Da la sensación de que el rodaje es una excusa. Una excusa para hablar de otras cosas: más perdurables, más hondas, más urgentes.
Es por eso que, cuando Selva Almada se puso a tomar notas durante el rodaje de “Zama” (la esperada película de la salteña Lucrecia Martel que se estrenó hace dos meses y que fue alabada por la crítica), su interés se posicionó más afuera que dentro del set.
Las notas (porque son eso: notas dispersas) se publicaron bajo el título de “El mono en el remolino” (Literatura Random House, 2017). Alude significativamente a la escena más famosa de la novela, que sin embargo no quedó plasmada en la película: ¿Qué habrá querido decir Selva Almada homenajeando este estancamiento, esta especie de “irse y no”? Quedará en el lector cualquier conclusión.
Sí podemos, desde las primeras palabras, situarnos en el mundo de esta escritora, que sabe desentrañar el otro lado de las cosas y las relaciones que se tejen entre las personas: entre el equipo y los extras, entre los vecinos y el equipo, entre Lucrecia Martel y su entorno, entre algunos actores breves y sus biografías.
En ellos, en los extras (que en su mayoría son qom) se centra la mirada de Selva Almada: capta sus presencias silenciosas, la forma en que acercan la comida a sus labios y las tragedias que soportan sobre sus espaldas. Como ésta: “Meses después del fin del rodaje, una de las primeras mujeres qom en presentarse al casting va a morir, dejando huérfanos a dos nenes y a un chico adolescente que actuaron en la película. El muchacho, tras la muerte de su madre, irá preso por degollar a un vecino”, dice un apunte. Es sintético. Y por eso demoledor.
Son las cosas de una realidad social y humana muy lejana y profunda, que encuentra en este libro una posibilidad de enunciarse. Porque cuando la productora le propuso participar del rodaje no hubo restricciones: tuvo total libertad, dijo en varias entrevistas. En definitiva este punto de vista, que Selva Almada ejercitó ya en sus otros libros imprescindibles (“Chicas muertas”, por ejemplo), es lo que se agradece y hace a estas páginas valiosas.
Y puede que al final las palabras parezcan intensas, sí, pero insuficientes (93 páginas, con mucho espacio vacío y fotos impresas en blanco y negro).
Es decir: demasiadas pocas palabras para algo que grita tan fuerte, que tiene tanto por decir.
"El mono en el remolino. Notas del rodaje de 'Zama', de Lucrecia Martel"
Autor: Selva Almada.
Editorial: Random House, 2017. 96 p. Precio: $ 179.