Está claro que este clásico entre Independiente y Gimnasia no llega en el mejor momento de ambos equipos. Si bien los dos enfrentan el partido con un buen ánimo, luego de sumar, ambos saben que no están mostrando su mejor faceta.
Por esa razón es que las estadísticas empiezan a mandar.
Y se impone diferenciar: tanto la Lepra como el Lobo muestran otras caras cada vez que salen de su cancha y revierten esto ante su gente.
La Lepra en el Gargantini
Si bien Independiente no llega a tener la eficacia que sí tiene Gimnasia en su cancha, los Azules lograron sumar puntos muy importantes.
Los dirigidos por Pablo Quinteros han mostrado muy buenos pasajes de fútbol en su cancha, pero también la contracara ya que perdieron puntos valiosos.
Los Azules del Parque nunca ganaron por más de dos goles de diferencia, pero mostraron buenos pasajes de fútbol. Sólo en dos partidos anotaron tres tantos ante Estudiantes de San Luis y Brown de Puerto Madryn, donde ganó por 3 a 1. Pero lo más preocupante es que nunca se mostró totalmente superior a su rival de turno.
Gimnasia fuera del Legrotaglie
Pésimo. No hay otra palabra que resuma la campaña de Gimnasia como visitante.
Es que el equipo de Sergio Arias perdió 11 de los 13 partidos que disputó en condición de visitante, algo alarmante que no logró solucionar en todo el torneo y que casi le costó el puesto a Sergio Arias.
Fuera de Mendoza sufrió reveses duros, como el 5-1 ante Guaraní en Misiones y el 3-0 ante Sportivo Belgrano en San Francisco, pero sin lugar a dudas la derrota que más se sufrió fue el 1-3 ante Independiente en el clásico “de ida” en el Legrotaglie.
Son dos equipos irregulares y por eso necesitan un envión como el del clásico para lograr una regularidad que les permita llegar tranquilos al final del torneo.
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