
“Hoy nos encontramos con tres calidades de nueces”, señaló. “Unas, las que fueron dañadas por la piedra, otras sufrieron el ataque de bacteriosis -lo que provocó una caída de frutos considerable, dos meses antes de la cosecha- y las de primera calidad”, que representan “la mayor parte” de la producción del año.
Federico Argumedo, que presta servicios de poscosecha y logística para el sector, señaló por su parte que “hemos tenido un año agrícola muy malo por la incidencia de fenómenos climáticos”.
A raíz de ello, “vamos a tener una merma en el volumen de cosecha -no ponderada todavía, pero va a ser considerable- con una parte de la producción que no es de buena calidad, porque estará marcada por la piedra o afectada con bacteriosis (tizón bacteriano de nogal), y una cierta cantidad de nueces que no van a tener problemas”. De manera que “hay fincas que prácticamente no van a aparecer en el mercado, otras que van a llegar con mercadería dañada, y otras que están en muy buenas condiciones”.
Desde el Sur, Esteban Zapata, con producción de nueces en San Rafael, confirmó que sus nocedales también sufrieron el impacto del granizo y las enfermedades. Aunque tampoco pudo cuantificar el daño, ratificó que también en aquella zona “hubo pérdidas de producción”.
Hugo Gottardini estimó que “las pérdidas de calidad por la piedra no van a ser muy elevadas, porque sólo hubo dos tormentas y en lugares muy cercanos entre sí”, por lo que no alcanzaron a toda la zona productiva.
La bacteriosis, en cambio, “fue generalizada, porque tuvo origen en las lluvias, que se registraron en toda la región”, y la persistencia de humedad hizo poco menos que estériles los tratamientos aplicados.
Así, y aunque aclaró que “hasta el final de la cosecha, hacia fines de mayo, no se podrá saber exactamente cuánto se ha perdido”, estimó que “podría haber entre 15% y 20% menos que el año pasado”, cuando se había registrado una cosecha que fue considerada normal.
El mercado interno
Gottardini aseguró que, al cierre de 2015, "el mercado interno había quedado totalmente limpio de mercadería, e inclusive en alguna medida demandante, porque el año pasado se exportó un porcentaje muy elevado de nueces.
Como no había stock de arrastre en el país, los productores confiaban en que éste sería un buen año para la actividad y que podría comenzar con buenos precios. En realidad, los valores de los que se empieza hablar “no son malos”, apuntó el empresario tupungatino, aunque en el sector “había otras expectativas”.
Según se comenta en ámbitos sectoriales, si los precios están en alguna medida contenidos es por la expectativa que genera la posibilidad de importar mercadería, como parte del paquete de medidas que dispuso el Gobierno nacional a poco de asumir. En este sentido, exportadores chilenos y chinos estarían expectantes para ingresar con su producción al mercado argentino.
Aun así, y aunque prefirió no hablar todavía de valores absolutos “porque recién comienza la cosecha, y se está empezando a formar el mercado”, Gottardini estimó que “los precios del inicio de esta temporada, para la nuez que va a tener por destino el mercado interno, pueden llegar a estar un 25% por encima de lo que recibió el productor en los comienzos del ciclo comercial 2015”.
El sureño Esteban Zapata, en tanto, dijo tener referencias de posibles aumentos de precios (al productor) de “alrededor del 15%” respecto del inicio de la temporada previa. Aclaró, no obstante, que los valores y sus porcentajes de fluctuación “varían mucho, según el segmento del mercado” al que se oriente la comercialización “y los volúmenes que maneje cada productor”.
Está difícil exportar
El caso de la nuez para exportación es distinto. Ahí entran a jugar otros factores. Gottardo explicó que "se ha registrado una baja muy importante en el precio internacional de la nuez, respecto de los valores de venta de 2014 y 2015".
Este comportamiento se explica, por un lado, por “una baja del consumo en Europa, donde la demanda se retrajo porque los precios del producto venían en aumento”. Por otra parte -y esto fue “lo que más incidencia tuvo”, según él-, “la gran oferta -y muy agresiva- de nueces de los Estados Unidos, seguida por la de Chile, que ha aumentado considerablemente su producción”. Los dos países potenciaron esa presión oferente con precios más bajos que los de años anteriores, con la intención de inducir la recuperación de la demanda en los principales mercados del mundo.
Argumedo ratificó que “los precios internacionales son bajos”. Explicó que “California tuvo una cosecha muy importante (ellos ya cosecharon en octubre) y tenían un stock de intervención grande que venía de 2014”, de manera que, aunque empezaron con precios altos a mediados del año pasado, “no tuvieron una respuesta como esperaban del mercado, entonces bajaron mucho lo precios (casi un 18% menos que en 2014)”.
Este escenario de precios internacionales en baja se proyecta a todos los países productores y, en ese contexto, Mendoza no queda al margen de los efectos derivados de la agresividad comercial de los grandes jugadores en el mercado global. En este caso, se espera que -al menos en lo inmediato- el mayor impacto recaiga sobre las nueces mendocinas con destino a exportación.
Aunque tampoco se habló de precio nominal para este segmento del negocio, Gottardini estimó que -distinto de lo que se espera que ocurra con los valores de la mercadería que vaya a quedar en el mercado interno- los productores podrían llegar a recibir, a comienzos de esta campaña, “entre 10% y 15% más que lo percibido en el inicio de la temporada pasada”.
De ello se desprende que se va a pagar un poco menos por la nuez que vaya al exterior que por aquella que quede en el mercado interno. Aun así, y a pesar del aumento de costos, aseguró que “sigue siendo rentable” la producción de nueces. Gottardini reflexionó que “si este año podemos salvarnos, es porque mejoró el tipo de cambio, si no hubiese sido imposible”.
El empresario del Valle de Uco reconoció como positiva la liberación del tipo de cambio en Argentina, pero aseguró que “la fuerte caída del precio internacional de la nuez licuó en gran parte la mejora cambiaria que tuvimos” en el país. A ello hay que sumar que la nuez argentina debe pagar un 4% de arancel para ingresar a Europa.
De manera que se podrán concretar operaciones con el exterior, siempre y cuando los exportadores argentinos sean capaces de llegar con valores similares a los que cotizan estadounidenses y chilenos, e inclusive los chinos, que están haciéndose sentir, también en el negocio global de la nuez. Eso le estaría poniendo un límite al precio que podrán pagar por la nuez al productor local, “si bien ese precio está por encima del inicio de la temporada pasada”, remarcó Gottardini.
Los primeros tanteos
Lo cierto es que hay gente que tiene obligaciones en el exterior, "con lo cual supongo que a medida que la nuez vaya saliendo se irá clarificando el mercado", comentó el empresario Federico Argumedo.
Reveló que “estamos tratando de cerrar contratos y probablemente vayamos a obtener mejores precios que los californianos, pero siempre más bajos que los que logramos el año pasado, y eso nos complica”.
El cultivo sigue creciendo
Según datos relevados por el Cluster de Frutos Secos de Mendoza, una organización sectorial que está en pleno desarrollo, “el cultivo del nogal en la provincia, respecto del resto de los frutales, representa solo el 4% de la superficie implantada, ocupando el séptimo lugar, después de otros frutales de mayor participación”. Pero a pesar de esta posición, el nogal -que ocupa el 84% de la superficie implantada con frutos secos en el territorio mendocino- “es uno de los cultivos de importancia de la provincia, debido a su crecimiento acelerado en los últimos años”.
El Valle de Uco, tradicional zona productora de Mendoza, concentra la mayor superficie implantada. Sin embargo en los últimos años se ha dispersado por el resto de los oasis, empezando por el Sur, Valle de Uco y en menor medida el Este.
.En el año 2010, como parte de su Censo Frutícola Provincial, el Instituto de Desarrollo Rural relevó un total de 3.341 hectáreas, y hasta la fecha, según datos del sector productivo, ha seguido creciendo, tanto en manos de grandes empresas como de medianos y pequeños productores, aunque no hay precisiones sobre el crecimiento que ha tenido el cultivo.
Fuentes privadas, mientras tanto, consignan que las provincias de Mendoza y Catamarca están “cabeza a cabeza” disputándose el primer lugar en superficie implantada con nogales; y les siguen la Rioja, San Juan, Río Negro y otras.
Preocupa el ingreso de fruta
Los conocedores del negocio están más preocupados por el impacto que podría tener en el mercado interno el eventual ingreso de nueces de otros países, que la avanzada comercial de Estados Unidos y Chile fuera de las fronteras argentinas.
En realidad, la entrada a nuestro país de mercadería trasandina no sería más que una muestra de la estrategia de inserción global que los exportadores chilenos pueden llevar adelante, de la mano de una política de gran apertura en materia de comercio exterior. La diferencia, ahora, es que las nuevas reglas del juego económico en Argentina hacen posible su ingreso.
Ante este escenario de incertidumbre, Hugo Gottardini adelantó que, junto a algunos de sus pares, y a través de la Cámara de Tupungato, solicitará el acompañamiento de autoridades provinciales para gestionar, ante la Nación, “la prohibición de la importación de nueces hasta que se haya terminado de comercializar la producción que se logre en la región”.
