"Nos pareció una buena idea y enseguida sumamos nuestro negocio a la campaña, porque creemos que hay que insistir todo el tiempo con los mensajes de inclusión, y en eso, hasta la vidriera de un comercio ayuda", comenta Sebastián, que es encargado de un local de indumentaria deportiva de San Martín.
Su comercio, como otros tantos de la ciudad, se sumó en los últimos días a una curiosa campaña de concientización por el Día Internacional de la Discapacidad, que se celebró ayer.
"La idea ha sido que los comercios acepten vestir sus vidrieras con alguna frase o con alguna mención a la discapacidad, ya sea con el uso de carteles, con maniquíes, sillas de rueda o bastones", explica Fernando Alin, del Centro Amigo del Discapacitado Motor (Cadim), institución que comenzó a propalar la campaña hace más de 15 días, principalmente entre los comercios del centro de San Martín.
En un local de venta de ropas de la calle 9 de Julio hay un maniquí que viste traje, lleva además anteojos oscuros y un bastón blanco en la mano. La gente pasa por la vereda y algunos advierten la situación: "Sí, algunos entran y preguntan por qué tenemos a un ciego en la vidriera", cuenta Mariano, y se ríe: "Creo que todos tenemos que promover la solidaridad y la concientización; ayudar a un ciego a cruzar la calle, no obstaculizar las rampas, hay muchas cosas por mejorar".
Cerca de allí, dos enormes muñecos de peluche adornan la vidriera de una tienda para niños y uno de ellos lleva un bastón en la mano; unas cuadras al sur, en calle 25 de Mayo, un local de ropa para jóvenes ha puesto en vidriera la reproducción de uno de los cuadros de la pintora mexicana Frida Kahlo, cuya vida estuvo cruzada por el infortunio de una enfermedad infantil y por un grave accidente en su juventud que la mantuvo postrada durante largos períodos.
Otro local del centro tiene en su vidriera una silla de ruedas y una inscripción contando que el 3 de diciembre es el Día de la Discapacidad. En total, son cerca de 30 los comercios que se han sumado a la campaña, inédita en la región.
"En un día como hoy suelen haber muchas actividades integradoras; los chicos con algún problema son llevados a un parque o a un playón y allí se hacen diversas actividades", dice Alin, y sigue: "Eso está muy bien, pero nosotros hemos querido apuntar a la inclusión, a que la persona con discapacidad sea vista como lo que es, una más en la sociedad, alguien como cualquiera y por eso es que pedimos usar las vidrieras, donde todos nos paramos a ver qué nos ofrecen"
Cadim atiende a discapacitados de toda la región y los datos que maneja la institución indican que al menos el 10% de la población de la zona Este sufre algún tipo de discapacidad: "En San Martín estamos hablando de unas 12.000 personas; gente con problemas mentales y motrices de nacimiento, pero también adquiridos, porque los accidentes dejan graves secuelas en muchas de las víctimas".
Una de las casas de fotografía de calle 9 de Julio tiene la vidriera demasiado pequeña para montar allí una escena o colocar una silla de ruedas, pero su dueña quiso participar y en la vereda colgó unos globos y debajo la leyenda '3 de diciembre Día Internacional de la Discapacidad. La inclusión es una tarea de todos".